Ford Kuga 2.5T

Desde esta primavera, la mecánica diesel 2.0 TDCi de 136 CV no es la única que puede montar el Kuga, también está disponible con el motor de gasolina sobrealimentado 2.5 de 200 CV. Esta variante va asociada al acabado Titanium, el más alto, pero puede enriquecerse con una larga lista de opciones entre las que se encuentra el paquete "Individual". La tracción es 4x4 y únicamente se ofrece con el cambio automático de 5 velocidades. Su precio base es de 32.800 euros.

Las diferencias estéticas entre el Kuga de 200 CV y el diesel de 136 CV, a igualdad de equipamiento y opciones de personalización, no existen o, al menos, nosotros no las hemos encontrado. Bueno, a excepción de que la parte superior de la letra A de la incripción "Kuga" que luce en su portón va pintada en rojo. Las llantas de 19 pulgadas, son un elemento diferenciador pero no es algo exclusivo de esta versión, ya que forman parte de la lista de opciones previstas para el acabado Titanium. En cuanto a los cristales tintados, las barras de techo o el color de la carrocería, es algo a lo que cualquier modelo de la gama puede optar.

En el interior ocurre lo mismo que en el exterior, es decir, que las diferencias vendrán marcadas por el grado de individualización que haya elegido cada uno de acuerdo con las opciones disponibles. Pero, en cualquier caso, tampoco hemos encontrado ninguna exclusivamente prevista para esta versión. Los asientos, en este caso de cuero, son confortables y ofrecen una sujeción del cuerpo correcta. Los delanteros cuentan con regulación en altura, si bien parten de una posición demasiado elevada para poder tener esa sensación de que la carrocería nos envuelve. Los ocupantes de las plazas traseras dispondrán de suficiente espacio para realizar un viaje con comodidad, aunque si es largo mejor evitar el asiento central. El maletero dispone de una capacidad de 410 litros con el kit reparapinchazos y de 360 l si se elige la opción de llevar rueda de repuesto de emergencia, en cuyo caso habrá que abonar 50 euros. Para ganar espacio en el maletero cabe la posibilidad de plegar los asientos posteriores con sus respectivos respaldos. El resultado es una superficie completamente plana de 1.405 litros. Además, el portón está dividido, de modo que se puede abrir solo la parte superior del mismo. Esto es muy útil, por ejemplo, cuando otro vehículo ha aparcado tan cerca que sería imposible abatir el portón completo.

Esta nueva versión de gasolina del Kuga monta un motor de 5 cilindros y 2.5 litros con turbo. Se trata de un bloque de sobra conocido en la marca, dado que también está disponible en los Focus ST y RS, el Mondeo y el S-Max. En el caso del Kuga entrega una potencia de 200 CV a 6.000 rpm y un par máximo de 320 Nm que se encuentra disponible entre las 1.600 y las 4.000 vueltas. Esto hace que el Kuga tenga una muy buena respuesta desde bajas vueltas pero sin renunciar a la elasticidad. Únicamente se ofrece asociado a la caja de cambios automática de cinco velocidades Durashift 5-Tronic y aunque dispone de modo secuencial para cambiar manualmente de marcha solo puede hacerse a través de la palanca porque carece de levas en el volante. La velocidad máxima que alcanza el Kuga 2.5 T es de 202 km/h, y tarda 8,8 segundos en completar el 0 a 100 km/h. Claro que estas prestaciones se dejan sentir en el consumo que alcanza fácilmente una media de 13,5 l/100 km. pese a que la cifra oficial indica 10,3 l/100km.

El Kuga puede presumir de tener un comportamiento dinámico excelente. Muestra aplomo, nobleza de reacciones y suficiente agilidad en los movimientos. La suspensión, ofrece un estudiado equilibrio entre eficacia y confort, de hecho filtra bien las irregularidades del firme y evita movimientos de la carrocería en tramos de curvas enlazadas. La dirección, aunque es precisa, quizá tenga un grado más de asistencia del deseado, sobre todo teniendo en cuenta el carácter deportivo de esta versión del todocamino de Ford.

Fuera del asfalto no se le puede exigir mucho dado que no es un vehículo pensado para un uso off-road. En cualquier caso esta versión solo está disponible con tracción a las cuatro ruedas, lo sirve para controlar mejor sus 200 CV independientemente del firme por el que circulemos.

El Kuga goza de una seguridad que le ha valido para conseguir las 5 estrellas Euro NCAP en protección de pasajeros adultos. Entre los elementos enfocados a lograr tal protección figuran seis airbags: frontales y laterales para los asientos delanteros, y de cortina en las plazas delanteras y traseras. Otros sistemas de seguridad son el ESP, el control de atenuación del riesgo de vuelco (ARM), el ABS con control electrónico de la distribución de la fuerza de frenada ( EBD), el control de asistencia de estabilidad de remolque (TSA) y el control de tracción (TCS). Entre las opciones disponibles se encuentran los faros bi-xenón, la cámara de visión trasera o el sistema de detección de deshinchado de neumáticos (DDS).

El Kuga 2.5 T no aportará un gran número de ventas a la marca, sin embargo enriquece su oferta y sobre todo, abre una nueva opción de compra a ese reducido grupo de clientes que buscan un SUV compacto con carácter deportivo a un precio equilibrado. Y en este sentido el fabricante americano ha dado en el clavo. El Kuga 2.5 T tiene una imagen atractiva, un comportamiento dinámico excelente, un completo equipamiento de serie y, como ya hemos indicado, parte de un precio de 32.800 euros. El consumo es elevado, eso sí, pero es difícil tener todo.