Opel Agila 1.2 16v automático

El Agila es un vehículo que hace verdadero honor a su condición de utilitario. Práctico como pocos, cómodo, espacioso, ágil en el tráfico urbano y, en este caso, con un cambio automático que facilita la conducción por ciudad. Para poder optar a la caja de cambios automática es necesario elegir el acabado Enjoy y el motor de gasolina 1.2. La otra posibilidad es la transmisión manual de cinco velocidades asociada a cualquiera de las tres motorizaciones disponibles: 1.0 de 65 CV, 1.2 de 86 CV y el diesel 1.3 CDTi EcoFlex de 75 CV. La unidad probada añadía al equipamiento estándar llantas de aleación de 15 pulgadas, volante de cuero, cristales traseros oscurecidos (Style Pack) y pintura metalizada, lo que supone un precio final de 14.100 euros. Claro que esta misma versión sin los extras cuesta 13.300 euros.

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Estéticamente el Agila es un coche que entra por los ojos. Los diseñadores han sabido conjugar unas líneas exteriores atractivas con el máximo aprovechamiento del espacio interior. Buscando unas medidas compactas, este pequeño utilitario presenta unos voladizos muy cortos, con lo que su longitud total se queda en 3,74 metros, La parte trasera destaca por la verticalidad del portón del maletero y por unos grupos ópticos que aportan una nota alegre al conjunto cuando al encender la luz del freno aparece una estrella. Detalle que el Agila comparte con su clónico Suzuki Splash. El frontal, acorde a los nuevos modelos de la marca, luce la característica barra cromada en la que se integra el logotipo de Opel.

El diseño de clara inspiración monovolumen permite optimizar al máximo las cotas interiores del Agila y potenciar su habitabilidad. También posibilita gozar de una excelente altura incluso en las plazas traseras, en las que sus ocupantes disfrutarán de suficiente espacio para las piernas. No así para los hombros, pues tres personas adultas de talla media podrían acoplarse pero aceptando estrecheces. Algo común en la mayoría de los modelos incluso de segmentos superiores. El maletero tiene 225 litros de capacidad de carga, no es mucho pero más de lo que ofrece, por ejemplo, el Peugeot 1007 o el Chevrolet Aveo 5 puertas y eso que éste es 18 centímetros más largo. El acabado Enjoy incluye un práctico compartimento de 35 litros bajo el piso del maletero para guardar pequeños objetos. Además en el habitáculo hay multitud de huecos, incluido uno con tapa que situado en la parte superior del salpicadero, justo encima de la consola central. La banqueta trasera no se desplaza longitudinalmente como ocurre en el Renault Modus o el Toyota Yaris, entre otros, sus respaldos pueden abatirse en una proporción 60/40.

El motor de gasolina 1.2 que equipa esta unidad desarrolla 86 caballos, a los que saca un extraordinario rendimiento en la conducción urbana. El cambio automático de cuatro velocidades contribuye a aumentar la sensación de agrado. Es muy rápido en su respuesta desde parado, algo que se agradece especialmente en las incorporaciones a las rotondas. El consumo en ciudad llega fácil a los 8 litros, sobre todo si hacemos girar el motor continuamente por encima de las 4.000 revoluciones por minuto que, por otra parte, es donde se muestra más voluntarioso. Este propulsor es un desarrollo de Suzuki, al igual que el chasis y otros componentes de los que se beneficia el Agila.

Adentrarse por la ciudad con el Agila es un auténtico placer. Es uno de esos coches de los que no apetece bajarse, y es que el Agila hace las cosas fáciles. Para empezar no hay que preocuparse del cambio, labor que hace él solo automáticamente de forma muy eficiente. La suspensión se encarga de eliminar mediante su filtrado pequeños baches y demás irregularidades del pavimento, lo cual repercute muy positivamente en el confort de los pasajeros, pero lo mejor es la agilidad que manifiesta en la "jungla" urbana. En carretera mantiene la talla pero ya no brilla con tanta fuerza, claro que tampoco puede sacar a relucir, de igual manera, sus principales valores. Es suave, silencioso y con un buen confort de marcha, pero acusa las subidas tendidas. Así que para mantener el ritmo es necesario llevar el motor alto de vueltas lo que penalizará el consumo y elevará el nivel sonoro en el habitáculo. En los tramos de curvas enlazadas, a menos que éstas sean muy amplias, se aprecia el balanceo de la carrocería motivado por los cambios de apoyo, pero sin que en ningún momento se vea comprometida la seguridad.

De serie lleva el típico equipamiento que incluye airbags frontales y laterales, ABS y anclajes ISOFIX para las sillas de los niños en las plazas traseras.

También cuenta con pretensores en los cinturones delanteros y dirección asistida en función de la velocidad.

Sin embargo, para disponer de control electrónico de estabilidad habrá que sumar 400 euros al precio base, dado que el ESP es opcional. Lo mismo que los airbags de cortina que tienen un precio de 300 euros.

El Opel Agila es un coche perfecto para la ciudad. Tiene unas medidas contenidas pero con un interior funcional y muy bien aprovechado.

El motor es voluntarioso en la entrega de potencia y combina perfectamente con el cambio automático de cuatro velocidades. Un cambio muy útil en la conducción urbana por su inmediatez de respuesta.

Si el consumo fuera un poco más ajustado, el Agila 1.2 automático sería un utilitario ideal.

Ficha técnica

Texto explicativo no más 250 caracteres

Opel Agila 1.2 16v automático

Equipamiento de serie

T

Exterior

Paragolpes delantero y trasero en color de la carrocería Tiradores exteriores de las puertas en color de la carrocería Retrovisores exteriores en color de la carrocería Retrovisores exteriores eléctricos y térmicos Llantas de acero de 15 pulgadas Pintura metalizada (300 euros)

Interior

Asientos delanteros regulables en altura Guantera con tapa Asiento abatible en proporción 40/60 Elevalunas eléctricos delanteros Cierre centralizado con mando a distancia Cuentarrevoluciones Portagafas Cuadro de relojes con aros cromados sobre fondo blanco Ordenador de a bordo Aire acondicionado Volante regulable Volante de cuero Radio CD con MP3 y conector auxiliar Mandos de audio en el volante Style Pack: volante de cuero, llantas de aleación de 15" y cristales tintados traseros (500 euros)

Seguridad

Airbag de conductor y pasajero Airbags laterales Desactivación del airbag del pasajero Sistema Isofix Faros antiniebla delanteros Luz antiniebla trasera Inmovilizador electrónico antirrobo

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