El BMW 135i Cabrio es después del M Coupé la versión más cara de toda la familia de la Serie 1. Es por tanto uno de los modelos más exclusivos de la gama Serie 1 y por tanto de la marca bávara. El grueso de las ventas de este modelo lo atesoran los motores gasolina y diesel de pequeña cilindrada. Sólo un reducido número de clientes se decide a pagar más de 50.000 € por un BMW Serie 1. Poco más de 7.000 € más es lo que cuesta un Porsche Cayman, la versión más económica, pero un Porsche al fin y al cabo. Lo mejor de todo es que con este cabrio la firma bávara nos ofrece un completo programa de personalización mediante una interminable lista de opciones. De este modo si ya nos parece caro el precio de salida del 135i, imaginad hasta donde puede llegar en el caso que empecemos a seleccionar opcionales a diestra y siniestra. Es de agradecer que BMW, al igual que Audi, siga apostando por las capotas de lona y no se pase a los coupé-cabrio como es el caso de un gran número de marcas.
Diseño
A nivel estético tanto las carrocerías Coupé como Cabrio de la Serie 1 de BMW han recibido recientemente un restyling. Para empezar el faldón delantero cuenta con un nuevo diseño, del mismo modo la entrada de aire principal del parachoques frontal también percibe un cambio de estilo gracias a una línea embellecedora transversal de color negro. En el faldón frontal también cuenta con unas ranuras verticales de nuevo tamaño. Este diseño no es para nada casual, los técnicos de la marca bávara lo han creado con el objetivo de canalizar el aire hacia los pasos de rueda y de esta forma crear una especie de cortina de aire sobre la cara de las ruedas delanteras. Con esta solución se logra reducir en gran manera la resistencia aerodinámica en esta zona. Bautizado como Cortina de Aire este diseño se integra dentro del programa Efficient Dynamics. Esta parte frontal ahora presenta un aspecto muy similar al del paquete M opcional para la Serie 1. Los grupos ópticos delanteros y traseros también son completamente nuevos. Se trata de un cuidadoso diseño que busca aportar una estética más actualizada. La línea que recorre la parte superior de los faros dobles es un elemento que distingue las nuevas ópticas delanteras. En lo que respecta a los pilotos traseros encontramos que la parte superior es de color íntegramente rojo y que su conjunto luminoso describe una forma de L. Los faros de xenón, opcionales, cuentan con luces diurnas de LED integradas en los faros delanteros, así como líneas de LED en los pilotos traseros.
Habitabilidad
El Serie 1 Cabrio no es uno de los coches más espaciosos del mercado. Se trata de un descapotable pensado única y exclusivamente en ofrecer un buen nivel de confort a los ocupantes de las plazas delanteras. Aún así tampoco la primera fila es que sea un salón rodante. Sin ir más lejos, un Audi A3 Cabrio ofrece unas plazas delanteras mucho más espaciosas y cómodas. La postura en el BMW es muy baja y dispones de poco espacio a la altura de los codos. Los asientos cuentan con una banqueta corta y el salpicadero está muy cerca. Las plazas traseras son simplemente para que las usemos como un segundo maletero. Tratar de encajar a dos adultos será misión imposible, a no ser que los ocupantes de la primera fila sean de muy corta estatura, sólo así podremos llegar a ofrecer algo de espacio para los pies de los pasajeros de la segunda fila. O bien usamos la segunda fila con niños o como maletero, tratar de ir más allá es comprometer el confort del conductor y del acompañante. Si bien el volumen de carga que ofrece el Serie 1 Cabrio es aparentemente bueno con 305 litros de capacidad, las dimensiones del mismo hacen que sea bastante complicado transportar objetos de tamaño medio-grande. En el caso que queramos usar esta segunda fila como espacio de carga podemos abatir los asientos traseros y así no ensuciamos su elegante tapizado de cuero.
Mecánica
El propulsor del 135i es la última evolución del seis cilindros en línea de 3 litros sobrealimentado con un turbocompresor con tecnología Twin Scroll. Mientras que las primeras versiones de este motor ofrecían un comportamiento más brusco, ahora se ha refinado bastante la entrega, a la vez que se han reducido de forma drástica los niveles de consumo. Con un ritmo bastante moderado podemos disfrutar de un consumo medio de en torno a los 9 l/100 km. Esto no está nada mal para un coche de más de 300 CV. Evidentemente si tratamos de exprimir todo el potencial de este brillante motor, los consumos se dispararán, pero no tanto como imaginamos. En conducción deportiva podemos alcanzar máximos de 14 l/100km. Recordemos que se trata de un propulsor de seis cilindros con turbo que rinde 306 CV, una mecánica que ofrece unas prestaciones equivalentes a las de un V8 de 4 litros atmosférico. Con una mecánica de estas características los consumos se dispararían por encima de los 20 l/100 km sin ningún problema. Los 400 Nm de par máximo, están disponibles de forma constante entre las 1.200 y las 5.000 rpm, pocos motores diesel son capaces de ofrecer una entrega parecida desde tan abajo y en un margen de actuación tan amplio. Las prestaciones hablan por si mismas, con una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 5,5 segundos y una velocidad punta autolimitada a 250 km/h.
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Comportamiento
El 135i Cabrio se muestra muy efectivo para tratarse de un descapotable, pero evidentemente su chasis es un poco menos rígido que el de su homólogo con carrocería cerrada el 135i Coupé. Además, entre ambas versiones existe una diferencia de peso de 130 kilos. No estamos hablando de 10 o 15 kilos, sino de casi 150 kilos, una carga equivalente para poner un ejemplo a dos pasajeros adultos extra. Este extra de peso se nota en los cambios de apoyo, pues el descapotable tiende a acusar más las inercias que el Coupé. Tanto con capota como sin ella el chasis se muestra muy noble, este es un coche pensado para disfrutar al volante y no para sufrirlo. Los ingenieros de BMW invirtieron gran parte de sus esfuerzos en hacer de los Serie 1 Coupé y Cabrio un modelo muy seguro en todo tipo de circunstancias. Aunque se trate de un tracción trasera, cuando entramos más rápido de lo debido en un viraje el coche tiende a subvirar o sea a marchar de delante en lugar de derrapar. Una reacción más fácil de controlar sobretodo para los conductores que están acostumbrados a conducir un tracción delantera. Las suspensiones son 100% BMW así que esto se traduce en un 10 sobre 10 en lo que a comportamiento deportivo se refiere, pero a la vez supone un 6 sobre 10 en lo que a confort respecta. Está muy bien que en esta versión de 306 CV el comportamiento del chasis sea así de duro gracias al equipo de suspensión deportiva M que monta de serie. Un equipo más rígido que el que encontramos con un motor menos potente de la gama. Aún así estas versiones más básicas también ofrecen una rigidez de suspensiones muy superior a la media.
Seguridad
BMW es sinónimo de prestaciones pero siempre bajo control. Gracias al DSC (Dynamische Stabilitäts Control) o lo que es lo mismo, el control de estabilidad, los BMW de tracción trasera se convierten en coches muy fáciles de conducir, incluso bajo las condiciones climatológicas más adversas. Para los más avezados conductores existe la posibilidad de desconectar por completo estas ayudas. Esta versión Cabrio cuenta con un parabrisas reforzado y con un sistema de protección antivuelco.
Valoración final
Con un presupuesto superior a 50.000 € podemos encontrar un buen número de deportivos interesantes que pueden encajar en nuestras necesidades. Si lo que buscas es tener un descapotable pequeño, con un motor brillante y unas prestaciones de vértigo el 135i Cabrio puede ser tu coche. El precio sigue siendo una barrera infranqueable para muchos.
Tengo uno con el motor pequeño gasolina y es una maravilla preciosa de tacto buenísimo, se conduce de muerte