El Suzuki Vitara 48V será el primer modelo de la marca en introducir una tecnología híbrida de mayor consistencia. A día de hoy, el fabricante se había limitado a utilizar pequeños motores eléctricos de 12 voltios en Swift e Ingnis (también en el Baleno) pero las normativas europeas apremian. Pese a mantener su esencia todoterreno, el Vitara se ha convertido en un animal urbanita y de ahí que la etiqueta ECO le siente tan bien. Por todo lo demás, estamos ante un vehículo que no ha evolucionado en su camino hacia la electrificación. De ahí que este artículo en profundidad del modelo 2018 siga estando al día.
La hibridación ya no es una opción para ningún fabricante, por pequeño o histórico que sea. Suzuki sabe que no se librará de las multas astronómicas que impondrá Europa a finales de año. Conseguir los 95 gr/km de CO2 (en ciclo NEDC) es misión imposible para este 2020 y mucho menos en WLTP, la homologación que marcará el límite de emisiones a partir de 2021. Esta presión ha obligado a la firma a renunciar a su jugador estrella: el Suzuki Jimny. Un 4x4 fiel a su esencia que ha tenido una acogida espectacular en todo el mundo y del que podéis ver la videoprueba en este enlace. No os ilusionéis con él, la firma ha tenido que paralizar su producción por las emisiones y entregará las últimas unidades durante el 2020. Ya tenemos nuevo unicornio y su precio de reventa no ha tardado en subir como la espuma.
De vuelta a la actualidad, Suzuki hará frente como pueda a dichas multas. Por ahora prometen no tocar el bolsillo del comprador, pero sí han tenido que realizar cambios en su portfolio. Ejemplo de ello es el Suzuki Vitara V48, el único modelo disponible de toda su familia y con un nuevo sistema Mild Hybrid realizado a partir del gasolina 1.4 Boosterjet. La firma ya comercializaba variantes microhíbridas -bajo la denominación SHVS (Smart Hybrid Vehicle by Suzuki)- en el Swift e Ingnis pero, sus 12 voltios, no son suficientes para conseguir los objetivos globales del fabricante.
No existen cambios estéticos que identifiquen esta versión, más allá del emblema Hybrid que podemos ver en su portón trasero. Eso sí, el Vitara 48V pasará a comercializarse en los acabados superiores, denominados GLE y GLX, con un nivel de equipamiento superior. Su vívida carrocería seguirá llamando la atención, con hasta cinco tonos de carrocería y ocho posibles combinaciones con el techo bitono. Especial mención merece el color rojo Bright, muy parecido al que montaba el Vitara con el que aprendí a conducir a los 18 años.
Al arrancar en un acabado superior, su tecnología de acceso también lo es. El Vitará llegará equipado con faros de LED de serie además de disponer de sistemas de seguridad como la alerta de cambio de carril, alerta antifatiga, sistema de reconocimiento de señales, detección de ángulo muerto y control de crucero predictivo, entre otros.
Suzuki Vitara Mild Hybrid
Suzuki quería que esta nueva tecnología afectara lo menos posible a la esencia del Vitara y del S-Cross, modelo que llegará más adelante con la misma hibridación. Por ese motivo, el pequeño motor eléctrico de 11 KW compensa la pérdida de 11 CV respecto al mismo motor gasolina anterior. Ese que utilizaba el Vitara del 2019, antes de que quemar combustible fuera considerado casi ‘eco-terrorismo’. Con esta pequeña ayuda eléctrica se consigue un plus prestacional en las aceleraciones o adelantamientos pero su principal función no es otra que ahorrar, tanto combustible como emisiones. La firma asegura que reduce ambas en hasta un 15%.
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No podemos sacar conclusiones de la ruta realizada durante la presentación dado que el puerto escogido era demasiado exigente para un bloque de menos de 130 CV. Los consumos de la unidad probada se dispararon por encima de los 8 l/100km, una cifra muy alejada de los 5,7 l/100 km que homologa la marca para el modelo 4x2. La versión 4WD ALLGRIP firma un consumo medio en ciclo WLTP de 6,2 l/100km así que, suponemos, lo habrán conseguido en condiciones muy ventajosas para el Vitara. Tampoco fuimos capaces de notar otra de las claves de este propulsor cero emisiones, que hace funcional el motor de combustión al relentí durante una desaceleración importante.
Por suerte, pudimos redimirnos con un trazado off-road preparado en una finca de Segovia. El Vitara 48V 4WD ALLGIP mantiene los tres modos de conducción (Auto, Sport, Snow) junto a la función Lock. Este último botón bloque el envío de fuerza al 50-50 y, junto el modo Snow, nos permitió superar todos los obstáculos. La etiqueta ECO no le ha restado emoción a este todoterreno, que sigue sorprendiendo por sus capacidades fuera del asfalto. Además, la batería de ion litio de 48 voltios está situada justo entre ambos ejes, de modo que su reparto de peso sigue siendo bastante bueno.
La propia marca admite que esta tecnología tiene un objetivo muy concreto: superar las trabas administrativas y reducir las emisiones de sus vehículos. Algunos compradores, no todos, están relativamente concienciados sobre el medioambiente pero lo que realmente les interesa es la pegatina del coche. La introducción de este pequeño propulsor eléctrico, que no puede funcionar por sí solo, supone un incremento del precio aproximado de 1.800 euros.
¿Cuánto cuesta un Vitara híbrido?
Un coste que se reducirá con el precio de salida con descuentos promocionales de 1.300 euros, que dejan el modelo de acceso Vitara 1.4T GLE en 22.400 €. Si requerimos de sus capacidades off-road y apostamos por el equipamiento superior, su precio se incrementara a los 26.490 € de GLX 4WD.
2020 es el inicio del fin de muchas marcas. Cantidades ingentes de dinero en reducir emisiones mientras los precios suben sin parar. 1800e más por una pegatina, porque ni ahorra gasolina ni contamina menos.
No se puede decís más claro