Infiniti M35h: Híbrido de récord

Infiniti ha conseguido marcar la diferencia con su más reciente creación en el mundo de los coches híbridos: el M35h. Esta berlina de lujo es la primera de la marca japonesa en utilizar esta tecnología, que combina un motor de gasolina y un motor eléctrico. Y lo hace de forma espectacular, ya que la potencia final que se obtiene (364 CV), las prestaciones (5,5 segundos de 0 a 100 km/h) y el gasto de combustible (7 l/100 km. de consumo combinado) lo convierten en uno de los híbridos más deportivos y eficientes del mercado. Como ya es norma en la marca japonesa, el Infiniti M35h hace gala de un equipamiento de lujo, tanto en confort como en medidas de seguridad activa, que te permiten devorar kilómetros con total tranquilidad y relajación. Pudimos comprobarlo en un viaje de ida y vuelta de Barcelona a Valencia, que nos dejó muy buenas impresiones. PVP: INFINITI M35h GT 60.100 € INFINITI M35h GT Premium 66.200 €

Cuando observas cualquier Infiniti lo primero que llama la atención es gran volumen de su carrocería. Es así. La firma japonesa apuesta por diseñar coches con formas voluminosas, contundentes, que generen una sensación de aplomo y empaque a los ojos de cualquier persona. El Infiniti M35h, como el resto de modelos de la gama M, exhibe una línea musculosa, atlética y muy aerodinámica (cd: 0,26) gracias a sus redondeadas y estudiadas formas. Es claramente una berlina, si bien el tradicional tercer volumen, la zona de maletero, queda disimulada en la parte trasera por unas ligeras líneas cupé. Es un coche grande, de casi cinco metros de longitud y tiene una enorme batalla (2,90 metros), que permite un espacioso habitáculo. A primer golpe de vista se percibe como un coche elegante, lujoso, confortable, muy de representación. Al conducirlo confirmamos nuestra percepción inicial.

El Infiniti M35h equipa de serie llave inteligente, y podemos entrar en el coche con sólo pulsar el sensor de las puerta. Una vez dentro, nos recibe un enorme salpicadero, con el diseño y la terminación propias de una berlina Premium. Destaca la gran columna central, que alberga la pantalla TFT, los mandos del climatizador (con sistema de regulación de humedad, purificación de malos olores y emisión de fragancia), el equipo Bose 5.1 con 16 altavoces (en el acabado GT Premium) y la palanca del cambio automático, evidentemente, forrada en cuero, como el volante. En todo el habitáculo abunda el cuero, y algunas zonas se acaban con madera de fresno. El tacto de estos materiales nobles es exquisito, y a la vista generan una sensación de gran refinamiento y lujo. Como es lógico en un coche de su tamaño y condición, el espacio para conductor, pasajero y acompañantes es holgado, y podemos adoptar la posición al volante de forma perfecta. Todo es regulable electrónicamente. Los asientos del conductor y el pasajero son calefactados y refrigerados. El confort es la premisa en este coche. Como suele ocurrir con la mayoría de híbridos, el espacio del maletero es justo (ver foto), debido a la presencia de las baterías. Disponemos de sólo 350 litros, 100 litros menos que el mismo coche en versión diésel (M30d) y 150 litros menos que el M37. Caben, no obstante, cuatro bolsas de palos de golf o dos maletas de gran tamaño, para hacernos una idea.

El corazón de este coche es un sistema de propulsión híbrido, desarrollado íntegramente por Infiniti. Combina un motor de gasolina 3.5 V6 de 306 CV y un motor eléctrico de 68 CV. Combinados, generan una potencia de 364 CV, convirtiendo este coche en uno de los híbridos más potentes del mercado, por encima del Lexus GS450h y un poco por debajo del Porsche Panamera S (380 CV). Entre el motor de combustión y el eléctrico se intercala un embrague, que sirve básicamente para acoplar y desacoplar totalmente el motor de gasolina, en función de las necesidades. De esta manera, se reduce la resistencia mecánica y se aumenta la eficiencia del motor eléctrico. Un segundo embrague, de tipo húmedo, se monta entre el motor eléctrico y la caja de cambios, sustituyendo el convertidor de par de una tradicional caja de cambio automática. Esto permite, según Infiniti, reducir el consumo de combustible un 10%. El motor eléctrico es el que impulsa el coche en primera instancia, desde parado. El motor de combustión entra rápidamente en funcionamiento cuando la necesidad de potencia es evidente (al subir la rampa del párking, por ejemplo), al acelerar con contundencia o al rodar a alta velocidad. En cualquier trayecto, la acción de uno u otro motor se combina para optimizar la eficiencia energética y reducir el consumo de combustible. Podemos ver a través de una pantalla como funciona el sistema en todo momento, si son las baterías o bien el motor los que impulsan el coche (ver foto). El sistema se completa con un pack de baterías de ión-litio, que alimentan al motor eléctrico. Estas baterías se recargan mediante un sistema de frenado regenerativo, que aprovecha la energía cinética que se genera cuando dejamos de acelerar o frenamos el coche. Infiniti señala para este coche un consumo medio de gasolina de 7 l/100 km y unas prestaciones de deportivo: 5,5 segundos de 0 a 100 km/h y 250 km/h de velocidad máxima. Las emisiones de CO2 se quedan en 162 g/km. Durante nuestro recorrido de ida y vuelta de Barcelona a Valencia, principalmente por autopista a velocidad legal, regístró un consumo en torno a los 10 l/100lm.

En este primer contacto con el Infiniti M35h podemos concluir que es, ante todo, un coche ideal para viajar con total comodidad. Ha sido diseñado para ello. Todo contribuye al bienestar en su interior, visual, táctil y emocionalmente. Desde un punto de vista dinámico, el coche rueda con un silencio remarcable, y no sólo en modo eléctrico. El motor apenas se oye, y tampoco se percibe la transición entre el motor eléctrico y el de combustión. El tarado de la suspensión es suave, nada rígido, pero no por ello mórbido. El coche se sujeta muy bien en curva, sin balanceos excesivos de la carrocería, a pesar de su tamaño y peso. Eso sí, se percibe pesado (1.830 kilos de peso en vacío son muchos) y se encuentra mejor en autopista que en carretera de curvas. La aceleración es instantánea. Esto es así debido a que el motor eléctrico ayuda a impulsar el coche desde parado. Aunque no tuvimos oportunidad de exprimirlo a fondo (lo haremos en una prueba futura) sí que os podemos afirmar que es notable su alta potencia y el alto par que ofrece este sistema híbrido desde bajas revoluciones. En carretera, nos sorprendió la posibilidad que ofrece este híbrido de poder rodar hasta 100 km/h en modo totalmente eléctrico. Es decir, hasta esa velocidad, el sistema puede desacoplar totalmente el motor de gasolina e impulsar el coche sólo con el motor eléctrico. Esto incide, naturalmente, en una rebaja importante del consumo.

Es destacable la calidad y eficacia de los sistemas de ayuda a la conducción que incluye de serie este coche en el acabado GT Premium: aviso de presencia en el ángulo muerto, control de crucero inteligente, aviso de posible colisión, aviso y prevención de salida de carril y Eco pedal. Este último, el Eco pedal, ayuda a disminuir el consumo mediante una fuerza reactiva en el pedal de freno si aceleramos a fondo. Es decir, el propio pedal ejerce resistencia a nuestra demanda "poco ecológica" y recibimos una advertencia en el cuadro de relojes. Por suerte, es un sistema desconectable, ya que en ocasiones resulta demasiado intrusivo. Y es que este coche también equipa de serie un selector de modo de conducción. Podemos escoger entre el modo Eco (con el sistema de pedal reactivo ya comentado), Normal, Sport y Nieve. En cada uno de ellos, la respuesta del motor y la transmisión varía. En cualquiera de los acabados disponibles monta de serie un sistema de control de presión de los neumáticos, asistencia de arranque en pendiente, seis airbags, reposacabezas delanteros activos, sensores de lluvia y luz y una innovación: aviso sonoro de aproximación para peatones, que funciona de forma automática desde la puesta en marcha hasta los 30 km/h. Este sistema es necesario al tratarse de un coche que puede funcionar de modo exclusivamente eléctrico, especialmente a bajas velocidades.

El Infiniti M35h engaña. Bajo su apariencia de gran berlina de lujo encontramos un coche que ofrece unas prestaciones de deportivo. De hecho, el pasado mes de septiembre entró en el libro Guinness de los Récords como el coche híbrido más rápido en aceleración. 364 CV es una buena cifra para disfrutar de potencia y par en cualquier circunstancia, algo que se percibe claramente a los mandos de este coche. Por lo tanto, se dirige a un tipo de persona que busque un coche de altas prestaciones, pero a la vez elegante, distintivo y lujoso; un coche que sea una alternativa a la oferta alemana protagonizada por el BMW Serie 5, Mercedes Clase E o Audi A6 Hybrid (llegará en 2012), entre otros. Y una fuerte competencia a otros híbridos como el nuevo Lexus GS450h o el Porsche Panamera S hybrid. El Infiniti M35h ya ha llegado a los concesionarios. En relación a sus hermanos dentro de la gama M, esta versión híbrida no supone un coste significativamente mayor, y eso es buena noticia cuando hablamos de un híbrido. Vale 60.100 euros en acabado GT y 66.200 en acabado GT Premium. Son sólo 1.600 euros más que la versión diésel Infiniti M30d. Por lo tanto, el precio no va a ser una excusa para no acceder a una versión híbrida, en este caso.