El Picanto es el modelo más pequeño de la gama Kia. Se trata de un coche urbano de apenas 3,6 metros de longitud pensado para un público joven y desenfadado. El nuevo Picanto ofrece un atractivo rediseño estético, mejoras de chasis y de equipamiento, y lo mejor de todo es que está disponible con un precio de partida inferior a los 8.000 euros con descuentos.
El Picanto tradicionalmente ha sido un coche para un público joven, y en muchos casos ha sido una de las elecciones que éstos han tomado para convertirlo en su primer coche después de sacarse el carnet de conducir. Tampoco hay que esconder que mayormente era un coche conducido por mujeres, pero quizás eso ahora empiece a cambiar…
Unisex
El nuevo modelo es un coche con un encanto diferente. El rediseño estético de su carrocería le aporta un “look” distinto, que mezcla algunos rasgos graciosos al tratarse de un coche tan pequeño, con un frontal, por ejemplo, más trabajado y hasta podría decirse que un poco agresivo. En su parte delantera encontramos la característica parrilla de Kia acompañada por una gran toma de aire inferior.
Pese a tratarse de la versión de entrada a la gama, llamada “Concept”, podemos ver como ya de serie monta pilotos antiniebla delanteros, aunque los faros están compuestos por luces halógenas. Por su parte, las llantas son de acero y de 14 pulgadas con neumáticos en medida 175/65.
La zaga también presenta un ligero rediseño, tanto en la zona del paragolpes como en los grupos ópticos, ofreciendo ahora una sensación de mayor empaque general. En definitiva, el coche gana en atractivo se mire por donde se mire, o al menos esa es la impresión que me ha transmitido a mí.
El interior también ha mejorado gracias a las nuevas opciones de personalización y algunos detalles mejor acabados. En este nivel de equipamiento se ve todo muy sencillo y bastante espartano, pero en conjunto resulta más o menos funcional. No esperéis una gran calidad porque no la hay, aquí todo son plásticos duros, pero sigue la tónica de prácticamente el 90% de los modelos de este segmento.
Cambia el estilo del salpicadero y de la consola central, así como las salidas de los aireadores. El volante también es de nueva factura y posiblemente sea el mismo que ya montan otros modelos de la firma coreana.
Con este acabado no hay climatizador, sí aire acondicionado, una cuadro de instrumentos sencillo, volante multifunción, y un sistema de infoentretenimiento básico con radio y conexión bluetooth para el teléfono y el “streaming” de música, entrada USB y un puerto auxiliar. Opcionalmente se puede optar una pantalla táctil de tipo tablet en la parte superior del salpicadero.
El puesto de conducción resulta cómodo y dentro de lo que cabe es hasta espacioso. El asiento tiene buen mullido pero recoge poco el cuerpo. Otro punto “negativo” es la regulación del volante, la cual sólo ofrece opción de configurarlo en altura y no en profundidad.
El nuevo Picanto aumenta ligeramente la distancia entre ejes y ha ganado algún centímetro extra para los pasajeros traseros. Siempre teniendo presente que estamos ante un vehículo del segmento A, el espacio para los acompañantes traseros es "correcto". La distancia para las rodillas quedará condicionada por la altura de las dos personas delanteras y de la configuración de su asiento, pero el espacio que ofrece no está mal. La altura hasta el techo tampoco será un problema para la gran mayoría. Sin embargo, la anchura a la altura de los hombros es un poco justa y sólo permite viajar a dos ocupantes aunque disponga de tres cinturones.
Gracias a las nuevas formas de la parte trasera, el maletero ha ganado en capacidad, pasando de los 200 litros del modelo precedente a los 255 litros de éste. Una cifra que ya empieza a ser correcta aunque los pasos de rueda continúan dificultando la distribución de la carga. Abatiendo los respaldos traseros se logra una capacidad total de 1.010 litros, aunque aparece un incómodo escalón. Debajo del suelo, en este caso, encontramos un kit reparapinchazos, aunque hueco para una rueda de repuesto lo hay.
Motor aprobado por lo pelos
Con el nivel de acabado Concept, el de acceso a la gama, sólo está disponible el motor de gasolina de 3 cilindros y 1 litro de cilindrada. Se trata de un motor que ya se usaba en el anterior Picanto y que ofrecía un rendimiento correcto para un cliente sin demasiadas pretensiones.
Se trata de un motor atmosférico, sin turbo, y con una entrega de potencia extremadamente lineal. Ofrece 67 CV de potencia y tan sólo 96 Nm de par, con los que consigue una aceleración de 0 a 100 km/h en 14,3 segundos y una velocidad punta de 161 km/h según su ficha técnica.
Al volante no se le puede pedir demasiado a este pequeño motor, que se muestra como “suficiente” para mover con dignidad al Picanto. También juega a favor del más pequeño de los Kia que todo el coche sólo pesa 953 kg y una vez lanzado mantiene buenos ritmos, incluso elevados en autopista, sin demasiadas complicaciones.
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Esta mecánica se asocia a un cambio de marchas manual de 5 relaciones con la primera y la segunda bastante cortas y las tres siguientes con un buen escalonamiento, aunque a 120 en autopista gira bastante arriba.
En cuanto al consumo, homologa un gasto combinado de 4,4 l/100 km que, ante una conducción real, se eleva hasta los 6 litros de media. Esto tiene una explicación bien fácil: el coche en sí gasta poco, pero al tener tan poca potencia y ausencia de turbo, hace que en muchos casos debamos hundir más de la cuenta el pedal del acelerador para mantener el ritmo o acelerar con un poco de brío.
No es una mecánica que me haya gustado especialmente por su rendimiento, pero para este coche y para alguien que no quiera gastarse mucho dinero en un vehículo para que le lleve de “A” a “B” es un buen punto de partida.
Comportamiento refinado
El nuevo Picanto ha recibido algunas mejoras en su chasis para mejorar su dinámica de conducción. Se ha reforzado la rigidez torsional y se han instalado barras estabilizadoras un poco más firmes. También se ha aligerado el eje posterior y se ha recalibrado la dirección para ofrecer un poco menos de desmultiplicación.
No esconderé que me ha sorprendido desde el primer momento en que me senté en su asiento y empecé a circular. Ahora el Picanto es mucho más coche que antes. Filtra mejor las irregularidades de la calzada, la nueva dirección aporta un poco más de “feeling”, aunque sigue estando demasiado asistida para mi gusto, y parece como si estuviera más asentado en la carretera.
En entorno urbano es un vehículo muy agradecido de llevar. Es pequeño, ágil entre el denso tráfico de las grandes ciudades y tiene un radio de giro relativamente pequeño que permite callejear con mucha soltura. Tampoco hay que olvidarse de que las opciones de encontrar aparcamiento con un coche de apenas 3,6 metros de longitud aumentan exponencialmente.
En carretera abierta y autopista también ha mejorado su respuesta, pero aquí ya empieza a mostrar pequeñas carencias, empezando por la falta de potencia de su propulsor. Como ya he comentado, una vez alcanzamos la velocidad deseada la mantiene con relativa facilidad, el problema viene a la hora de alcanzarla. Le falta “patada” y si nos atrevemos a adelantar en carretera habrá que planificar bien la maniobra porque vamos a tardar varios segundos en completarla.
El chasis más rígido y el sistema de vectorización del par (incluido dentro del control de tracción) mejoran el comportamiento en carreteras secundarias, pero tampoco es que apruebe con nota. Las suspensiones tiran a blandas, dejan balancear bastante la carrocería y transforman al Picanto en un coche un poco “torpe” al rodar rápido. Cosa para la que no ha sido fabricado. Ni mucho menos.
En resumen: el Kia Picanto es un buen coche para la ciudad y para el día a día. Ha mejorado bastante su tacto y su comportamiento dinámico pero su propulsor no ayuda al conjunto. He tenido la oportunidad de probar el motor 1.0 T-GDI en un Kia Rio y os aseguro que ése sí es el motor ideal para este coche. En su defecto, la opción atmosférica de 84 CV, sólo disponible con el acabado GT-line y hablando sin haberla probado, creo que mejoraría ligeramente la falta de contundencia de éste.
Por menos de 8.000 euros
El Kia Picanto que probamos tiene un precio de partida de 11.630 euros. Se trata del modelo de acceso a la gama, el más económico para que nos entendamos. Un precio que en este momento, a fecha de febrero de 2018, hay que restarle 3.810 euros de descuento promocional. Por lo tanto, éste Picanto con el acabado Concept, con el motor pequeño, el color de carrocería Sparkling Silver que cuesta 350 euros, el paquete Advanced Driving Assistance Pack (asistencia a la frenada de emergencia y panel de instrumentos tipo Supervisión con pantalla LCD de 2,6 pulgadas) que cuesta otros 300 euros más y el Pack Comfort (con retrovisores y manecillas de las puertas del mismo color de la carrocería, retrovisores eléctricos y calefactables y elevalunas traseros eléctricos) tiene un precio final de sólo 8.970 euros. Y tampoco es que venga mal equipado…
Si optamos por no instalar ningún extra, elegimos el color blanco o el azúl, que son los más baratos (150 €), y aplicacamos el descuento, el Picanto puede costar menos de 8.000 euros. En concreto 7.970 euros.
El acabado Concept incluye de serie: tapicería de tela de color negro, volante multifunción, aire acondicionado, asiento del conductor regulable en altura, elevalunas delanteros, sensor de luces, Kit Movilidad, Bluetooth, USB y entrada AUX, airbags delanteros y de cortina, doble airbag frontal y el sistema de control de la presión de los neumáticos, entre otros.
el coche es muy bonito,lo de baratooo......,y por experiencia estas motorizaciones cojitas de 3 cilindros andan con tan solo el olorcito de la gasolina,salen muy economicos,lo malo es el precio,para un coche tan pequeño se hacen caros muy caros,y por encima sin ningun tipo de plan prever,ni tan siquiera por mandar la chatarra vieja a la chatarreria.....ya no quedan autitos para clases humildes ni para pringadillos,solo planes prever para ricos,los cuales te pueden suponer un disgusto cuando te llamen de la ventanilla de Zevillas Montero....si cobrar el regalito de navidad claro.
veremos que nos depara el mercado chines,bueno bonito y balato,ya hay algo pero aun toca esperar un poco mas,y cuelalogico como nos quieren colar los progres....lo malo sigue siendo el bolsillito muy esfarrapadito.