El nuevo Volkswagen Sharan da un significativo estirón en su tercera generación. Y es que crece nada más y nada menos que 22 centímetros, además de mejorar el equipamiento, el consumo y el dinamismo. Lo que no sabemos, de momento, es la repercusión que tales mejoras va a tener en el precio. Hay que esperar a septiembre. Aunque es obvio que no va dirigido a los que buscan un monovolumen barato.
Las alternativas al Sharan son múltiples pues en su mismo segmento se posicionan modelos como el Kia Carnival, el Dodge Journey, el Renault Grand Espace y el Ford Galaxy. El Citroën C8, el Lancia Phedra y el Mitsubishi Grandis son un poco más pequeños, mientras que el Chrysler Grand Voyager es bastante más grande.
El lanzamiento del nuevo Sharan será el día 3 de septiembre aunque las primeras unidades empezarán a llegar a nuestro mercado en octubre.
Diseño exterior
Es tanto lo que ha variado la tercera generación del Sharan que del anterior modelo solo han aprovechado los parasoles. Estéticamente ahora se parece más al Volkswagen Touran, su hermano pequeño, ya que al abandonar la línea continua que formaban el capó y el parabrisas, el frontal no es tan afilado. Aún así han logrado reducir un 5 % el coeficiente aerodinámico, con lo que se sitúa ligeramente por debajo de 0,30. Pero lo que más llama la atención son los 22 centímetros de longitud que añade respecto a su predecesor, de modo que ahora mide 4,85 metros de largo. También crece a lo ancho 9,2 centímetros lo que supone alcanzar 1,9 metros, mientras que la altura se rebaja 1,2 centímetros quedándose en 1,72 metros.
La horizontalidad manda en los trazos del nuevo Sharan, dando como resultado una carrocería de aspecto robusto, actual pero sin pasarse, para que, como es costumbre en Volkswagen, soporte bien el paso del tiempo.
Una novedad de esta generación del Sharan es la incorporación de puertas correderas traseras, un sistema muy práctico del que varios de sus rivales ya se estaban beneficiando, incluso hay monovolumenes de segmentos inferiores que lo montan, caso del Peugeot 1007 y del Mazda 5.
Habitabilidad
En lo que respecta a la configuración interior, para el mercado español están previstas dos posibilidades: una, la de serie, con siete plazas (2+3+2) y otra, opcional, con seis (2+2+2).
Los asientos, todos ellos individuales, se pliegan hasta quedar enrasados en el suelo del vehículo por lo que la superficie resultante es completamente plana.
Las plazas de los extremos de la segunda fila pueden venir equipadas con sillitas de niños integradas adecuadas para niños a partir de 3 años. Asimismo, todas ellas se pueden desplazar longitudinalmente hasta un máximo de 16 centímetros, de forma que se puede modular el espacio disponible para los ocupantes de la última fila.
Los asientos son cómodos; más cuanto más adelante se sitúe la fila a la que pertenecen.
Los delanteros parten de una posición más baja que en la anterior generación, lo que resta, en parte, esa sensación de "dominio" que da el viajar en un vehículo alto, en comparación con un turismo. Por otro lado, si la posición del asiento se mantiene en su nivel más bajo el cinturón de seguridad (aunque tiene regulación en altura) queda muy arriba, a menos que se tenga una talla XXL.
El volumen del maletero es de 300 litros con las siete plazas disponibles, pero si se pliegan los asientos de la última fila la capacidad de carga aumenta hasta los 711 litros. El volumen máximo llega a 2.430 litros.
Mecánica
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El Sharan estará disponible con cuatro motorizaciones: dos de gasolina y dos diesel.
En gasolina las opciones son el 1.4 TSI de 150 CV y el 2.0 TSI de 200 CV. Este último equipa de serie el cambio automático de doble embrague DSG de 6 velocidades en lugar del manual de igual número de marchas.
En diesel la oferta está compuesta para el bloque de 2 litros TDI en dos variantes de potencia: 140 y 170 CV. En ambos casos la transmisión que asocian es la manual de seis relaciones aunque opcionalmente se puede sustituir por el cambio DSG de seis velocidades. Asimismo pueden equipar el paquete BlueMotion Technology que incluye el sistema de parada y arranque Start/Stop y el de recuperación de la energía de frenado. Tecnología que ayuda a Volkswagen a presumir de que la versión del Sharan 2.0 TDI de 140 CV es la más ahorradora de su segmento con un consumo medio de 5,5 litros a los 100 kilómetros.
Comportamiento
Lo primero que llama la atención al poner en marcha cualquiera de las motorizaciones diesel es lo silenciosas que resultan (las de gasolina no tuvimos ocasión de probarlas). De modo que una vez en marcha el ruido que llega al habitáculo proviene básicamente del propio motivado por la rodadura.
Como ya hemos indicado los asientos delanteros parten de una posición más baja que en anteriores generaciones, así que si se dejan en ese nivel la sensación al sentarnos al volante se aproxima más a la que se tiene en un turismo, mientras que si se quiere ir más alto solo hay que regular la banqueta, porque la generalidad de los conductores tendrán un elevado margen hasta que su cabeza se aproxime al techo.
Al margen de la posición, el Sharan apunta formas de berlina en su comportamiento tanto por confort de marcha como por dinamismo. La suspensión adaptativa electrónica "DCC" que se ofrece como opción, resulta muy eficaz a la hora de filtrar baches y también en la contención de los balanceos de la carrocería que se pueden originar al paso por curvas o en cambios de apoyo. Esta suspensión permite tres programas de ajuste: Normal, Deportivo y Confort, que se ajustan mediante una tecla situada en el salpicadero.
En cuanto a la respuesta mecánica la versión 2.0 TDI de 140 CV ya muestra suficiente empuje para mover con soltura al monovolumen alemán.
Seguridad
En el apartado de seguridad el Sharan incluye de serie un equipamiento muy completo entre el que se encuentran siete airbags, incluido el airbag de rodillas para el conductor; control de estabilidad electrónico (ESP) con ABS, sistema de bloqueo de diferencial electrónico (EDS), asistente de freno, estabilización del conjunto de remolque, asistente de contraviraje y control de la presión de los neumáticos.
También cuenta con anclajes Isofix para la segunda y tercera fila de asientos, conexión automática de luces en caso de una frenada en seco y freno de estacionamiento eléctrico con asistente para el arranque en pendientes.
Valoración
El Sharan es el modelo más grande de la familia monovolumen de Volkswagen, entendiendo por ésta la que forma con el Touran; si bien la marca alemana no duda en incluir también al Caddy y al Multivan, distanciándolos con ello de la "liga" de los vehículos comerciales. Claro que al margen de intereses comerciales y de que ciertamente gozan de un gran confort, la realidad es otra.
Pero centrándonos en lo que nos ocupa, esto es, el nuevo Sharan, decir que esta tercera generación apuesta por la utilidad en un grado superior al que en su momento hicieron sus antecesores.
Tengo un touran que se diferencia poco de este, sera el tamaño y en el precio Claro que el mio no tiene puertas correderas. Puertas correderas si. puertas correderas no. Que se pringen de una vez en coches de menos consumos. Y por supuesto, que no contaminen tanto.