Citroën DS5 HDI 160 CV: Cargado de intenciones

Cuando el primer DS fue presentado en el Salón del Automóvil de Paris hace ya mas de 50 años, el publico en general se dejo cautivar tanto por su original diseño como por el generoso equipo tecnológico de vanguardia que incorporaba y que entre otras cosas incluía asistencia hidráulica en caja de cambios, dirección, frenos o incluso en el embrague. Llamaba también la atención, la incorporación de elementos seguridad como el volante de un solo radio que estaba concebido para doblarse en caso de accidente y evitar de esta forma daños en el pecho del conductor. Por supuesto, su línea se salía de lo corriente y no dejó a nadie indiferente. Años después y como ya lo hiciera con el DS3 y DS4, la denominación que tantas alegrías dio a su fabricante se vuelve a reinventar con el firme propósito de recuperar el camino recorrido.

Con esta nueva presentación el fabricante francés ha hecho bien sus deberes a la hora de concebir y diseñar un modelo para este nuevo segmento del mercado. Involucrando a todos los departamentos de su amplísima organización, sinergias técnicas así como unas enormes ganas de poner en escena un automóvil diferente, busco que además de ser un producto completo fuera brillante en prácticamente todos los parámetros.

Su aspecto ya denota el cambio respecto a lo presentado en estos últimos años y es que el ejercicio de estilo realizado en este modelo es innegable. Es más, nos atrevemos a decir que a pesar de su aparente continuismo su estética rompe en cierta medida con lo que la marca nos tenía acostumbrados al contar con una línea mas propia del segmento de los compactos unida a unas dimensiones con ciertas ambiciones y a un aspecto que recuerda a los últimos "crossover" presentados. Los ángulos rectos y cortantes de anteriores modelos se mezclan con formas redondeadas, angulosas nervaduras y curvas que se funden a lo largo de su carrocería. El frontal, es macizo y serio y cuando aparece por nuestro retrovisor parece una amenaza. La trasera con los dos amplios tubos de escape, también. Su generosa anchura y altura ponen en escena una cintura seria que deja entrever una alta dosis de dinamismo a lo que se unen unos anchos pasos de rueda y enormes llantas que rematan la faena.

Basado en la plataforma del C4, este modelo mide 4,5 metros de longitud por 1,87 metros de anchura, lo que unido a una generosa distancia entre ejes favorece un interior amplio y cómodo. Lógicamente su mayor altura interior proporciona un mayor espacio para la cabeza, una mayor sensación de desahogo así como una buena habitabilidad general que no resulta sobresaliente si se tiene en cuenta su tamaño y formas. Los asientos de las cuatro plazas principales son cómodos y gracias a las posibilidades de regulación que incorpora el reservado para el conductor, todos sus ocupantes se encontraran a sus anchas.

La plaza central trasera es otra cosa y será mejor reservarla para cortos desplazamientos algo que ya se ha convertido en una característica común en muchas de las nuevas presentaciones. El volante dispone de ajuste en profundidad y altura y la palanca de cambios se ha situado correctamente; ni adelantada, ni atrasada. Respecto al acabado general es bueno y la presentación interior se viste de plásticos de calidad tanto visual como al tacto en la mayoría de las superficies lo mismo que los mandos que también resultan intuitivos y fáciles de entender y accionar. El cuanto a su diseño interior podrá resultar o no atrevido pero de lo que no hay duda es de que no dejará indiferente a nadie. Respecto al espacio para las piernas de las plazas posteriores es más que suficiente siempre que tengamos en cuenta que esta sometido a las limitaciones de su diseño, lo mismo que la capacidad del maletero o la visibilidad posterior.

Este turbo diesel de cuatro cilindros y 160 caballos es uno de los pilares del DS5 máxime cuando ha sido aislado de una forma más eficaz que en muchos de los otros vehículos en que se monta. De hecho, las vibraciones brillan por su ausencia, tanto en el volante como en los pedales, palanca de cambios, etc. Por otra parte el comportamiento de este motor es bien conocido y para simplificar, podríamos decir que, frente a las tendencias más recientes de máxima progresividad y elasticidad, resulta algo más divertido y con mayor respuesta siempre que se superen las primeras revoluciones. Y en la gama alta de giro, más de lo mismo. Permite pasar de las 4000 revoluciones a la menor solicitud, con la absoluta ausencia de titubeos hasta alcanzar 1000 revoluciones más, límite al que solo los motores más brillantes de su categoría se atreven a explorar. Respecto a la elección de los desarrollos de la caja de cambios, en sus primeras cinco marchas es más que juiciosa para extraer sus buenas ganas. Por el contrario, en sexta y circulando a 90 kilómetros por hora, el motor dejará entrever un leve ronroneo con un mínimo gasto de combustible pero sin que quepa esperar grandes alegrías. Cuando se necesite un aporte extraordinario de fuerza será necesario recurrir a una marcha inferior lo que facilitará recuperaciones rápidas y una respuesta mucho más enérgica en la que los continuos cambios de régimen se sucederán con absoluta facilidad. La caja de cambios se maneja con facilidad pero adolece de cierta precisión sobre todo en la marcha atrás. Respecto a la rumorosidad interior ya sea en parado o en marcha, esta muy buen conseguida y apenas se percibe.

Si la mecánica ya no nos sorprende por su buen hacer, el bastidor tampoco. Y es que la configuración y respuesta que manifiesta trastoca todo lo anteriormente conocido en este segmento donde el carácter general tiende a buscar un cierto equilibrio entre comodidad y dinamismo. La elasticidad relacionada con la suspensión es más bien firme, de manera que se evita que la carrocería adopte ángulos de inclinación acusados. Y esto, ni cuando las circunstancias exigen máximos esfuerzos. A esto se añade una amortiguación rigurosa que no permite que al circular sobre pavimentos irregulares, se produzcan variaciones de la trayectoria. En cuanto a la respuesta del tren delantero a los requerimientos del conductor sobre el volante, debemos decir que es muy rápida y que una vez que se acerca a los límites de adherencia, el coche manifiesta un comportamiento muy neutro con una mínima acción sobre el volante. Si se fuerza la situación, se vuelve ligeramente cabezón situación que se corrige con una enorme facilidad. Por otro lado, el tren trasero esta perfectamente definido en cuanto a la geometría dinámica, puesto que por difícil que se ponga la situación nunca sorprenderá al conductor, incluso con actuaciones decididas sobre el freno en apoyo. En carreteras de segundo orden el panorama no cambia y el coche se defiende muy bien en recorridos sinuosos y ratoneros con continuos cambios de inclinación y trazada. Respecto a los frenos, funcionan bien y en cuanto a su resistencia a la fatiga no hemos tenido ninguna objeción.

Obtiene una excelente calificación de cinco estrellas en el protocolo Euroncap con una puntuación del 97% en sistemas de asistencia. Dispone de un equipamiento de seguridad de serie que lo tiene todo; ABS, airbag frontal conductor y pasajero, airbags de cabeza delanteros y traseros, airbags laterales delanteros, control de estabilidad (ESP), control de tracción inteligente, asistencia a la frenada de urgencia, ayuda a la salida en pendiente, ayuda de emergencia y asistencia en caso de avería pulsando un botón, cámara de visión trasera, control de estabilidad, Control de tracción inteligente, limitador/regulador de velocidad programable, etc. A esto se une la nueva generación de alerta de cambio involuntario de carril que interpreta la carretera con una cámara situada en la parte superior del parabrisas, y avisa al conductor ante un cambio de carril, un sistema de encendido automático de las luces de carretera en función de la iluminación y circulación en la zona. Cuenta además con una pantalla virtual que facilita la visión de la velocidad a la que estamos circulando y avisa del límite de velocidad seleccionado así como las indicaciones del navegador.

No existe dudad alguna de que Citroën quiere hacer llegar a un mayor número de usuarios su actual gama de vehículos. Estética aparte, se trata de un automóvil amplio, funcional y polivalente, unido a una magnífica mecánica diesel de 160 caballos que le permite competir en igualdad de condiciones con la mayoría de sus rivales. Dinámicamente presenta una deportividad más que probada. Es noble, predecible y además, cómodo si bien sus bajos consumos no nos sorprenden en el uso real. Y si las cosas se tuercen, su amplio equipo en materia de seguridad se encarga de solventarlo. A su favor cuenta con equipamiento de primera y una línea que no esta tan vista como la de sus potenciales rivales.