El Porsche Turbo cumple 50 años
ACTUALIDAD

El Porsche Turbo cumple 50 años

Judit Florensa

Judit Florensa

0 opiniones

La denominación Turbo en los modelos Porsche ha cumplido medio siglo de vida. El primer vehículo de producción en serie con el que la marca alemana inició esta era fue el 911, uno de los deportivos más icónicos. Cabe matizar que antes del lanzamiento de este ejemplar, Porsche ya había acumulado una vasta experiencia en el mundo de la competición, donde llegó a cosechar grandísimos éxitos.

Una cita en Kallenberg

Porsche 911 Turbo de 1975 y Porsche 944 Turbo de 1989
Porsche 911 Turbo de 1975 y Porsche 944 Turbo de 1989

Con motivo de este hito, la firma germana nos citó en Kallenberg, una población a escasos kilómetros de la fábrica de Stuttgart, donde se ubica el conocido como almacén secreto de Porsche. Recibe este nombre porque está situado en medio de un polígono industrial, no tienen ningún distintivo que lo identifique con la marca y, desde fuera, las instalaciones se ven sencillas e incluso antiguas. Vaya, que la nave pasa totalmente desapercibida. Nadie diría que al otro lado de la puerta puedes hacer un viaje por la historia de la compañía a través de los numerosísimos modelos que allí se guardan.

Porsche tiene una colección de casi 750 vehículos. Entre 300 - 400 están en Kallenberg, donde puedes encontrar modelos clásicos, actuales, de competición, prototipos e incluso algunos que fueron proyectos secretos y de los que no poseen ningún tipo de documento al respecto. Otras 100 unidades están distribuidas alrededor del mundo en distintos eventos y otros 80 forman parte de la exposición permanente que hay en el Museo de Stuttgart. Han fijado el límite en estos 80 porque consideran que una cifra superior iría en detrimento de la capacidad de atención de los visitantes.

El Porsche 959 con el que René Metge ganó el Rally París Dakar de 1986.
El Porsche 959 con el que René Metge ganó el Rally París Dakar de 1986.

Volviendo a Kallenberg, te pones a caminar por los pasillos de la nave y te vas encontrando con modelos de todo tipo y época. Te puede aparecer un 919, las 8 generaciones del 911, un GT3 RS, un Carrera GT o bien otras joyas como el par de unidades del 959 con los que René Metge y Jacky Ickx consiguieron la victoria y la segunda posición en el Rally París Dakar de 1986. Y todo en apenas unos metros. La nave también tiene taller e incluso lavadero, de forma que el personal se puede encargar allí mismo del mantenimiento para poderlos conservar en las mejores condiciones.

El pistoletazo de salida con el 911

El Porsche 911 Turbo 2.7 del 1974 que Ferry Porsche regaló a su hermana Louise Piëch por su 70 cumpleaños.
El Porsche 911 Turbo 2.7 del 1974 que Ferry Porsche regaló a su hermana Louise Piëch por su 70 cumpleaños.

¿Sabéis qué modelo nos esperaba en Kallenberg? Nada más y nada menos que el 911 de 1974 que Ferry Porsche regaló a su hermana Louise Piëch por su 70 cumpleaños. Montaba un motor de 6 cilindros bóxer de 2.7 litros y declaraba 240 CV. Alcanzaba los 100 km/h en 5.5 segundos y llegaba a los 250 km/h de velocidad punta. Esta primera unidad tenía algunas particularidades. La carrocería era estrecha, no tenía esos pasos de rueda tan voluminosos y por dentro lucía un tapizado de cuadros estilo tartar, un diseño que se ha incorporado en algunos logos y distintivos de la marca.

Los interiores de estilo Tartar del 911 Turbo de Louise Piëch.
Los interiores de estilo Tartar del 911 Turbo de Louise Piëch.

Con el 911 arrancó la era turbo de Porsche en sus modelos de producción en serie. Un año más tarde, en 1975, se lanzó el 911 Turbo 3.0, conocido como 930, que crecía en cilindrada hasta los 3 litros y aumentaba en potencia hasta los 260 CV a 4.000 rpm. Este equipaba una caja de cambios manual de 4 velocidades, tenía aletas más anchas y un chasis modificado, además de barras estabilizadoras más gruesas. De serie venía equipado con interiores completamente de cuero y estaba pintado en un característico verde hielo metalizado. ¿Y sabéis lo mejor de todo? Que fue uno de los 6 modelos que Porsche puso a nuestra disposición para poder probar en ruta. Ponerte al volante de este mito es como trasladarte al pasado porque transmite sensaciones que solo los coches de cierta edad son capaces de hacer. Con mucha carga de peso detrás - por la ubicación del motor -, la entrada a veces un poco brusca del turbo o el tacto y dureza de sus mandos, da como resultado una conducción que puede llegar a ser incluso estresante si no estás habituado. No es precisamente sencillo de manejar, aunque la experiencia resulta inigualable.

El apellido Turbo más allá del 911

El 911 Turbo 3.3 de 1975 (930) en su característico verde hielo metalizado.
El 911 Turbo 3.3 de 1975 (930) en su característico verde hielo metalizado.

Y vale que el 911 es uno de los más icónicos de la marca, pero la denominación turbo se ha usado en distintos modelos para hacer referencia a las versiones más potentes y vitaminadas. Es el caso de otra de las unidades que nos dejaron probar: el 944 Turbo Coupé de 1989. Este 4 cilindros en línea de 2.5 litros tiene sus orígenes en el mundo de la competición y cuenta con una muy buena distribución de pesos. Y eso se nota en marcha. Me llevé una grata sorpresa a la hora de conducirlo porque me lo esperaba más complicado. Pero nada más lejos de la realidad. Me sorprendió su suavidad, facilidad de manejo, agilidad y baja rumorosidad. Un coche comodísimo y muy agradable. Este 944 sí que se cumple el concepto de deportividad aprovechable para hacer un uso diario. El motor ubicado en la parte delantera y refrigerado por agua ofrecía 250 CV y contaba con ABS, suspensión deportiva, caja de cambios manual de 5 velocidades y discos de freno con ventilación interna.

Suscríbete a la newsletter

Suscríbete a la newsletter

Si quieres estar al día de nuestras noticias, tienes que tener una cuenta en coches.net.

No todo va de clásicos

Taycan Turbo, 944 Turbo de 1989, 911 (992) Turbo S, 911 Turbo 3.0 de 1975, Panamera Turbo de 2010 y el primer Cayenne Turbo S de 2006.
Taycan Turbo, 944 Turbo de 1989, 911 (992) Turbo S, 911 Turbo 3.0 de 1975, Panamera Turbo de 2010 y el primer Cayenne Turbo S de 2006.

Justo después del 944 me tocó subirme en el Panamera Turbo de 2010. Así que ya os podéis imaginar el contraste. Al entrar te acomodas en unos espectaculares interiores de color rojo que proporcionan una sensación súper envolvente y arrancas ese motor de 8 cilindros en V, biturbo, con nada más y nada menos que 500 CV, que llegan a superar la barrera de los 300 km/h de velocidad máxima. Un portento que de serie viene equipado con transmisión de doble embrague y el llamado Porsche Traction Management (PTM), un sistema que se encarga de distribuir la potencia y que, en modo básico, transfiere el 62% de ésta al eje posterior y el resto a las ruedas delanteras. Tuve la sensación de conducir un coche súper ágil a pesar de sus dimensiones y de sus casi 2000 kg. Me pareció bastante reactivo, con una dirección muy directa y una frenada descomunal, con la que tienes que tener mucho tacto para no acabar desnucando al copiloto.

Justo después fue el turno del primer Cayenne Turbo S, que vio la luz en el año 2006. Este 8 cilindros en V, biturbo, entrega 521CV – 71 más que en la versión Turbo –. Cuenta con un chasis robusto, suspensión neumática ajustable, PTM, tracción a las cuatro ruedas y llantas de 20 pulgadas. Y no faltaron otros dos modelos de última generación, como el 911 (992) Turbo S y el Taycan Turbo. Con posibilidades de configuración infinitas, avances tecnológicos a la última y sensaciones de conducción realmente excitantes, incluso con el silencio del Taycan, del que ya conocéis las cifras. De 0 a 100 km/h en tan solo 2,7 segundos con Launch Control y con un par descomunal de 890 Nm que pegan una patada considerable cuando pisas con contundencia. Es lo que tiene poder exprimirlo en las Autobahn, esos tramos de carretera en Alemania que no tienen límite de velocidad.

ADN Racing

El 956, el prototipo de clase C con el que Porsche arrasó en las 24 Horas de Le Mans de 1982.
El 956, el prototipo de clase C con el que Porsche arrasó en las 24 Horas de Le Mans de 1982.

Porsche es sinónimo de altas prestaciones y es una firma que plasma a la perfección la aplicación de los avances desarrollados en competición a los modelos de calle. Para poner énfasis en esta cuestión, los organizadores nos prepararon una sorpresa en la parada que hicimos para comer. Allí nos esperaba el 956 del grupo C con el que Porsche arrasó en las 24 Horas de Le Mans de 1982, después de inscribir tres unidades de este modelo y terminar en primera, segunda y tercera posición. Nos trajeron el que ganó con de Jacky Ickx y su compañero Derek Bell y tuvimos el placer de verlo en acción de la mano de Marc Lieb, piloto oficial de Porsche, con varios títulos en su bolsillo y ganador de las 24 Horas de Le Mans en 2016. Un prototipo de aerodinámica avanzada, de tan solo 820 kilos y con un motor bóxer de seis cilindros, biturbo y una potencia de 640 CV. Todo un lujo para la vista, los oídos… ¡y el olfato!

Galería de fotos de El Porsche Turbo cumple 50 años

Opiniones de El Porsche Turbo cumple 50 años

Forma parte de nuestra comunidad

Forma parte de nuestra comunidad

Si te ha gustado nuestro artículo y quieres dejar tu opinión, tienes que tener una cuenta en coches.net.