Hyundai Elantra 1.6 MPI: Diseño y espacio

Este sedán compacto asiático de 4,53 metros ha aterrizado con pie firme en nuestro mercado tras unos años de ausencia, pues la anterior actualización no se comercializó en nuestro país. Se trata de la quinta generación de un modelo que ha sido totalmente renovado, incluyendo una plataforma de estreno que también montará el nuevo i30. Estamos ante una berlina que destaca por un diseño vistoso a la vez que sofisticado, además de por una remarcable habitabilidad y un equipamiento más que aceptable para su precio. Su equilibrado motor 1.6 gasolina de 132 CV (el único disponible, eso sí), ofrece un comportamiento suave y con un consumo bastante ambicioso. Algunos de los principales rivales de este cuatro puertas son el Chevrolet Cruze, el Renault Fluence o el Ford Focus Sedán.

La apariencia es uno de los puntos fuertes de esta berlina de tres volúmenes. Y es que el Elantra cuenta con un diseño muy atractivo, con el que es capaz de entrar fácilmente por los ojos. A grandes rasgos, el modelo se caracteriza por su baja línea de techo, además de una estética que recuerda a la de un coupé. En el frontal, se percibe rápidamente la parrilla hexagonal que Hyundai está aplicando a sus nuevos modelos, gracias a la cual se realza su apariencia moderna. Sus estilizados faros, extendidos hacia atrás, refuerzan la intención de la marca coreana de dotar al Elantra de un alto nivel de dinamismo, así como una mirada agresiva. Por otra parte, cuenta con unos pasos de rueda bien definidos que le confieren un aspecto algo musculoso y le aportan un carácter propio. Lo mismo sucede con las marcadas nervaduras que recorren tanto los bordes del capó como los laterales del automóvil. Al igual que en la parte delantera, los grupos ópticos de la zaga también se distinguen por su longitud y una línea muy estilizada. El diseño ha tenido muy en cuenta el rendimiento aerodinámico de la berlina coreana, pues dispone de un coeficiente (Cd) de 0,28 que incide positivamente en el consumo. Es decir, con el Elantra se ha logrado conjugar elegancia y cierta deportividad con otros aspectos puramente prácticos como la eficiencia. El acabado que hemos probado, el tope de gama denominado Tecno, incluye llantas de aleación 17 pulgadas.

Nada más ocupar el puesto de conducción, comprobamos la buena calidad de sus acabados, en la línea de la última "hornada" de modelos de Hyundai. Los plásticos blandos están muy presentes y se muestran agradables al tacto. El tablero combina formas cóncavas y convexas para conseguir una apariencia actual y atractiva a la vez, con todos los mandos dispuestos con una óptima accesibilidad. La columna central está dominada por numerosos detalles en símil aluminio que dan lugar a un ambiente sofisticado. El ligero incremento de tamaño del nuevo Elantra en comparación con la anterior generación (que no se vendió en España) le hace mejorar en cuestión de habitabilidad. Esto se percibe en el espacio para las piernas de los pasajeros posteriores, gracias al volumen que se gana con la ampliación de 50 mm de la distancia entre ejes. El vehículo también es 25 mm más largo que el modelo al que sustituye. Donde no hay cambios es en la anchura, que se mantiene en 1,77 m. Por otro lado, no hay que obviar que la altura del vehículo se ha reducido en 35 mm. El diseño de la caída del techo hace que éste sea algo bajo, si en las plazas traseras viajan personas de más de 1,80 m. Mientras tanto, el habitáculo cuenta con una buena presencia de huecos para guardar pequeños objetos. No tendremos problemas a la hora de cargar el equipaje, ya que este sedán de cuatro puertas dispone de 485 litros de volumen del maletero.

La motorización 1.6 litros MPI de 132 CV a 6.300 rpm es la única disponible en la gama Elantra. Se trata de un bloque de cuatro cilindros con el sistema D-CVVT, o lo que es lo mismo, con doble ajuste variable continuo de las válvulas. Entrega un par motor máximo de 158 Nm a 4.850 rpm y lo hace con gran elasticidad, proporcionando una buena respuesta desde bajas revoluciones. Al subirlo de vueltas, va ganando algo más de fuerza y permite una conducción activa, aunque sin llegar a cotas deportivas. Otra de sus características principales la hallamos en sus escasos niveles de sonoridad, cuestión que beneficia al confort general. Tanto el consumo como las emisiones se han reducido con respecto al anterior Elantra, de modo que ahora registra una media de 6,4 litros cada 100 km, una más que aceptable cifra teniendo en cuenta la cilindrada y potencia de la mecánica. El promedio de emisiones de CO2 es de 148 g/km. El motor va asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades que se distingue por un destacable escalonado, pensado para primar la comodidad de conducción por encima de la deportividad. El tacto de la palanca es bastante preciso. En lo que se refiere a prestaciones, no logra unos números espectaculares, pero es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 10,7 segundos y puede conseguir una velocidad máxima de 200 km/h. Donde sí destaca es en la suavidad de funcionamiento, gracia a su equilibrada entrega de potencia.

La estructura del sedán de Hyundai está integrada por suspensión independiente a las cuatro ruedas, de tipo McPherson en el eje delantero y multibrazo, en el posterior. Dispone de un tarado de suspensión más bien blando, que copia el asfalto con gran eficacia, transmitiendo una gran sensación de comodidad de conducción. Gracias a su equilibrado chasis permite desarrollar ritmos alegres por tramos revirados con cierta soltura. La ligereza del vehículo también ayuda a reforzar esta circunstancia, ya que tiene un peso moderado de 1.161 kg. Pero a ritmos elevados podemos percibir un leve balanceo de la carrocería, eso sí, poco evidente y sin que comprometa en ningún caso la sensación de confort de marcha. Está dotado de una dirección precisa que le aporta buenas garantías en el terreno de la maniobrabilidad, cuestión que se agradece al rodar por terreno urbano. Uno de los ambientes en los que el Elantra se siente como en casa es durante los largos viajes por autopista. Gracias a su amplia batalla de 2,7 metros, muestra un gran nivel de aplomo por este tipo de vías.

En materia de seguridad, el Elantra cuenta con seis airbags entre los que se encuentran los frontales, laterales y de cortina tanto para las plazas delanteras como para las traseras. También dispone de frenos ABS con EBD, control de estabilidad (ESP) y control de tracción (TCS). En cuestión de ayudas cabe remarcar además el control de trazada (VSMS), con el que se logra una conducción más estable. También dispone de apertura de puertas automática en caso de accidente.

Podríamos calificar al Elantra como un automóvil realmente equilibrado en todos los sentidos. Su racional motor de gasolina ofrece un gran compromiso entre rendimiento y ahorro de combustible, proporcionando una respuesta más que aceptable pero con un consumo bastante comedido. Y todo ello bajo un "envoltorio" moderno y atractivo con unos acabados de calidad. Cierto es, por otro lado, que su gama no ofrece muy pocas posibilidades en cuanto a libertad de elección, pues ésta se reduce a dos únicos acabados junto con un solo motor.