Toyota iQ

El Toyota iQ ya está en los concesionarios. Se trata del modelo más urbano de Toyota, un ultracompacto con cuatro asientos que no alcanza los 3 metros de longitud y que llega dispuesto a conquistar a un nuevo tipo de cliente para la marca. En España no se comercializará la mecánica diesel, solo está disponible con el motor 1.0 de 68 CV y con el 1.3 de 98 CV. La versión más básica cuesta 12.500 euros y la más cara 15.250.

Para más información www.toyota-iq.com

PVP: iQ 1.0 68CV 5T/M: 12.500 € iQ 1.0 68 CV MultiDrive: 14.950 € iQ 1.33 99 CV 6T/M Stop&Start : 15.250 €

Lo primero que llama la atención en el iQ es una anchura de 1,68 metros, máxime teniendo en cuenta que su longitud no alcanza los 3 metros, se queda en 2,98 m para ser exactos. Esto significa que es 77 centímetros más corto que un Yaris y 44 cm si lo comparamos con un Aygo. Estas medidas le otorgan cierta desproporción visual, aunque en Toyota prefieren denominarlo "desequilibrio perfecto". En cualquier caso el resultada logra transmitir sensación de robustez. Por otro lado, los diseñadores encargados de su desarrollo partían de una premisa fundamental, debían crear un "envoltorio" para cuatro ocupantes de líneas intemporales, porque la vocación del iQ es permanecer en el tiempo sin grandes cambios. Dicen que la inspiración la encontraron en el pez manta.

El interior del iQ es de gran calidad tanto por la terminación como por los materiales elegidos. Asimismo la combinación cromática en tonos ciruela-chocolate resulta elegante y acertada. La consola central presenta un acabado en plata mate y destaca por su diseño en V, aunque lo que más llama la atención es la asimetría del salpicadero, que en la parte del acompañante avanza hacia el parabrisas con el objeto de liberar espacio en el habitáculo. De esta forma el asiento delantero derecho se puede desplazar longitudinalmente hacia delante para que un adulto pueda acomodarse en la parte de atrás y que ambos pasajeros tengan sitio para colocar las piernas. Claro que no cabe esperar viajar holgados. La plaza situada detrás del conductor apenas dispone de espacio libre entre la banqueta y el respaldo delantero, de modo que solo es apta para niños. Los respaldos traseros se pueden abatir por mitades lo que permite flexibilizar la configuración interior para poder llevar carga, dado que con las cuatro plazas habilitadas el maletero dispone de unos testimoniales 32 litros de capacidad. Si se prescinde de las dos plazas traseras la capacidad de carga sube a 238 litros.

Hay dos motores disponibles, ambos de gasolina. El más básico es el tricilíndrico de 1 litro que también montan el Aygo y el Yaris, aunque con algunas modificaciones para poder acoplarlo al diseño compacto del iQ. Rinde 68 CV y con la caja de cambios manual de cinco velocidades tiene unas emisiones de CO2 de solo 99 gr/km con un consumo combinado de 4,3 litros a los 100 kilómetros. Otra opción es asociarlo al cambio Multidrive, una transmisión por variador continuo, pero solo está disponible con el acabado iQ2 que es el más alto de gama. Estas versiones empezarán a entregarse en julio, al igual que el motor 1.33 que es el otro que puede equipar el iQ. El motor 1.33 viene con sistema Stop&Start y un cambio manual de seis velocidades. Es el mismo que equipa el Auris pero en este caso desarrolla 99 CV.

Su escasa longitud no supone un escollo para que el iQ se muestre estable y con suficiente aplomo, aunque para ello ha sido necesario un ajuste de la suspensión bastante firme, pero que no compromete el confort si el asfalto está en buenas condiciones. La dirección es precisa y rápida, si bien lo que más sorprende es la capacidad que tiene el iQ para maniobrar, y es que el nuevo urbano de Toyota tiene un radio mínimo de giro de solo 3.9 metros. Un Smart, por ejemplo, necesita 4,2 m y un Yaris 4,4 m. Esto le otorga una especial facilidad para moverse por calles estrechas de forma rápida.

El Toyota iQ ha conseguido las cinco estrellas en la pruebas realizadas por EuroNCAP, de hecho se podría decir que la dotación destinada a la seguridad es inversamente proporcional a su tamaño. Además, el equipamiento de serie en el apartado de seguridad es el mismo en los dos niveles de acabado posibles. Así equipa ABS con distribución electrónica de la fuerza de frenado, control de estabilidad y control de tracción, además de nueve airbags entre los cuales se incluye uno de cortina en la luneta trasera, también cuenta con airbag antideslizamiento situado en la banqueta del acompañante.

Actualmente, solo existe en nuestro mercado un utilitario más pequeño que el iQ: el Smart. Pero a diferencia de éste el modelo de Toyota dispone de cuatro plazas. La realidad es que solo puede alojar a tres adultos, pero los asientos están ahí, y si no se usan se gana capacidad de carga en caso de necesidad. Al margen de su diseño, presenta soluciones innovadoras de espacio interior con unas medidas exteriores de las más reducidas, además de gozar de acabados de gran calidad y de un completo equipamiento de serie. El iQ no es un utilitario cualquiera, es un utilitario de capricho y eso, también se nota en el precio: desde 12.500 euros.