El Salón de Seul se celebra cada dos años en la capital coreana y tiene un enfoque muy comercial. Las marcas locales suelen presentar sus grandes novedades para el mercado doméstico y rara vez aprovechan para dar a conocer novedades internacionales. Este año no era una excepción salvo en el caso de Ssangyong, que aprovechó la muestra para lanzar la cuarta generación del Rexton.
Este nuevo Ssangyong es un todoterreno de tamaño grande que mantiene las principales características de un coche de este tipo. Construido sobre un chasis de largueros y travesaños es un coche de propulsión trasera con el eje delantero conectable y caja reductora. Un auténtico TT que, por tanto, seguirá compitiendo contra coches como el Toyota Land Cruiser o el Mitsubishi Montero pero que entra de lleno también en la disputa contra los SUV de siete plazas de tamaño grande de marcas generalistas.
El Rexton dispondrá de un motor diésel de 181 CV acoplado a una caja de cambios manual de seis marchas o a una automático de siete. Habrá versiones de tracción trasera e integral y llegará al mercado español a finales de este mismo año.
El coche tiene un habitáculo muy grande, con dos o tres filas de asientos. La segunda es amplia y cuenta con regulación de la reclinación del respaldo y abatido por mitades asimétricas para facilitar el acceso a la tercera fila y ampliar las posibilidades de carga del vehículo. El maletero es grande, por encima de los 600 litros con dos filas de asientos y tiene portón de apertura eléctrica (novedad en un coche de la marca) y un doble fondo partido en dos mitades que permite dividir el maletero tanto horizontal como verticalmente.
El Rexton, además de más moderno a nivel estético, ha ganado notablemente en calidad interior y, sobre todo, en equipamiento disponible. Las plazas delanteras son cómodas, con unos buenos asientos y el coche dispondrá de elementos no vistos hasta ahora en la marca como el freno de estacionamiento eléctrico, una nueva instrumentación con pantalla digital central, navegación en 3D y diferentes ayudas a la conducción como el aviso de cambio de carril, el control del ángulo muerto o la frenada de emergencia.
Hyundai y Kia sin grandes novedades
Las otras dos marcas coreanas, Hyundai y Kia, no presentaron novedades relevantes así que nos quedamos con las ganas de ver los SUV de segmento B que ambas deben presentar próximamente (en el caso de Hyundai, la marca ha anunciado que se llamará Kona). Hyundai presentaba el rediseño del Sonata, un coche muy similar a nuestro i40, un Ioniq autónomo conceptual y una curiosa versión de altas prestaciones del i30 realizada conjuntamente con un preparador local.
Kia, por su parte, concentraba todos sus esfuerzos en la presentación del Stinger que nosotros ya vimos en el Salón de Ginebra pero que aterrizaba por primera vez en Corea y que completará la gama de vehículos de gama alta de la marca que ya incluye los modelos K7 y K9, desconocidos en Europa pero muy habituales en Corea.
La cuarta marca local, Samsung, pertenece actualmente al Grupo Renault y tras algunos años desarrollando sus propios modelos (los Renault Latitude, Fluence y Koléos eran coches diseñados en Corea por esta marca), ahora se dedica a fabricar versiones locales de modelos Renault ya conocidos.
En Corea ya se venden tanto el SM6, versión coreana del Renault Talisman como el QM6, el futuro Renault Koléos europeo. La gran novedad en el stand de este fabricante era el Renault Clio, vendido esta vez como Renault y que llega importado desde Europa.
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El nuevo Honda CR-V, disponible en Corea
Una de las grandes novedades del salón desde el prisma europeo era el nuevo Honda CR-V, un coche presentado recientemente en Estados Unidos pero que no estaba en el pasado Salón de Ginebra. En Seúl sí, con un nuevo motor turbo de gasolina de 1,5 litros que antes veremos en el Civic que llega estos días a los concesionarios.
Más grande, más habitable y con más maletero, el nuevo CR-V será un coche con más y mejor equipamiento, sobre todo en la parte de ayudas a la conducción y de conectividad. Con un frontal en línea con el del HR-V y una trasera que cambia radicalmente, con pilotos horizontales en lugar de verticales, este nuevo SUV debería llegar también a Europa a finales de este año.
Siguiendo con las marcas japonesas, Nissan estaba presente en el salón con el concept car Gripz, que ya habíamos visto en otros certámenes y el Murano, un interesante SUV grande que no llegará a Europa mientras que Toyota lanzaba en Corea la versión enchufable del Prius que no debería tardar mucho en aparecer por nuestro mercado.
Las marcas europeas brillaban por su ausencia salvo contadas excepciones. Es el caso del Grupo PSA, decidido a conquistar una parte del mercado local con coches como el Citroën C4 Cactus o el Peugeot 3008.
Y por lo que respecta a las marcas premium, Land Rover, que vende muy bien en Corea, presentaba los nuevos Land Rover Discovery y Range Rover Velar, Mercedes se trajo el concept Coupé AMG GT, recientemente presentado en Ginebra para acompañar al AMG GT Roadster y a las versiones Coupé y Cabrio del Clase E.
Las marcas premuim europeas van haciéndose un hueco en Corea a costa de las locales que tienen también su oferta premium. La del Grupo Hyundai pasa por Genesis, su nueva marca de lujo a imagen de Lexus o Infiniti y que en Seul presentaba una edición especial del G90, su buque insignia.
Y poco más, la verdad. Algunos microcoches eléctricos como el roadster biplaza Yebbujana R y que anuncia una autonomía de nada menos que 765 kilómetros, los modelos de CAMMSYS, empresa que fabrica un biplaza urbano tipo Smart llamado PM100 y el TX700e, un simpático camioncito pick-up. Y finalmente, limusinas locales, sobre la base del Genesis o del Kia Carnival, un monovolumen que no estaría mal que se vendiera por estos lares.
Buena pinta ese coche