Seat Exeo ST 2.0 TSI 200 CV Sport

Tenemos que remontarnos al Córdoba Vario para encontrar una carrocería tipo Station Wagon en la gama Seat. Ha pasado demasiado tiempo y demasiadas oportunidades perdidas, teniendo en cuenta que las variantes familiares han gozado de una progresiva aceptación entre el público en los últimos años. Con el nuevo Exeo ST, la marca española quiere recuperar el terreno perdido. Y lo hace presentando un producto con muchas virtudes y muy pocos defectos.

Calidad y comportamiento consiguen una nota muy alta. A ello hay que añadir un precio muy competitivo que permite colocar a este familiar entre las mejores opciones del segmento y respecto a su diseño hay que decir que resulta bastante más atractivo y dinámico que el de su hermano de gama, la berlina de cuatro puertas.

Texto y fotos: Narcís Reixach

Diseño exterior

La estampa externa del Exeo ST mantiene todos los rasgos distintivos de la berlina, a excepción claro está del portón trasero y de unas prácticas barras longitudinales en el techo. Sin embargo, el resultado final es que el familiar ofrece un perfil más agraciado y una vista trasera más musculosa y deportiva. En cuanto a dimensiones, Seat no ha decidido alargar la longitud, siendo el ST sólo 5 mm más largo (4,66 m) que su hermano por cuestiones referidas sólo al nuevo diseño de su parachoques posterior necesario para el ajuste con el portón. En el frontal, el lenguaje "Arrow Design" presenta la ya característica parrilla de la marca mientras que el maletero se abre basculando el logotipo de Seat. La doble salida de escape cromada caracteriza la variante aquí probada y le aporte un toque "racing" bastante notable.

El resultado global está en la línea ofrecida por la gran mayoría de fabricantes: una carrocería familiar de aspecto dinámico y poderosa presencia.

Habitabilidad

Es en este capítulo donde se encuentra la razón de ser del ST. Su capacidad de maletero es de 442 litros cargando hasta la cortinilla cubreequipaje, superando los 550 litros si cargamos hasta el techo. En caso de necesitar más espacio, las plazas traseras se abaten (60/40) para conseguir un volumen total de 1.354 litros. Opcionalmente se puede adquirir una red de separación así como un suelo de material reversible y lavable que permite transportar elementos sucios o húmedos sin problemas. No falta tampoco una toma de 12 voltios así como cuatro anillas de sujeción.

En lo que habitabilidad se refiere, el Exeo ST no se diferencia del Exeo sedán. El espacio disponible para los pasajeros es el mismo, aunque en las plazas traseras existe algo más de altura debido a las formas de la carrocería. Aunque no le sobra anchura ni espacio para las piernas -de hecho cuenta con unas dimensiones inferiores a la de sus competidores directos-, cuatro adultos viajarán con espacio suficiente en el familiar español.

La calidad de terminación es muy alta, con un interior de superficies agradables al tacto y a la vista y donde no hay nada que desentone. Es una pena que el diseño interior se parezca tanto al de la anterior generación del Audi A4 Avant, modelo sobre el que está basado, pero se justifica sobradamente en el caso de Seat, que nunca había ofrecido un nivel interior tan alto.

Por otro lado, la postura de conducción es muy buena, con asientos cómodos y que recogen perfectamente el cuerpo.

Mecánica

Para quién no lo sepa, los motores gasolina también existen en las berlinas familiares. Ironías aparte, el bloque 2.0 TSI de 200 CV es una excelente mecánica por elasticidad, rapidez de respuesta y progresividad. Asociado a una caja de cambios manual de 6 velocidades, y a la espera de un cambio automático, este motor es toda una delicia mecánica. Las prestaciones son de primer orden, con una punta superior a los 230 km/h y un 0-100 de 7,6 segundos. Siempre tiene una reserva de energía disponible, bastando una ligera presión sobre el acelerador para obtener la respuesta requerida. Pese al nivel prestacional del bloque, los consumos se muestran comedidos, con medias que rondarán los 8,5 l/100 km, unos registros más que aceptables.

Es necesario comentar un par de novedades introducidas en el Exeo ST respecto a la berlina. La carrocería familiar cuenta con un indicador de marcha recomendada que nos ayudará a realizar una conducción más eficiente. Otra de las novedades es el sistema WIV de mantenimiento variable. Se trata de un sistema que informa al conductor sobre el momento en el que debe realizar el siguiente mantenimiento, en función del uso del vehículo y la conducción, advirtiendo de bajo nivel de aceite o del desgaste de las pastillas de freno.

Comportamiento

La eficacia dinámica sigue siendo notable en el Exeo ST. En el acabado Sport se puede montar sin sobreprecio una suspensión deportiva, con muelles más rígidos y una altura rebajada en 20 mm que mejora el paso por curva pero que también lo convierte en un coche menos confortable.

En cualquier caso, se trata de un vehículo con una pisada noble, de dirección precisa, buenos frenos, con poco balanceo y cabeceo y que ofrece una gran tranquilidad a quien se pone detrás de su volante. En combinación con el motor de 200 CV, es de aquellos coches con los que ir rápido es muy fácil. El nivel de confort es elevado aunque acústicamente podrían restarse algunos decibelios.

Seguridad

Nada que objetar en el equipamiento de seguridad del Exeo ST. Además de los habituales airbags, incorpora el de rodilla para el conductor. A las fijaciones ISOFIX de los asientos traseros se suma la del asiento del acompañante. Tampoco falta el control de estabilidad y tracción así como sensor de pérdida de presión de los neumáticos.

En la lista de opciones del acabado Sport encontramos airbags laterales traseros, faros bi-xenón direccionales con luz diurna, sensor de lluvia y encendido automático de luces.

Valoración final

Aunque a priori son muchos los rivales del Seat Exeo ST, no lo son tantos cuando elegimos el motor 2.0 TSI de 200 CV, ya que son pocas las marcas generalistas que ofrecen motorizaciones gasolina tan potentes. El precio de casi 27.000 euros de la versión objeto de esta prueba nos parece bastante bueno teniendo en cuenta las prestaciones de primer orden del motor, la calidad conseguida en el interior y el completo equipamiento de serie, muy cercano al de competidores Premium. Además, hay que añadirle el factor de la fiabilidad que comporta emplear un modelo contrastado y de probadísima eficacia como es la plataforma del anterior Audi A4.