Citroën DS3

Basta con mirar y admirar el nuevo Citroën DS3 para darse cuenta de inmediato que no es un Citroën más. Es diferente, especial y distinto a todo lo que ofrece la marca de los dos chevrones. Derrocha clase y atractivo gracias a su pronunciado estilo anti retro, transgresor y con una arrolladora personalidad. En su nacimiento se vislumbra una intencionalidad por parte de la firma gala: disponer de una gama de vehículos que le aporte a la marca una imagen más sofisticada, más chic y que le permita disputarse el cetro del reino del diseño con los fabricantes italianos. Entre sus rivales naturales rápidamente asociamos nombres como el Alfa Romeo MiTo, el Fiat 500, -sin olvidar el futuro Audi A1- y sobre todo el Mini, la mayoría de ellos con evocadoras reminiscencias al pasado en su estética. Para combatirlos, el DS3 plantea argumentos similares y opuestos. Mientras que su fisonomía responde a criterios de modernidad se vale también de una amplia capacidad de personalización estética como elemento de seducción de su público objetivo: jóvenes urbanos seguidores de la moda y las últimas tecnologías.

Con el DS3 Citroën pretende ofrecer un vehículo en el que prácticamente todo se pueda elegir DS3 y un espacio donde poder reflejar los gustos de su propietario para manifestar a través del coche el carácter de su conductor. Para ello se proponen 38 combinaciones de colores de carrocería (11 tonos) y techo (5 tonos) y complementos que le permiten personalizar su look hasta el más mínimo detalle, con tapizados, retrovisores, alfombrillas, llantas, llaves de contacto, pomos de cambio, strippings, etc. Robusto y dinámico, al tiempo que atrevido y a la moda, el Citroën DS3 no olvida que el estilo también se lleva por dentro y cuenta con equipamientos sofisticados (desde el primer nivel de acabado cuenta con ayudas a la conducción como el regulador y el limitador voluntario de velocidad) que contribuyen a que la vida a bordo sea lo más agradable posible para todos los pasajeros. La calidad de los materiales y del cuidado puesto en los acabados junto con un notable trabajo de insonorización y amortiguación de los ruidos le permite desplegar un confort de rodadura muy alto para su categoría, un segmento al que el DS3 llega con grandes argumentos a favor.

PVP

DS3 VTi 95 Airdream 15.100 € DS3 VTi 120 Airdream 17.400 € DS3 VTi 120 CAS 18.150 € DS3 THP 150 19.700 € DS3 HDi 90 FAP Airdream 17.700 € DS3 HDi 90 FAP Airdream 99gr 17.900 € DS3 HDi 110 FAP Airdream 20.000 €

Diseño

Sus responsables destacan como premisas clave en el desarrollo del proyecto los conceptos sorpresa, seducción y dinamismo. El resultado es una carrocería que resulta musculosa a la vez que sensual, compacta y dinámica por igual gracias a refinados detalles como los cromados exteriores o las formas audaces e innovadoras de su carrocería. Expresivo y seductor, el atlético cuerpo del DS3 transmite agilidad de movimientos gracias a líneas y componentes diseñados para ello: los faros delanteros, los pilotos traseros, la parrilla delantera unida al logo de la marca, la fina tira de luces Led diurnas en los laterales del parachoques, su alerón y sobre todo su techo plano "flotante" por efecto del montante central, que se interrumpe antes de alcanzar el techo, al estilo de una aleta de tiburón.

Es innegable que la creatividad aparece en cada uno de los trazos del diseño, radicalmente moderno e incuestionablemente atractivo, del DS3 y que además sus efectos sobre la aerodinámica son beneficiosos, puesto que posee un coeficiente de penetración (Cx) de 0,31. Con 3,95 m de largo y 1,71 m de ancho, las cotas exteriores del DS3 lo sitúan, de entrada, entre los vehículos más compactos del segmento. Su altura, de 1,45 m, le confiere además una silueta muy dinámica de corte deportivo.

Habitabilidad

Del interior del vehículo emana la misma sensación singular de energía y refinamiento. Los diferentes elementos han sido integrados con elegancia y su ensamblado, en ocasiones con un efecto "cortado", demuestra una notable minuciosidad de ejecución. El salpicadero es muy fluido y la horizontalidad del conjunto se ve reforzada por una banda que recorre toda la zona frontal de un extremo al otro. El puesto de conducción cuenta con los indicadores y otros mandos situados muy cerca. Por su parte el cuadro de instrumentos presenta tres cuadrantes cónicos, el volante destaca por su pequeño diámetro y los asientos, bajos y envolventes, confieren al conjunto un carácter bastante deportivo. El DS3 a nivel de configuración responde a unas proporciones que podrían calificarse de pequeño cupé pero polivalente. Sus cualidades de habitabilidad vienen condicionadas por su arquitectura (tres puertas, techo bajo, silueta aerodinámica...) sin embargo ofrece una amplitud a nuestro entender mucho mejor que la del Mini (su principal rival), especialmente en las plazas traseras, en las que el espacio para las piernas y las cotas del altura, sin ser nada del otro mundo, son ciertamente mejores que las del modelo de origen inglés. Es interesante el detalle de una empuñadura que permite a los pasajeros de las plazas traseras salir sin problemas del habitáculo, cosa harto complicada en algunos tres puertas. Las medidas del maletero también destacan frente a la competencia. Con 285 l el volumen de carga está entre los más amplios de la categoría. Para modularlo, los asientos fraccionables 2/3-1/3, son abatibles con una sola mano y en un solo movimiento. Cuenta, además, con múltiples huecos portaobjetos: una enorme guantera de 13 litros y diversos espacios en el salpicadero y en la consola central.

Mecánica

El Citroën DS3 se ofrece con cinco motorizaciones, todas ellas satisfacen la norma medioambiental Euro V: tres gasolina (THP 155, VTi 120 y VTi 95) y dos diésel HDi FAP de 110 y 90 CV. En los cinco bloques la transmisión de serie es manual, de 5 o 6 marchas -en función de la potencia- aunque la variante de gasolina de 120 CV se ofrece en opción con una caja automática de cuatro relaciones.

La motorización diesel de menor potencia cuenta con una versión cuyas emisiones de CO2 se sitúan en 99 g/km. Para una conducción más económica y ecológica, el Citroën DS3 incorpora un indicador de cambio de marcha, que recomienda el momento más adecuado para realizar los cambios.

Podría decirse que los propulsores del DS3 se caracterizan por su refinamiento general, sus buenas prestaciones y su suavidad general de manejo y se da la curiosa circunstancia de que son los mimos que equipa su principal enemigo comercial, el Mini, gracias a un acuerdo de colaboración tecnológica y suscrito entre PSA y BMW.

Otras de las características esenciales del DS3 responde a la autoexigencia de Citroën en el campo de las emisiones y al liderazgo medioambiental que asume la marca en materia de emisiones de CO2. En ciclo mixto, los niveles de emisiones de las motorizaciones HDi FAP son inferiores a 115 g/km -con la citada oferta de una versión "verde" de 99 g/km y 3,8 litros de media de consumo- mientras que se escalonan entre 134 g/km de CO2 y 158 g/km para los motores de gasolina. Éstos gastan 5,9, 6 y 6,7 litros por los 4,1 y 4,5 de los diésel (medias homologadas).

Comportamiento

Manejabilidad y reactividad son dos conceptos que definen bien las sensaciones que transmite el DS3. Su conducción es ágil y resuelta, dinámica pero fácilmente controlable, deportiva pero a la vez rutera y confortable. Para lograr este acertado comportamiento el chasis (del C3) y los trenes rodantes, de tipo pseudo-McPherson delante y de paralelogramo deformable detrás, han sido objeto de un trabajo de puesta a punto muy afinado y preciso para garantizar una perfecta estabilidad de las trayectorias y una sensación constante de control sobre el vehículo. La flexibilidad y el grado de amortiguación de sus suspensiones han sido adaptadas para "leer" perfectamente la carretera, gracias a una muy buena optimización de los movimientos de la carrocería y a un eficaz equilibrio en curva.

En cuanto a la dirección, se beneficia de un volante de pequeño diámetro -363 mm- y de una asistencia calibrada para transmitir informaciones precisas sobre la conducción para que el conductor pueda "situar" las ruedas justo donde se desea.

También merece ser destacado el tratamiento acústico de alto nivel del subcompacto galo. La insonorización y la absorción de los diferentes ruidos ha sido realizada lo más cerca posible de la fuente de emisión, mientras que el compartimiento motor y los portones han sido objeto de un especial cuidado con juntas en los bajos y materiales aislantes de alta densidad.

Seguridad

Actualmente un coche que se posiciona por encima de la media del segmento en aspectos como el estilo y la exclusividad debe presentar unos niveles de seguridad también superiores. Por ello Citroën ofrece de serie en el DS3 -calificado con cinco estrellas por el organismo EuroNCAP- seis airbags, sujeciones Isofix en las plazas laterales traseras, ESP y un sistema de frenado particularmente seguro: ABS con repartidor electrónico de frenada (REF) y ayuda a la frenada de urgencia (AFU). Igualmente, desde el primer nivel de acabado, el DS3 cuenta con interesantes equipamientos de ayuda a la conducción como el limitador/regulador voluntario de velocidad o el indicador del cambio de marcha, que recomienda los cambios de marcha para una conducción más económica y más ecológica.

Valoración Final

La marca de los dos chevrones no sólo pretende ser diferencial en diseño con este subcompacto sino que con el DS3 se abra un nuevo camino paralelo a su marca, con productos de servicio también distintivo, como la oferta Citroën Freedrive: una garantía de tranquilidad absoluta, que puede incluir no sólo el mantenimiento (con un vehículo de sustitución incluido), sino también prestaciones como la limpieza integral del vehículo. Sin duda, el DS3 destaca por su rica y original oferta de personalización que va más allá de los colores o los accesorios exteriores de decoración y se extiende al habitáculo, caracterizado por un ambiente interior muy conseguido y distinguido, salpicado con llamativas funcionalidades como un perfumador de ambiente integrado, cuya presencia se aprecia por una estrella cromada.

Son muchos los detalles que posicionan al DS3 un escalón por encima de la competencia; sólo falta que el público entienda la diferenciación marcada por Citroën en la gama DS y asuma que se trata de una nueva propuesta de producto desvinculada de la imagen generalista, funcional y popular de la marca francesa.