La tecnología híbrida ligera de Audi

Los avances de Audi en materia de electrificación en diferentes ámbitos son cada vez más evidentes. Una muestra de ello la integran los nuevos vehículos a los que la marca alemana denomina de hibridación ligera “Mild Hybrid” (MHEV), variantes que podrán asociarse tanto con motores diésel como de gasolina y que empezarán a llegar antes de acabar este mismo año como es el caso del nuevo A8. Hace solo unos meses, Audi ya presentó en Ginebra su Q8 Sport Concep con una variante de este sistema MHEV.

La marca de los cuatro aros proporciona el sistema MHEV en dos tipologías. Mientras que los motores de cuatro cilindros emplean el sistema eléctrico de 12 voltios, los de seis, ocho y doce cilindros incorporarán un nuevo sistema de 48 voltios. El objetivo de esta tecnología es ganar en eficiencia, comodidad y deportividad de cara a los próximos años.

Uno de los modelos que incorporará la nueva tecnología MHEV, en versión de 48 voltios, será la próxima generación del A8, que llegará al mercado a finales de año. El sistema está formado por un alternador de arranque y una batería de iones de litio. El alternador, que está ubicado en la zona lateral delantera del motor y es capaz de entregar 60 Nm de par, está accionado por correa y se refrigera por agua.

Por su parte, la batería de iones de litio, cuyas proporciones son similares a las de una batería convencional de plomo, se encuentra alojada en la zona del maletero. Cuenta con una capacidad de carga de 10 Ah y, en la nueva generación del A8, este sistema de 48 voltios tiene también la función de sistema eléctrico principal del automóvil. La gestión térmica de la batería se realiza mediante el control del aire de refrigeración.

Gracias a la tecnología MHEV, al levantar el pie del acelerador a velocidades de entre 30 y 160 km/h, el vehículo puede llegar a circular por inercia hasta 45 segundos con el motor totalmente apagado. En el momento en que se vuelve a pisar el acelerador, el motor arranca de forma rápida y casi imperceptible. En ese momento, el alternador se encarga de aumentar las revoluciones del motor de combustión hasta la velocidad a la que se circula. Cabe destacar que, en función de la situación, es más eficiente la recuperación de la energía al decelerar que el propio funcionamiento por inercia.

Por este motivo, un sistema de gestión de la propulsión se encarga de tomar la mejor decisión en cada momento. En el caso del nuevo A8, el sistema emplea una cámara frontal, un asistente de eficiencia predictiva y datos procedentes del propio navegador y de diversos sensores para escoger siempre la función más eficiente de las dos. Gracias a este sistema, el consumo de un motor V6 de gasolina puede disminuir hasta en 0,7 litros cada 100 kilómetros.

Además de con el sistema de 48 voltios, esta nueva tecnología MHEV también estará disponible con un sistema eléctrico convencional de 12 voltios. El funcionamiento no cambia, si bien al rodar por inercia, tanto la recuperación de energía como la reducción de emisiones son algo inferiores.

No hay que pasar por alto que Audi ya introdujo el sistema de corriente alterna constante de 48 voltios en modelos de producción en 2016, con el Audi SQ7 TDI, aunque sin la nueva tecnología MHEV. En este modelo, el alternador funciona sobre 12 voltios y un convertidor DC se encarga de acoplar el subsistema eléctrico de 48 voltios. Entre la energía que proporciona este subsistema se encuentra la que emplea el sistema electromecánico antibalanceo (eAWS).

Dicho sistema antibalanceo integra otra de las recientes innovaciones de la marca alemana. Su funcionamiento se basa en un motor eléctrico que desacopla las dos partes de la estabilizadora al rodar en línea recta, lo que genera una mayor comodidad. Por otro lado, cuando se practica una conducción más dinámica en carreteras reviradas, el mismo motor eléctrico se encarga de girar las barras estabilizadoras para dotar al vehículo de una mayor firmeza. Ello se traduce en una conducta más deportiva.

Durante los próximos años, más modelos de Audi integrarán la nueva hibridación ligera y los sistemas de 48 voltios, tecnologías que podrán aplicarse cada vez más a mecánicas de mayor par y potencia con el objetivo de optimizar su eficiencia.

En el pasado Salón del Automóvil de Ginebra, celebrado durante el mes de marzo, Audi presentó su Q8 Sport Concept, en el que puso de manifiesto del potencial del sistema MHEV, que en este vehículo permite reducir el consumo en un litro por cada 100 km. En este caso, el alternador de arranque tiene una potencia de 20 kW y 170 Nm y se encuentra alojado entre el cigüeñal y la transmisión.

A baja velocidad, el SUV puede rodar en modo cien por cien eléctrico. Cuando es necesario, emplea el motor 3.0 TFSI de gasolina, generando un par motor conjunto de nada menos que 700 Nm. A ello hay que sumarle una potencia de 476 CV que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y lograr una velocidad punta gde 275 km/h.

Hay que destacar que el sistema de 48 voltios del prototipo presentado en Ginebra incorporaba un compresor eléctrico (EPC), además del alternador de arranque. Gracias al compresor no solo se consigue una respuesta más rápida del turbo sino que también es posible disponer de un único turbo de doble entrada.