8 pilotos de Fórmula 1 que fueron deportistas olímpicos

La Fórmula 1 es, posiblemente, el deporte donde más factores afectan a la victoria. Todos los que sois fans de este motorsport lo tendréis más que interiorizado: es un deporte muy exclusivo, emocionante y tremendamente versátil. La pericia de un piloto no es nada sin un equipo que apoye en cada pit stop y es un deporte donde cada milésima de segundo cuenta. A lo largo de la historia de la Fórmula 1 hemos tenido muchos momentos de muchas emociones, pero existe una lista de 8 pilotos que se han pasado el juego.

8 pilotos que han podido competir e incluso destacar en las carreras y además cuentan en su haber, haber sido deportistas olímpicos. En este reportaje vamos a hablar de estos diez deportistas que una vez colgado el mono, casco y guantes se enfundaron el traje de olímpicos y lograron hitos increíbles. Todo ello sin olvidarnos de lo duro que es un ciclo olímpico y lo complicado que es acabarlo con medalla.

Aprovechando el cierre de los Juegos Olímpicos de París 2024, vamos con este reportaje de pilotos olímpicos, a ver qué os parece.

Alex Zanardi es una figura tanto en la Fórmula 1 como en el los Juegos Olímpicos y Paralímpicos. Su carrera en la F1 comenzó en 1991 con el equipo Jordan, y aunque corrió en 41 Grandes Premios, solo alcanzó dos podios sin lograr una victoria. La verdadera resiliencia de Zanardi se manifestó tras un grave accidente en 2001, que le costó las dos piernas. En lugar de rendirse, se reinventó como ciclista adaptado, logrando un éxito monumental en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, donde ganó dos medallas de oro en handbike. 4 años más tarde en los JJ.OO de Rio 2016 consiguió la medalla de oro en contrarreloj de ciclismo de mano H5 y medalla de plata en pelotón.

La segunda medalla coincidió exactamente con el 15º aniversario de su accidente en Laustzring. Para más honores, a parte de estas 4 medallas olímpicas, Zanardi compitió en el Campeonato Mundial de Ironman en 2014 completando los 226 km de recorrido en 9:47´17".

Prince Bira de Siam, conocido también como Bira, fue una figura fascinante tanto en la Fórmula 1 como en el deporte de vela. Compitió en 19 Grandes Premios de F1 durante los años 50, obteniendo un podio en su debut en el Gran Premio de Suiza de 1954. Además de su carrera en el automovilismo, Bira se distinguió en los Juegos Olímpicos de 1952 en Helsinki, donde participó en la categoría de vela. No consiguió medalla, pero tenemos que señalar que Birabongse Bhanudej Bhanubandh (que así se llamaba) tampoco era un apasionado del motor hasta que pudo conducir un MG de la época y dejó de lado su pasión por la escultura para llegar a la F1 como piloto.

Alfonso Antonio Vicente Eduardo Ángel Blas Francisco de Borja Cabeza de Vaca y Leighton, XI marqués de Portago, más conocido como Alfonso de Portago fue el primer español en llegar a la Fórmula 1 con la Scuderia Ferrari. Debutó en el Gran Premio de 1956 y, en solo 6 Grandes Premios, logró una segunda posición en el Gran Premio de Gran Bretaña. Su carrera prometía mucho, pero se truncó trágicamente en 1957 cuando perdió la vida en un accidente durante el Gran Premio de Alemania. Alfonso participó en los JJ.OO de invierno de 1956 en bobsleigh, la famosa prueba de trineo de velocidad acabando en cuarta posición y fue bronce un año más tarde en Sankt Moritz.

Divina Galica, una piloto británica que dejó su marca en la Fórmula 1 durante la década de los 70, compitió en 3 Grandes Premios con el mejor resultado de un 14º puesto. Más allá de las carreras, Galica tuvo una destacada carrera en el esquí alpino y slalom, compitiendo en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1964, 1968 y 1972, siendo en estos capitana del equipo de Sky de Reino Unido y alcanzando el récord de velocidad (124 mph).

Sin duda, una amante nata de la velocidad y la competición.

Roberto Mieres, un piloto argentino con una carrera bastante intensa en la Fórmula 1, participó en 17 Grandes Premios y logrando tres cuartos puestos y dos quintos que le dieron 13 puntos en el campeonato. También es poseedor del récord de adelantamientos en un Gran Premio, pasando del puesto 32º al 6º. Años más tarde se pasó a la prueba de los 1.000 km de Daytona ganando con un Porsche 718 RSK.

Su talento no se limitó a las pistas, ya que también mostró habilidades vela, llegando a los juegos olímpicos de Roma de 1960 y compitiendo contra Prince Bira. Mires acabó 19º en la prueba de Vela Clase Star.

Ben Pon, nacido en 1936, fue una figura multifacética cuyo nombre es reconocido en diversos campos del deporte y el comercio. Su incursión en la Fórmula 1 fue breve pero significativa: participó en el Gran Premio de los Países Bajos de 1962. Aunque su carrera en la F1 no deslumbró con grandes apariciones si disfrutó más del trazado de las 24h de Le Mans con dos primeros puestos y un segundo en 6 participaciones.

Más allá de su carrera en el automovilismo, Pon destacó en el tiro deportivo, representando a los Países Bajos en los Juegos Olímpicos de Verano de 1972 en Munich. En la disciplina de tiro al plato (skeet), terminó en la posición 31.

Said se hizo conocido en el automovilismo, comenzando con su debut en las 12 Horas de Sebring en 1953, donde terminó en el 14º lugar con un Frazer Nash Mille Miglia. Fue el primer americano en ganar una carrera de autos en Europa después de la Segunda Guerra Mundial. En 1954, Said cambió a un Ferrari 500 Mondial Scaglietti y tuvo destacadas actuaciones, incluyendo un 3º lugar en el Circuito de Senigallia y un 2º en el Trullo d’Oro. Su habilidad en las carreras le permitió establecer el récord de velocidad post-Segunda Guerra Mundial en el Daytona Beach and Road Course en 1955, al promediar 170.538 mph en un Ferrari Fórmula 1 de 1954.

Además de su carrera en automovilismo, Said se aventuró en el bobsled, participando en dos Juegos Olímpicos. En Grenoble 1968 y Sapporo 1972, Said demostró su versatilidad al competir en bobsled, logrando su mejor resultado en la posición 10ª en 1972. En los Juegos Olímpicos de 1968, compitió contra otro piloto de carreras convertido en bobsledder, Robin Widdows.

Otro piloto que amaba la velocidad en pista y en el trineo. Inició su carrera con un MG Midget y un Lotus 23, ganando el Campeonato de Clase C de Autosport en 1965. Al año siguiente, avanzó a Fórmula Tres y, en 1967, se destacó en Fórmula Dos con un Brabham BT23, ganando la Rhine Cup en Hockenheim. En 1968, Widdows tuvo la oportunidad de participar en un Gran Premio Mundial, compitiendo con un Cooper en el Gran Premio de Gran Bretaña en Brands Hatch, aunque tuvo que retirarse por problemas de encendido. Su carrera en Fórmula Dos continuó hasta 1970 con un Brabham antes de retirarse de las competiciones de monoplazas.

Más allá de las pistas de carreras, Widdows compitió en bobsled en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1964 en Innsbruck y 1968 en Grenoble, siendo uno de los pocos atletas en participar en ambas disciplinas olímpicas y de Fórmula 1, 2 y 3.