Citroën completa la gama del Citroën Berlingo (presentación en vídeo de este modelo y de su hermano, el Peugeot Partner, en este enlace) con el lanzamiento de una versión ya prevista en el inicio de comercialización pero que no ha llegado hasta ahora. Se trata de la dotada del motor de gasolina de tres cilindros y 1,2 litros turboalimentado de 130 CV combinado con una caja de cambios automática de ocho velocidades.
Este vehículo, de corte familiar, está disponible en versiones corta y larga, con cinco o siete plazas en ambos casos y con el acabado tope de gama Shine así como en la variante "crossover" XTR a un precio desde 27.000 euros que se convierten en 21.000 al financiar con la marca y aplicar los descuentos previstos.
Con este conjunto motor-cambio, el nuevo Berlingo se convierte en un modelo, si cabe, más familiar y enfocado a los viajes gracias al mejor rendimiento del motor y a la suavidad de la caja de cambios. El motor es uno de los 3 cilindros actuales que más nos gusta. Es elástico y tiene una buena respuesta a cualquier régimen. Además, tira del Berlingo, que es uno de los coches más pesados en los que se monta, con notable agilidad apoyado en un cambio de accionamiento suave. El escalonamiento del cambio, con marchas relativamente cortas hasta la sexta (hay ocho disponibles) permite dar vivacidad al motor, que se mantiene en el régimen de par más adecuado la mayoría del tiempo.
Comparado con el motor de 100 CV diésel que probamos recientemente (prueba del Citroën Berlingo HDi 100 CV en este enlace), este motor nos ha gustado más ya que el diésel mostraba sus carencias, sobre todo de potencia, en los repechos fuertes, algo que en este caso no sucede. Es evidente, no obstante, que este gasolina gasta más pero tampoco mucho más.
Esta combinación de motor y cambio es única. El Berlingo no puede comprarse con este motor y caja manual ni existe ninguna otra versión automática de gasolina (en diésel sí y con la misma potencia). El consumo medio es de 7 litros a los 100 km (7,1 en la versión larga, más pesada), consumo del que estuvimos cerca en nuestra toma de contacto, aunque el viento influyó en que no llegáramos a conseguirlo. Y es que el Berlingo, por su gran superficie y su altura, es un vehículo muy sensible al viento lateral.
Esta versión mantiene el buen comportamiento dinámico del resto de variantes de este modelo que está basado en la plataforma intermedia del Grupo PSA, la misma EMP2 que utilizan, por ejemplo, los SUV Peugeot 3008 (primera prueba en vídeo de este modelo en este enlace) y Citroën C5 Aircross (primera prueba en vídeo de este modelo en este enlace). La suspensión, que tira a firme, contiene bien el balanceo de la carrocería y, aunque en autopista no es tan confortable como una berlina o un SUV se agradece esa mayor firmeza, sobre todo en carreteras de montaña donde aguanta el tipo con solvencia.
Por lo demás, este coche mantiene las mismas características del resto de versiones. Está disponible en dos carrocerías, corta y larga de, respectivamente, 4,40 y 4,75 metros de longitud. El salpicadero, bien terminado, aunque con plástico duros, tiene numerosos huecos para objetos como, por ejemplo, una doble guantera frente al pasajero, otra muy profunda entre los asientos y unas bandejas en el techo. Las versiones de cinco plazas añaden un mueble de techo portaobjetos opcional y una bandeja rígida de maletero que puede situarse a varias alturas (en la galería de imágenes pueden verse todos estos espacios portaobjetos).
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La gran diferencia de esta versión respecto al resto de Berlingo está en el mando circular que sirve para accionar el cambio. La pantalla multifunción, situada en la parte alta del salpicadero es de serie en este acabado Shine y no incluye los mandos de la climatización.
Las plazas traseras, a las que se accede por las puertas laterales correderas, son individuales y los tres asientos puede plegarse de manera individual. Esta fila dispone de bandejas tipo avión, cortinillas parasol y huecos para objetos debajo del piso.
La tercera fila, opcional tanto en la versión corta como en la larga, ofrece dos asientos que pueden plegarse o sacarse del coche. El acceso es fácil y en la versión larga son perfectamente aprovechables para pasajeros adultos ya que, además, son deslizantes en 13 cm. El maletero tiene una capacidad de 65, 775 y 1.413 litros en la versión corta M con 7, 5 y 2 plazas ocupadas. En la versión larga XL, las capacidades son de 322, 1.050 y 1.672 litros que llegan a 3.500 en configuración de dos plazas y cargado hasta el techo.
Yo tengo Citroen me gusta el berlingo pero en 3 cilindros no me gustan esos motores