Escrito por Dan Vardie en exclusiva para Autobest
Vinfast será el primer fabricante de coches de Vietnam, pero, asimismo, es la start-up de más rápido crecimiento en el mundo del automóvil y un proyecto financiero global sin precedentes. Hemos podido visitar sus instalaciones en Vietnam y contaros en primera persona y desde dentro, qué es Vinfast y cuáles son sus ambiciones.
Los periodistas de Autobest hemos sido los primeros en acceder al corazón de Vingroup, el grupo empresarial privado más importante de Vietnam. La historia del mismo se inició hace 25 años cuando Pham Nhat Vuong fundó una pequeña empresa para comercializar pasta de arroz deshidratada. En 2009, Nestle compró esa compañía por 150 millones de dólares
Con ese dinero, Pham Nhat Vuong creó la base de un importante negocio inmobiliario apoyado en el sector turístico que, en los últimos años se ha ampliado al diseño de parques temáticos y grandes centros comerciales y se ha diversificado entrando en los campos de la educación, la salud y la agricultura. El pasado 2 de octubre, la compañía dio un paso más en esa diversificación al anunciar el lanzamiento de Vinfast, el primer fabricante de coches de nacionalidad vietnamita. En paralelo, el grupo creó Vinsmart, empresa que trabaja en el campo de la inteligencia artificial, las nuevas tecnologías, los productos digitales y los materiales de vanguardia.
Para los amantes de los números, la valoración actual del Grupo Vingroup es de 32.000 millones de dólares. La compañía posee 1.500 grandes almacenes, 56 centros comerciales y más de 14.000 apartamentos. Los beneficios en 2017 superaron los 1.000 millones de dólares y el señor Pham figura entre las grandes fortunas mundiales con un patrimonio de 6.800 millones de dólares según Forbes.
El CEO de Vinfast es James de Luca, un norteamericano con una larga experiencia en el mundo del automóvil, especialmente en General Motors. A de Luca le explicaron que querían crear una marca de coches en menos de 24 meses y que el proyecto tenía que montarse desde cero (plantas, proyecto, empleados, desarrollo…). En el próximo Salón de París, la marca presentará sus dos primeros productos, la planta para fabricar los coches está casi lista y 5.000 personas trabajarán en Vinfast dentro de apenas un año.
Le Thi Thu Thuy, vicepresidenta de Vingroup y directora general de Vinfast explica que “Vietnam es uno de los países más sub-motorizados de la región con apenas 23 coches por cada 1.000 habitantes y el mercado es muy pequeño con apenas 300.000 unidades vendidas cada año en un país de 96 millones de habitantes. La inversión que hemos realizado es de 3.500 millones de dólares.”
Esa cifra le convierte en la start-up automovilística con una mayor inversión en los últimos 10 años. Para tener una idea, sólo Lynk & Co. es comparable pero la empresa china del Grupo Geely, propietaria asimismo de Volvo, London Taxi y Lotus ya estaba introducida en el negocio. De Luca nos cuenta que “la planta de Hai Phong ocupa 335 hectáreas de las que 120 se han ganado al mar. Actualmente, la fábrica está en la fase final de construcción, con algunas naves todavía sin techo y otras en las que ya se han empezado a instalar las líneas de robots. Para asegurar que la planta se mantendrá en las tierras ganadas al mar, los cimientos descienden hasta 40 metros para reposar sobre roca y las obras han comportado que 6.000 personas trabajaran en la construcción de la planta durante casi un año.
250.000 unidades/año
La planta tendrá una capacidad de producción de 250.000 unidades anuales. En una segunda fase (2025), esa capacidad debería poder doblarse. Shaun Calvert, otro directivo ex-GM que trabajo en la venta de Opel a PSA es el director de producción. Cuenta que “Formamos a los operarios futuros con la colaboración de la Eckert school de Munich ya que no tenemos trabajadores cualificados en el país. Tenemos 1.400 robots y 1.200 vehículos de transporte autónomos para mover componentes y conjuntos ya montados tanto dentro como fuera de las naves de montaje. Ello asegura un alto grado de automatización, imprescindible para conseguir los estándares de calidad deseados. Por ejemplo, las tres líneas de montaje finales, que producirán 38 coches/hora, disponen de 200 robots de la marca ABB”. Vinfast ha reservado 70 hectáreas para las plantas de proveedores, entre ellos Bosch, Lear, DURR o ZF, los primeros en firmar los contratos con el nuevo fabricante.
Vinfast ha desarrollado su propio sistema de control de calidad. Tal como explica Clevert “Cada fabricante tiene su sistema de control que incorpora la experiencia de años de fabricación y los elementos culturales propios de cada país. Nuestro sistema es propio, sin influencias externas. Empezar de cero en esto es una ventaja ya que hemos podido crear un equipo con especialistas procedentes de diferentes países y con culturas distintas”.
Los dos primeros modelos, un SUV y una berlina, se han desarrollado utilizando una plataforma comprada a BMW. “Firmamos un contrato que nos da acceso a patentes y al know how en industrialización” explica de Luca. La plataforma empleada parece ser la que BMW emplea en el Serie 5 y el X5 ya que los dos primeros modelos serán vehículos premium que saldrán a la venta en el tercer trimestre de 2019. El contrato comprende asimismo la venta del motor K20 de dos litros que los especialistas de AVL han simplificado sin que ello afecte a las prestaciones, el consumo y las emisiones. Este motor se ofrecerá en dos variantes de 175 y 230 CV.
"No nos hemos planteado motores diésel porque en Vietnam y en los países del sudeste de Asia no hay mercado para turismos diésel” explica Kevin Fisher, responsable de ingeniería y desarrollo. "Aunque de momento no hemos hablado de electrificación, utilizamos una plataforma que nos permite desarrollar versiones electrificadas de manera que esta es una opción de futuro” comenta Fisher.
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David Lyon, otro ex-GM que, en este caso, lidera el diseño de la nueva marca, relata que han trabajado conjuntamente con Pininfarina en el diseño de los dos primeros coches. “Hemos seguido el mismo proceso de validación que el resto de fabricantes. La única diferencia es que nuestro proceso ha durado unos pocos meses en lugar de años. Además de con Pininfarina, hemos colaborado también con Italdesign”.
El 1 de enero los primeros modelos en arcilla estaban listos para ser validados y después de dos meses, el 5 de marzo, se inició la segunda fase de diseño que culminó el 4 de mayo. En ese momento ya estaban listos los dos modelos, la berlina de cinco asientos y el SUV de 7 plazas realizado en Europa y que se exhibirá en París en octubre. Actualmente, más de 160 prototipos camuflados ruedan tanto en Europa como en Vietnam.
Lyon remarca que la interface hombre-máquina de Vinfast será una de las características esenciales de la marca. Dispondrá de una pantalla de 10 pulgadas en la consola central y los fondos de los menús están inspirados en los paisajes vietnamitas. En los primeros bocetos que vimos, el sistema parece similar al que utiliza Volvo pero Lyon insiste en que no hay parecidos con el equipo que usa la marca sueca. Además de la pantalla de 10 pulgadas hay otra de 7 para la instrumentación y el sistema es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
Ampliación de gama
Tras el inicio de las ventas de los dos modelos citados (sobre el primer cuarto de 2020), la marca lanzará un coche urbano sobre la plataforma del Chevrolet Spark, ya adquirida, así como un modelo compacto eléctrico desarrollado junto a EDAG. El modelo pequeño dispondrá de un motor de tres cilindros de origen GM, pero no conseguimos más información acerca del eléctrico más que no usará baterías de estado sólido sino las habituales de iones de litio. Posiblemente ambos coches se presenten el año que viene en Ginebra.
La estrategia de marketing está todavía en desarrollo. “Empezaremos con dos modelos premium para demostrar de qué somos capaces y para dejar claro que no somos un fabricante con estándares de tercer mundo” explica de Luca. De entrada, Vinfast se focalizará en el mercado vietnamita, que es prácticamente virgen y donde la marca puede conseguir un 30% de cuota con mucha facilidad. Este será un primer paso ya que las ambiciones de la marca con respecto a su mercado doméstico son mucho mayores.
De entrada, la producción se dividirá al 50% entre los dos modelos, pero, al tratarse de líneas flexibles, la proporción se adaptará a la demanda. El sedán se situará ligeramente por debajo del Toyota Camry y el Mazda 6, considerados sus principales rivales mientras que el SUV atacará al Toyota 4 Runner y al Mazda CX5. Cabe destacar que el gobierno vietnamita aplica un 70% de impuesto a los modelos importados salvo si están construidos en la zona ASEAN (sudeste asiático incluyendo Vietnam, pero no China, ni Corea ni Japón).
La gran cantidad de vehículos que se fabrican en esa área (que incluye Tailandia, Indonesia o Malasia, por ejemplo) hará que Vinfast se enfrente a un mercado competitivo, pero según la marca, al fabricar en el país, estarán más preparados para reaccionar antes a las necesidades de los clientes locales. Vinfast espera entregar los coches con dos meses de plazo en lugar de los cinco habituales en el resto de marca. Además, la firma confía en que el hecho de tratarse de una marca local les dará ventajas añadidas.
El Presidente Pham planea hacer de Vinfast una marca global. Las primeras exportaciones se harán al resto de países de ASEAN y a China ya en 2021. Para tener éxito esperan conseguir una imagen de marca que se base en sus principales elementos: ingeniería alemana, diseño italiano, calidad elevada y fabricación perfecta. El precio debe ser también un elemento fundamental en el éxito de la marca. Algunas estimaciones hablan de un precio de unos 13.000 dólares para el sedán, pero los responsables de Vinfast no han querido hablar del tema. De cara a una posible exportación a Europa, no hay ninguna decisión tomada.
En definitiva, el proyecto de Vinfast parece sólido. Tiene el apoyo económico del primer grupo industrial del país pero además ha construido un plan de futuro razonable y dispone de la gente necesaria para su implementación.
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