Combinación impecable
La familia BMW sigue creciendo y para muestra la versión que hoy probamos en Coches.net. Se trata de un Serie 4 con el apellido Gran Coupé. ¿Pero no habíamos quedado que la serie 4 había nacido para enmarcar a las carrocerías coupé de la marca? Y así es. Lo que ocurre es que BMW ha creado un coupé con cuatro puertas -aunque no es la primera vez que lo hace ni que lo llama “Gran Coupé”- y ha conseguido un resultado fantástico.
No cabe ninguna duda de que BMW está llevando a cabo una clara expansión de su gama de modelos que encamina a la marca a cubrir, prácticamente, casi todas las categorías entre los Premium. De hecho, este coche es una respuesta a modelo de parecido planteamiento como el Mercedes CLS, el Audi A5 Sportback o el Volkswagen CC. Más allá de las estrategias comerciales de la marca de Munich, debemos decir que el nuevo serie 4 Gran Coupé nos ha encantado y que está tan bien resuelto que puede incluso canibalizar a otros modelos de la propia marca, tanto el Serie 3 berlina como el Serie 3 GT.
El coche nos ha gustado tanto a nivel de estética como dinámicamente. Las motorizaciones disponibles son el 418d y 420d de cuatro cilindros y 143 y 184 CV respectivamente, en lo que se refiere a los propulsores diesel, mientras que en gasolina está disponible con motores 420i de cuatro cilindros y 184 CV, 428i -también cuatro cilindros- de 245 CVv y, finalmente, el seis cilindros 435i de 306 CV.
Tanto el 428i como el 420d están disponibles también con tracción integral permanente xDrive. De serie los cambios son manuales de seis relaciones y opcionalmente se puede disponer de la caja automática de 8 marchas. La suerte, en ocasiones, se alía con uno. ¿Adivináis qué propulsor monta nuestra unidad de pruebas? Así es, habéis acertado: el 435i de 306 CV con cambio Steptronic. ¡Fenomenal!
Espectacular
En mi opinión, estéticamente es de los coupé/berlinas más bonitos del mercado. Precioso. Sé que cada uno tiene sus gustos y que quizá algunos de los lectores no estaréis de acuerdo, pero en ese terreno cada uno puede mostrarse sin temor a errar, ¿no os parece? Dicho esto, decir que el Gran Coupé mantiene las medidas del dos puertas, es decir, 4,638 metros de longitud, 2,810 metros de batalla y 1,825 metros de anchura, mientras la línea del techo se prolonga en 11,2 centímetros, incrementando su altura en 1,2 cm, ofreciendo así “algo más” que el Coupé en las plazas traseras y aprovechando también el hecho de disponer de cuatro puertas.
Su “estampa” es espectacular, deportiva y elegante. Combina a la perfección la deportividad de un coupé con las cualidades de un berlina pero con un estilo muy atractivo. La “caída” de la parte posterior del techo y las puertas sin marco logran que tenga el look del coupé que es, consiguen que las cuatro puertas “no molesten” en absoluto a la estética.
El frontal guarda la línea habitual de la marca -nuestra unidad disponía de faros dobles redondos de diodos que le dan un aspecto muy dinámico- y que encaja a la perfección con un lateral de líneas fluidas en el que destacan las salidas de aire “air breathers” tras los pasos de rueda delanteros que, en principio, tienen la misión de canalizar el aire de manera más eficiente evitando que genere remolinos en los laterales de la carrocería.
En la zaga -mas corta y alta- toma protagonismo el portón del maletero en sustitución del capó de la berlina. Un portón que da paso a un espacio de carga de 480 litros de capacidad -igual que el del Serie 3 berlina, pero 35 litros mayor que el de los Serie 4 Coupé-. Con los asientos posteriores plegados alcanzaremos los 1.300 litros de capacidad en un espacio en el que dispondremos de ganchos y anillas para sujetar la carga en los laterales y sobre el propio piso.
Imagen deportiva
El 435i Gran Coupé que la marca nos proporcionó para esta prueba era acabado Sport -está disponible también en los acabado Modern y Luxury- e incorporaba además el Kit deportivo M que, por 4.317 €, lo dota de un paquete aerodinámico con entradas de aire de mayor tamaño, difusor específico, suspensión deportiva M, molduras de entrada M, llantas de aleación de 18” de radios dobles, molduras interiores de aluminio, asientos delanteros deportivos y volante M de cuero. En el interior pocos cambios respecto a los Serie 3 y Serie 4 Coupé.
El salto de calidad que BMW dio en esta última generación, se mantiene en el Gran Coupé que sigue ofreciendo una posición de conducción natural, unos asientos confortables, gran facilidad y comodidad para la utilización de los mandos -empezando por el iDrive- la clara información del cuadro de instrumentos y la fantástica y visible pantalla de alta resolución del navegador. Como siempre, dispone de un volante de grosor y tacto excelente que acciona una dirección rápida y precisa. No podemos acabar de hablar de su interior sin comentar las diferencias de las plazas traseras respecto al Coupé.
Pese a no disponer del mismo espacio que un Serie 3 berlina, el del Gran Coupé es algo más generoso que el del dos puertas gracias a que la altura al techo es un poco más holgada, a la “prolongación” hasta la puerta de cada respaldo con una pieza acolchada redondeada que da amplitud a los ocupantes y a que los asientos están situados en una posición más baja. Con todo, en nuestra opinión el Gran Coupé cumple a la perfección sus objetivos en lo que se refiere a ofrecer ese plus en espacio y confort respecto al Coupé de dos puertas laterales.
¡Qué lástima!
Sí, qué lástima que las opciones sea tan costosas. Aunque esta última generación llega mejor equipada, para disfrutar de todas las posibilidades (que son muchas) que la marca nos ofrece tendremos que recurrir a los “extras” para dotarlo con lo que nos gusta. Veamos. El Gran Coupé 435i de serie dispone de airbags frontales de conductor y pasajero, de cabeza delanteros y traseros y laterales delanteros. De serie también lleva control de tracción -DTC-, control de estabilidad -DSC-, control de frenada en curva -CBC-, dirección asistida eléctrica (EPS) con Servotronic, Driving Experience Control (adaptación individual de la tracción y del tren de rodaje), faros antiniebla, faros bixenón, luces de circulación diurna LED y función Auto Start Stop. Desde luego hay más, pero estos son los principales elementos que equipa de serie nuestro protagonista. Así, el coche cuesta 55.600 €.
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Veamos que ocurre cuando le “incorporamos” algunos de los paquetes que BMW nos ofrece. Empecemos por los acabados. Tanto si nos decantamos por la Luxury Line, que incluye llantas de aleación 8 x 18 -225/45 de radios múltiples, tapicería de cuero "Dakota", revestimiento de madera noble "Fineline" antracita, molduras de entrada en aluminio con anagrama, parachoques con volúmenes específicos en cromo de brillo intenso, como si lo hacemos por el Sport Line, que incluye asientos deportivos, o el Modern Line, con molduras diferentes y tapicería de cuero y tela, tendremos que pagar 2.342 €. Pero queremos más. Si le añadimos el Paquete Seguridad, con advertencia de cambio de carril entre otros elementos, nos costará 1.508 €. Si queremos el Paquete Confort, con cámara para marcha atrás, control de distancia de aparcamiento trasero y acceso de confort -sin llave- como principales opciones, pagaremos 2.228 €.
El más costoso es el Paquete Innovación que amplía el contenido ampliado del cuadro de instrumentos, el Head-Up Display, Navegación Professional, reproductor de DVD, pantalla fija de 8,8", Disco duro con 20 GB para audio y reconocimiento de señales. Con este paquete nuestro coche irá muy bien equipado pero para ello tendremos que desembolsar 4.367 €. También se puede equipar con opciones individuales como el sintonizador de TV -2.096 €- o llantas específicas de 19” o el navegador Business con pantalla de 6,5” por 1.961 €. Pues lo dicho, qué lástima. Pero ya se sabe, la calidad, el confort y el lujo se pagan.
Al gusto
El tacto general de los coches de la firma bávara ha hecho posible que el conocido eslogan comercial de la marca “me gusta conducir”, sea una realidad cuando estás a los mandos de un BMW. El confort de marcha, la respuesta del propulsor y, sobre todo, el tacto de dirección lo hacen especial. El motor de seis cilindros de nuestra unidad ofrece 306 cv a 5.800 rpm y un par máximo de 400 Nm entre 1.200 rpm y 5.000 rpm. y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,5” “arrastrando” un peso 1.650 kg.
Sin duda unos datos que nos dan una idea de lo que puede ser conducir el 435i Gran Coupé. Como hemos comentado, el cambio de nuestra unidad era el Steptronic de ocho relaciones y junto a la palanca de cambios situada en la consola se sitúa la tecla con la que accionaremos los diferente modos de utilización como son el ECO PRO, CONFORT y SPORT y SPORT+. Con el ECO tendremos los parámetros adecuado para reducir consumos con menos repuesta general del motor y con la posibilidad de circular “a vela” cuando no estemos acelerando.
Con todo, los consumos van más allá de los 8,5 litros “afinando” y aumentan notablemente, como es normal, en conducción deportiva. El modo CONFORT es el más equilibrado y quizá más adecuado a un uso cotidiano. Como su nombre indica el modo SPORT cambia parámetros para obtener la máxima repuesta del motor y cambio, una dirección más dura y un reglaje de suspensión más firme si disponemos de la opción adaptativa.
Gran motor, gran chasis
Sabiendo que disponemos de todas estas posibilidades de uso y de las grandes prestaciones que nos ofrece su motor, nos disponemos a disfrutar de él por todo tipo de carreteras. En el trayecto hacia la carretera “de curvas” en la que se hicieron las fotos, no hubo ninguna sorpresa. Una maravilla lo mires por donde los mires. Cómodo, aplomado, estable, rápido si quieres… Ya en vías mixtas las sensaciones siguen siendo muy parecidas.
El 435i Gran Coupé transmite efectividad y eficacia. El aplomo en curvas largas y rápidas es excelente y permite rodar con gran sensación de seguridad. Si acaso, el cliente algo “racing” notará cierta morbidez de la suspensión si viajamos en ECO o en CONFORT pero nada que no se pueda arreglar, a su gusto, utilizando la tecla situada a lado izquierdo de la palanca de cambios.
Por cierto, hablando de cambios, ¡qué rápido nos acostumbramos a lo bueno!. Es lo que pensé cuando, ya en carreteras en las que las curvas se sucedían, buscaba instintivamente las levas del volante. ¡Pero no estaban! Y aunque utilizando la palanca en modo secuencial el resultado es óptimo, la sensación no es la misma. Lo dicho, nos acostumbramos fácil a los lujos…
Puestos en modo “vamos allá” y con la intención de averiguar cuánto deportivo era nuestro Gran Coupé, le exigimos el máximo en carreteras en las que, a priori, no debía sentirse muy a gusto. Pero de nuevo nos sorprendió. Pese a que es un coche grande -además de un gran coche-, de que pesa más de tonelada y media y de que no se trata de un deportivo radical, su respuesta y comportamiento en zonas viradas es envidiable. Con el modo Sport + conectado -que además de hacer las funciones del Sport desconecta parcialmente el control de tracción-, es un coche rápido y divertido porque te deja conducir sin que los controles te molesten, pero “estando ahí” para salvar situaciones límite.
El motor no es explosivo, sin embargo, acelera con contundencia hasta alcanzar las 6.400 rpm -aunque un poco antes da el máximo- y te catapulta hacia la siguiente curva a una velocidad fantástica. Quizá la respuesta no asusta pero es muy, muy efectiva. Pese a su volumen y peso, el Gran Coupé se conduce con facilidad, se inscribe en los virajes de un modo casi natural, el subviraje es mínimo -aunque para evitarlo pide una conducción fluida y sin frenadas espectaculares antes de la curva- y la estabilidad general, tanto en zonas lentas y enlazadas como en virajes más rápidos, excepcional. La dirección, como siempre, exquisita. Es precisa, rápida y le da al coche un plus difícil de igualar. Tampoco desentonan los frenos que ejercen su cometido de muy buen modo, aunque para los más exigentes hay un conjunto opcional con el Paquete deportivo M.
Un acierto
Nuestra opinión es que el Gran Coupé es un acierto. Tiene todo lo bueno de un berlina y la deportividad y el estilo del un deportivo coupé. Es elegante, confortable y han conseguido mejorar todo lo mejorable, en cuanto a espacio para los ocupantes y capacidad de carga se refiere, respecto al Coupé. Sinceramente, dinámicamente poca pegas le podemos poner. Por el contrario, no nos ha gustado la visibilidad trasera y lateral y la altura de los asientos traseros es algo baja. Pero poco más, la verdad. Como siempre, nos gustaría que el precio fuera menor y que las opciones fuesen más asequibles, pero eso es otra historia…
Venga a malgastar los euros.....coches de 70 mil euros que con 5 años ya los ves por 20mil€ y bajando....a clase de contabilidad tendrían que ir muchos que escriben por aquí,saludos.