La Escuela R Advance es sin lugar a dudas uno de los mejores cursos de conducción deportiva a los que podemos acceder en nuestro país. Dirigido a quienes hayan completado la Escuela R Intensive, o a quienes busquen mejorar su nivel de pilotaje en circuito, el curso de máximo nivel dentro del ‘VW Driving Experience’ ha recorrido este año los circuitos de Ascari (Málaga), Jarama (Madrid) y Montmeló (Barcelona) al volante de los Golf GTI y Golf R. Todavía no hay precios para el año que viene, pero en 2017 ha sido de 320 euros para clientes de Volkswagen y 380 euros para no clientes.
En España tenemos la fortuna de contar con una amplia variedad de cursos de conducción deportiva y segura. Por un lado tenemos agencias especializadas en este tipo de eventos, con ejemplos como Sportdrive, Drivex y Fast ParcMotor. Por otro encontramos asociaciones transversales de la talla de RACE, RACC y CEA. Y por supuesto, no podían faltar las marcas de automóviles; entre otras, Audi, BMW, Mercedes, Porsche, Ford, Volvo y Volkswagen.
Centrándonos en esta última, la firma alemana lleva unos cuantos años ampliando su catálogo de experiencias de conducción, apropiadamente bautizado como Volkswagen Driving Experience. Sin ir más lejos, el curso de pilotaje en circuito Escuela R se ha dividido recientemente en tres distintos: Junior, dirigido a conductores con menos de dos años de carnet; Intensive, para conductores con más experiencia; y Advance, dirigido a quienes han superado el nivel Intensive o, en general, para quienes deseen mejorar su técnica sobre la pista. El pasado domingo se nos presentó la oportunidad de participar en la Escuela R Advance -en el Circuit de Barcelona-Catalunya, nada menos-, y sobra decir que la aceptamos con mucho gusto…
Posiblemente, el mejor curso con "coches de calle"
Se da por hecho que los asistentes a la Escuela R Advance cuentan con una cierta base técnica de pilotaje en pista con coches de calle; pero como nunca está de más refrescar los fundamentos básicos de la conducción deportiva, el curso da comienzo con una fase teórica. Esta primera hora de formación es impartida por el fantástico equipo de pilotos-formadores de la casa con la inestimable colaboración de Luis Moya, actual embajador de Volkswagen y al que todos recordaréis por sus dos campeonatos del mundo de rallies como copiloto de Carlos Sainz. La seguridad es lo primero, de modo que no saldremos a la pista sin haber repasado aspectos como el reparto de pesos del vehículo (incluyendo la frenada regresiva y en apoyo), el control del derrapaje y la trazada ideal para cada curva según nos interese priorizar la velocidad de entrada o la de salida.
Una vez listos para iniciar la parte práctica, nos alegrará saber que el curso Advance está reservado para los Golf GTI y Golf R correspondientes a la última actualización recibida este año. Así, el nuevo Golf GTI cuenta con un motor 2.0 TSI de 230 CV de potencia, mientras que el Golf R sube hasta los 310 CV y, como hasta ahora, equipa el sistema de tracción total 4Motion.
Comenzamos la jornada de conducción con un ejercicio de frenada regresiva. Después de recorrer unos 200 m arrancando desde parado, llegados al punto marcado como inicio de la frenada debemos frenar con la intensidad suficiente como para recorrer un largo pasillo en curva delimitado por conos (que coincide con el final de la recta de meta) y detenernos justo frente al final. Dado que el primer tramo todavía es recto, la idea consiste en aplicar mayor fuerza sobre el pedal durante esos metros para ir retirándola progresivamente. Ya os anticipo que lo más fácil es que nos quedemos cortos; y de ahí la importancia de practicar.
Seguidamente abandonamos la pista principal de Montmeló para dirigirnos a un circuito de tipo “Mickey Mouse” (entiendo que se le llama así por lo de “ratonero”), también delimitado por conos, con secciones alternas de asfalto seco y húmedo. Al volante de un GTI, el ejercicio consiste en completar la vuelta en el menor tiempo posible sin derribar ningún cono. ¿Fácil, verdad? Muy al contrario: los continuos cambios de adherencia, las frenadas sobre asfalto deteriorado y los baches de algunas secciones se ocuparán de que no escapéis con el contador a cero.
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De vuelta a la recta principal del Circuit, toca afrontar otra práctica aparentemente sencilla: la frenada de emergencia. Volveremos a salir desde parado, acelerando a fondo hasta llegar a la primera línea transversal de conos (a unos 120 km/h con el GTI y unos 130 con el Golf R); y justo entonces, ni un metro antes ni uno después, debemos frenar con todas nuestras fuerzas para detener el vehículo antes de la siguiente barrera de conos. La clave está en confiar en la capacidad de agarre de los neumáticos, la potencia del equipo de frenada y la efectividad del ABS. Por lo que pude comprobar, si no frenamos con total decisión nos pasaremos de largo; y ojo, que el Golf R necesita un par de metros más para detenerse por completo: aunque monta discos de mayor diámetro, el mayor peso del conjunto cobra su peaje. Por cierto: es importante mantener el volante completamente recto para evitar posibles balanceos del eje posterior (en plena deceleración, el centro de gravedad se desplaza al eje anterior y por tanto el posterior tiende a “flotar” ligeramente, sobre todo en el caso del GTI, que es de tracción delantera y carga menos peso atrás).
(Mucha) práctica en circuito con los Golf GTI y Golf R
A continuación damos inicio a las dos primeras horas de tandas en pista sobre el circuito completo, alternando los Golf GTI y R, y siempre en compañía del instructor asignado. La primera tanda servirá para que el instructor evalúe nuestras habilidades, nuestros errores y nuestros “vicios” de conducción; y a partir de ahí haremos un repaso de lo que hemos hecho mal, siempre con espíritu de crítica constructiva. Al tratarse del curso más avanzado, el objetivo es lograr la máxima eficacia en pista; y si queremos robar tiempo al cronómetro, la finura suele ser más efectiva que la agresividad.
Después de estas primeras dos horas de adaptación, y pasado el descanso para comer, de nuevo disfrutaremos de otras dos horas y media de tandas en las que tendremos tiempo de sobra para depurar nuestra técnica. No se trata de competir con nadie (de hecho no hay cronómetro ni clasificación), sino de acumular conocimientos y experiencias que difícilmente acumularemos por nuestra cuenta, y menos aún en la carretera. En mi caso concreto, el de una persona con muchos kilómetros de conducción y pocos de pilotaje, doy fe de la efectividad de este curso; y me atrevo a decir que es en el que más he aprendido y también el que más me va a servir de regreso al "mundo real". Así lo creo, en parte por haber conducido coches potentes pero de calle; pero ante todo, por el afán y cuidado que los instructores dedicaron al aprendizaje de todos los participantes.
Y ahora, los precios. Ya sabemos que ningún curso es barato; pero a mi modo de ver, la Escuela R de Volkswagen ofrece una estupenda relación entre coste, experiencia y duración. En 2017, la Escuela R Advance ha tenido un precio de 320 euros para clientes y 380 euros para no clientes. Si os parece caro, consideremos los hechos: el curso dura 8 horas y 30 minutos (más otros 30’ para comer), contamos con instructores de primer nivel (como pilotos, todos ellos han ganado diferentes campeonatos y carreras internacionales), podemos rodar en diversas tandas por circuitos de categoría (Ascari, Jarama y Barcelona-Catalunya) y todas las prácticas son exclusivamente con los Golf GTI y R.
La mala noticia es que esta cita de Montmeló ha sido la última del año; la buena noticia es que VW Driving Experience regresará en 2018 con nuevas ediciones de la Escuela R. Pero la mejor noticia de todas es que, como decía, en España tenemos mil y un cursos de calidad en los que participar.