Comparativo SUV 7 Plazas: ¿Cuál es el mejor familiar?

Os ofrecemos un comparativo de SUVs familiares, grandes, con un tamaño en torno a 4,70-4,80 metros de longitud, con un interior funcional y además, con 7 plazas. Enfrentamos al nuevo Kia Sorento contra su primo-hermano Hyundai Santa Fe, la nueva generación del Peugeot 5008 y el también cambiado Skoda Kodiaq.

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Todos ellos son SUVs de 7 plazas, con motores de gasolina con un mayor o menor grado de hibridación y con una habitabilidad digna de un monovolúmen. Son todocaminos válidos para todo, con buena capacidad de carga, con motores sostenibles y potencias considerables

Esto es especialmente destacable en dos de ellos, el Hyundai Santa Fe y Kia Sorento, que tienen más de 200 CV en las versiones que nos han prestado.Los dos también coinciden en ser SUVs con un aspecto muy americanizado, de gran tamaño, con un aspecto imponente y solido a primer golpe de vista.

El Kia Sorento acaba de recibir un lavado de cara sobre la base de su cuarta generación, que ha consistido básicamente en la introducción de unos nuevos faros verticales, unas nuevas ópticas y un rediseño de los paragolpes.

El que ha cambiado considerablemente es el Hyundai Santa Fe que ofrece un diseño que rompe con lo conocido hasta ahora a base de unas unas líneas muy rectas, con formas cúbicas, con un frontal y una luneta trasera muy verticales, y una nueva firma lumínica en forma de H que lo hace inconfundible.

Sus rivales, el Peugeot 5008 y el Skoda Kodiaq, estrenan generación. El Peugeot mantiene el lenguaje de diseño del nuevo 3008, con la típica parrilla con tres garras. Incluye nuevos diseños de llantas, unas nuevas líneas de carácter en el lateral y cambia la trasera, sobre todo en el diseño de los pilotos.

El Skoda Kodiaq mantiene la discreta estética de siempre, pero con cambios en su diseño como la nueva parrilla, las ópticas con iluminación matricial, unos pasos de rueda más cuadrados y unas llantas con un diseño aerodinámico para algunos discutible. También cambia el diseño del pilar C, con una nueva moldura que le da un aspecto más moderno.

Los cuatro miden unos 4,80 metros de longitud. El más pequeño en dimensiones es el Kodiaq, y el más grande el Santa Fe. Curiosamente, el que está a medio camino, el Peugeot 5008, es el que tiene la mejor batalla, de casi tres metros de longitud.

El salpicadero del Hyundai Santa Fe es de líneas muy horizontales, a juego con la carrocería, y con una gran pantalla curva, bueno, dos en realidad dos pantallas de 12,3 pulgadas unidas en una sola. Todo con un aspecto muy limpio y minimalista, como se lleva ahora.

La sensación es de muy buenos acabados y de un diseño muy moderno. Hyundai ha dado un paso adelante en esta nueva generación del Santa Fe, porque sus rivales no lo ponen fácil. Destacaría, como elementos diferenciales, la palanca del cambio detrás del volante, esta consola central limpia de elementos, eso sí, con los mandos del climatizador físicos, cargador doble de teléfono, una bandeja inferior, difícil de acceder y una doble guantera para el acompañante. El diseño es original, se utilizan materiales de calidad y se ve en genera una buena terminación.

En el Kia Sorento encontramos un diseño muy parecido al del Santa Fe, con líneas horizontales, pero quizás no tan atrevido, ya que debe ir en concordancia con el exterior, y este coche tiene las formas más redondeadas. Pero no falta la doble pantalla digital detrás del volante.

En el Kia se percibe un diseño algo más clásico, básicamente porque la consola central no se ve tan limpia de elementos, ya que, por ejemplo, el mando selector de marchas tiene forma de dial, no está en el volante, como sí mantienen sus rivales. La pantalla es la misma que la del Santa Fe, curvada, aunque en este coche el climatizador se maneja de forma mixta. Es decir, de forma táctil y física, con unas ruletas para subir o bajar la temperatura. En el Kia Sorento también encontramos muy buenas terminaciones, a pesar de que el cuero es sintético y algunos materiales son reciclados.

En Peugeot 5008 se mantiene el ya conocido i-cockpit, pero reinventado, con una gran pantalla en posición superior, de 21 pulgadas, y curva, un poco al estilo de sus rivales. El aspecto, como ya es tradicional en Peugeot, es muy vanguardista. Sobre todo porque aquí también se recurre a una segunda pantalla táctil para el manejo de algunas funciones. Ofrece 10 botones, que podemos personalizar para acceder a esas funciones según nuestras preferencias.

En este coche resulta curioso el diseño de la consola central, muy elevada, con el cargador inalámbrico y unas formas muy vanguardistas, que marcan un claro espacio diferenciado entre conductor y pasajero. Es un diseño que, o gusta mucho o no gusta nada, no hay término medio. Pero hay que reconocer que es original.

El salpicadero del nuevo Skoda Kodiaq es el único que recurre a una doble pantalla separada, una para el cuadro de instrumentos y otra, muy grande de 12,9 pulgadas, para el sistema de infoentretenimiento. Es quizás el salpicadero de aspecto más clásico de este comparativo, pero no por ello menos funcional, al contrario. Se utilizan diales para el climatizador, con pantalla digital en su parte central.

El kodiaq, como algunos de su rivales, ha optado por colocar la palanca selectora de marchas detrás del volante. Así, hay espacio en la consola para un cargador doble de teléfono. La calidad de acabados y materiales es buena, aunque se ve bastante plástico a la vista, de buen aspecto, eso sí. Debería mejorar en la fijación de los laterales de la consola.

En el Hyundai Santa Fe la segunda fila de asientos es muy amplia, con mucho espacio para las piernas y una anchura que admite que tres personas viajen con un mínimo de confort. Los respaldos pueden ajustarse en inclinación para mayor comodidad. En estas filas se echa en falta un mando para controlar la climatización, pero sí hay puertos USB y un curioso pulsador para poder controlar desde las plazas traseras la posición del asiento del pasajero y conductor. La plaza central es cómoda, no hay túnel de transmisión.

A la tercera fila del Santa Fe se accede mediante el plegado automático de la segunda, que es corredera. El hueco de entrada no es muy grande, pero una vez dentro, el espacio sí lo es. Aquí es donde se notan las formas cúbicas del coche y cabe decir que las dos plazas de la tercera fila, por espacio para las piernas y, sobre todo, por altura de banqueta y por altura al techo son bastante justas. Curiosamente, en esta tercera fila hay diales para controlar la climatización, y tienen tomas USB.

En el Kia Sorento los asientos de la segunda fila también son calefactados, tienen la banqueta regulable en extensión y en inclinación de respaldo. Es una segunda fila prácticamente igual a la del Santa Fe, con dos salidas de aireación regulables, tomas USB y una toma de mechero, como equipamiento principal. En la tercera fila, con un acceso similar, se dispone también de salidas de aire y panel de control del climatizador, además de puertos USB-C. Pero en el Sorento la altura al techo es inferior, por lo que personas altas lo tendrán más difícil para acomodarse en esta fila accesoria.

El Peugeot 5008 cuenta en su segunda fila con una banqueta corredera y un respaldo reclinable en 5 posiciones, y aunque el espacio al techo es algo justo debido a la intrusión de los pilares laterales. Las tres plazas de esa segunda fila están muy marcadas, y son cómodas. Equipa cortínillas para las ventanas y un sistema de control de la climatización.

La tercera fila se activa con el sistema Easy Access, que permite reclinar hacia delante y elevar los asientos de la segunda fila. El espacio para dos adultos es correcto, especialmente en altura y en distancia de hombro a hombro. Además, se han añadido elementos de confort como la luz de lectura, reposabrazos, toma de 12 V y posavasos.

En el Skoda Kodiaq encontramos en la segunda fila mucho espacio libre para la cabeza, los hombros y las piernas, de lo mejor del comparativo. Esto último dependerá de cómo regulemos la banqueta, que sigue montada sobre unos raíles que permiten un generoso desplazamiento longitudinal. El pasajero central viaja más incómodo que en sus competidores, ya que hay un túnel de transmisión que molesta. Equipa salidas de aireación, controles de calefacción, tomas USB y mechero, además de cortinillas como el resto de rivales.

En esta generación del Kodiaq se ha ganado espacio al techo en la tercera fila. Aún así, sus asientos van destinados principalmente a llevar niños o personas adultas de corta estatura. La entrada a esta tercera fila es la peor del comparativo, y el espacio es también inferior, debido a que el Kodiaq también es el SUV más compacto de este comparativo.

Estos SUV de 7 plazas ofrecen un espacio de carga muy pequeño cuando tienen la tercera fila operativa. La única excepción es el Skoda Kodiaq, que con 340 litros de capacidad se desmarca de sus rivales. Le sigue el Peugeot 5008, 259 litros, Kia Sorento, 175 y Hyundai Santa Fe, 130.

El Skoda Kodiaq es el que mejor maletero ofrece en cualquiera de sus posiciones de banqueta. Con la segunda fila operativa, 845 litros, y con todo abatido, 2035 litros.

El maletero del Kia Sorento es el segundo mejor de este comparativo: 809 litros con la segunda fila operativa y 1988 de capacidad total.

El del Peugeot le sigue de cerca con 748 litros con la segunda fila activada y 1815 con todo abatido.

Y el Hyundai Santa Fe, por su lado, ofrece 628 litros con los respaldos de la segunda fila arriba y 1949 litros, nada mal, de capacidad de carga máxima.

Para este comparativo nos han prestado unidades con diferentes tipos de motores. Todos son gasolina, pero dos de ellos son microhíbridos, el Skoda y el Peugeot; uno es híbrido convencional, el Hyundai Santa Fe, y otro es híbrido enchufable, el Kia Sorento.

El que menos potencia tiene es el Peugeot 5008, 136 CV. El Skoda le sigue de cerca, con 150; y tanto el Hyundai Santa Fe como el Kia Sorento se desmarcan, con 215 y 252 CV respectívamente. Son tecnologías y potencias muy diferentes, que nos van a servir para comprobar cómo afectan a la dinámica y el comportamiento en carretera.

Para el peso y dimensiones del Hyundai Santa Fe, la versión hibrida enchufable con 253 cv se nos antoja más adecuada. Si bien la respuesta es más que correcta, en determinadas circunstancias, unos caballitos mas no le vendrían mal. Con todo, ésta versión hibrida alcanza los 180 km/h y realiza los 0-100 km/h en 9,8 segundos.

Y es que el Santa Fe es para disfrutarlo para viajar por vías rápidas y amplias. Es comodísimo aunque la suspensión es algo blanda, incluso para algunos tramos de autopistas. En zonas mas viradas el balanceo de la carrocería es notable, pero un tacto de dirección preciso y la tracción total, permiten conducirlo a gusto también en esas zonas.

El cambio del Peugeot 5008 le permite circular con mas comodidad que al Santa Fe y al Sorento cuando las curvas muy lentas se suceden. En relación a sus rivales de hoy, ser el menos potente de los cuatro le pasa factura cuando necesitemos la máxima potencia, pero ofrece una respuesta de motor bastante constante que le permite ser eficaz en la mayoría de circunstancias.

El francés no ofrece el mismo confort en autopista que los dos coreanos, pero es un coche con el que se viaja con comodidad gracias a una suspensión confortable, pero con la firmeza suficiente para permitirle desenvolverse bastante bien en carretera.

El Skoda Kodiaq, para la potencia que ofrece, acelera con decisión y emplea 9,9 segundos en realizar los 0 a 100 km/h. La respuesta es bastante plana y eso hace que de la sensación de que empuja menos de lo que en realidad hace. De los cuatro, es en el que mas se nota el cambio de modo Normal a modo Sport, en cuanto a repuesta al acelerador y dureza de dirección y suspensión.

A pesar de ser un 7 plazas y tener unas dimensiones considerables, gracias a una suspensión firme en modo Sport, a una dirección bastante directa, y a su cambio de siete marchas –sin duda el mejor del comparativo tanto en automatico como en modo manual con las levas-, el Kodiaq es el que mejor se adapta este tipo de terreno, sin apenas penalizar en confort.

El Kia Sorento es el mas potente del comparativo y aprovecha la parte eléctrica para ofrece una buena respuesta al acelerador, especialmente a bajas vueltas. Es el mas rápido en el 0-100 km/ con 8,8 segundos y tiene una autonomía eléctrica de 55 km.

Con su cambio en modo Sport se comporta de una forma bastante dinámica. Si bien en modo Normal con las levas variaremos la intensidad de la frenada regenerativa, en modo Sport podremos cambiar de marcha cuando lo deseemos y eso permite que la dinámica del Sorento mejore en zonas viradas, lo mismo que ocurre con el Santa Fe.

Pero no nos confundamos, no es un coche ideal para carretera de montaña. Pesa mucho, es muy grande y la suspensión es blanda. Sus cualidades las encontraremos en el confort de marcha por vías rápidas, en un buen tacto general y en una potencia suficiente para desenvolverse bien en toda circunstancia.

A lo largo de la prueba el que menos gastó de los cuatro fue el Skoda Kodiaq, que registró 7,3 litros a los 100 kms. Le sigue el Kia Sorento, que marcó 8,3. En este caso, tened en cuenta que, a pesar de ser un híbrido enchufable, hicimos el recorrido con la batería completamente agotada. Y finalmente, tanto el Peugeot 5008 como el Hyundai Santa Fe, gastaron una media de 8,8 litros a los 100.

Tomad estos resultados como una referencia en el caso de utilizar el coche en carretera, principalmente vías rápidas y carreteras de montaña, donde discurrió nuestra prueba.

Y acabamos hablando de precios. El Peugeot 5008, tal y como os lo hemos mostrado en este comparativo, con motor de gasolina microhíbrido de 136 CV, cuesta 41.710 euros.

El Skoda Kodiaq, con una configuración mecánica similar, pero con 150 CV, en acabado Design, vale 47.270 euros de tarifa.

El Hyundai Santa Fe, en esta versión híbrida con 215 CV, con tracción integral y cambio automático, en acabado Callygraphy, tope de gama, tiene un precio de 62.870 euros.

Y el Kia Sorento, con su tecnología híbrida enchufable, es lógicamente el más caro. En la versión probada, con acabado Emotion y Pack Premium, tiene un PVP de 64.420 euros.

Son precios que también nos permiten hacernos una idea de los costes que tiene la tecnología, que hace variar considerablemente el precio en vehículos que ofrecen a rasgos generales lo mismo en cuanto a espacio y funcionalidad.