El CUPRA Formentor VZ5 es un ejemplo de la madurez de la marca española. Una versión de altas prestaciones de su modelo estrella que llega para demostrar que los récords están para batirlos. Con su motor 5 cilindros turbo de 390 CV llega para competir de tú a tú con Audi RS3, Audi RSQ3, Mercedes-AMG A 45 S y GLA 45.
Lo probamos tanto en carretera como en circuito y además descubrimos los secretos de su modo Drift. Si el CUPRA Formentor VZ 310 ya era una pasada, esta versión VZ5 va todavía más allá. Un coche concebido para hacer disfrutar a su conductor.
El CUPRA Formentor VZ5 estará a la venta en España a finales de 2021. Todavía no se han comunicado los precios. Lo que sí sabemos es que sólo se van a comercializar 7.000 unidades. Así que, si quieres uno date prisa.
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Inserciones de carbono
El VZ5 es el CUPRA más especial jamás creado. Un modelo halo concebido principalmente para impulsar todavía más la imagen de la marca hacia la deportividad y la exclusividad. Lo que distingue al VZ5 del resto de Formentor es un kit de carrocería específico con inserciones de carbono carbono, del de verdad de la buena. Está disponible en 4 colores: negro Midnight Black, gris Tech Grey, beige Taiga Grey y azul mate Petrol Blue.
En el frontal presenta un parachoques con una parte inferior distinta, así como las citadas inserciones de carbono brillante en el splitter. No es carbono expuesto, pero el carbono sí que está expuesto a los posibles golpes. Habrá que tener cuidado a la hora de aparcar.
Las protecciones que envuelven los pasos de rueda son más anchas y de color negro mate, en lugar de gris brillante como en los otros Formentor. Con esta vista se puede apreciar la caída negativa que tienen las ruedas. La parte superior de la rueda se mete más dentro del paso de rueda, mientras que la inferior está más hacia el exterior. Con ello se consigue una mejor estabilidad, una solución derivada de la competición.
Las llantas de 20” son específicas y monta en ambos ejes neumáticos Goodyear Eagle F1 con medidas 255/35-20. A diferencia del Audi RS3 anterior que montaba neumáticos más anchos en el eje delantero, aquí los 4 tienen la misma medida. Tal y como me contó Jordi Gené, precisamente esta configuración distinta de neumáticos dio bastantes quebraderos de cabeza a los ingenieros de CUPRA durante el desarrollo del coche.
A través de los radios en color cobre de las llantas se puede apreciar el potente equipo de frenos Akebono, distinto al Brembo de los VZ 310. En el eje delantero monta pinzas de 6 pistones con discos de 375 mm. Detrás los discos son 310 mm.
Además del difusor de carbono, el elemento de diseño que más lo distingue de los otros Formentor son las dos salidas dobles de escape en color cobre dispuestas en forma diagonal. El color cobre es una de las señas de identidad de CUPRA.
Asientos deportivos tipo bucket
Los cambios dentro también sólo los distingue el ojo más experto. El más destacado son los asientos Cup Bucket. Un semi bucket deportivo con la parte posterior de carbono al estilo del que monta el Stelvio Quadrifoglio.
Un asiento deportivo pero cómodo. Tanto el respaldo como la base del mismo sujetan muchísimo. Eso sí, al mismo tiempo ofrece un agradable mullido, con lo que no se hace molesto.
A través del botón “CUPRA” que hay en el volante podemos seleccionar los distintos modos de conducción. Con el botón que hay en el túnel central podemos desactivar por completo el control de estabilidad.
Se echa en falta unas levas más grandes detrás del volante. Es una lástima que se recurra a unas levas de plástico de un tamaño tan pequeño. Este coche es una serie limitada y podría haber contado con unas de metal de mayor tamaño y ya puestos fijas a la piña de dirección.
Tanto el cuadro de instrumentos, como la pantalla táctil del centro del salpicadero son las mismas que puedes encontrar en el resto de Formentor. La principal novedad es el grafismo que aparece cuando seleccionas el modo manual del cambio, en la pantalla aparecen unas luces de color verde, amarillo y rojo que indican el momento óptimo para subir a la siguiente marcha.
Casi 400 CV de potencia
El motor de es la piedra angular del VZ5. Precisamente esta versión se llama VZ5 por el motor que monta. El “5” corresponde a los 5 cilindros de su mecánica de origen Audi. El mismo propulsor que usan Audi RS3, RSQ3 o TT-RS. Un motor histórico dentro de la marca de los cuatro aros. Un 5 cilindros en línea turbo con 2,5 litros de cilindrada que sobre el papel declara 390 CV de 5.700 a 7.000 rpm y 480 Nm de par máximo de 2.200 a 5.700 rpm.
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Este propulsor ofrece un empuje sensacional desde la parte baja del cuenta vueltas. Precisamente esta es una de sus grandes cualidades, la buena respuesta desde abajo que sigue sin parar hasta llegar al corte de inyección.
Pero es que este motor aporta algo más. Una musicalidad embriagadora. El sonido característico del 5 cilindros en línea es una auténtica delicia. Una banda sonora que amplifica al máximo la experiencia de conducción.
Suena muy bien, pero para mi gusto suena poco. Con un escape algo más “libre” ofrecería todavía más musicalidad en aspiración y ya puestos algún petardeo en las retenciones. Nada que no se pueda arreglar con una línea de escape aftermarket.
0 a 100 km/h en 4,2 segundos
El Formentor VZ5 cuenta de serie con sistema Launch Control que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos. Su sistema de tracción integral también es clave a la hora de lograr este registro frente al cronómetro.
Lo que se queda algo “corto” es la velocidad punta. Tanto por la potencia del motor, como por la relación del cambio, es más que seguro que el límite esté mucho más alto. CUPRA ha decidido limitarlo a 250 km/h. Seguro que ABT comercializará un sistema para deslimitarlo y así ver hasta donde llega.
El chasis del VZ5 es sorprendente. Al ir más bajo que un VZ 310 tienes la sensación que vas al volante de un León. Las caídas negativas aportan una estabilidad en curva de otro planeta.
Los neumáticos Goodyear Eagle F1 brindan también un nivel de agarre espectacular. Lo mejor de estas gomas es que te comunican muy bien el punto de grip que tienes en cada momento y así sientes mejor cuando empezará a deslizar cuando lo fuerzas al máximo en curva.
También frena muy bien. Cuenta con un equipo de frenos más potente que el Brembo que usan los VZ 310. El VZ5 recurre a unos Akebono con discos de 375 mm de diámetro y pinzas de 6 pistones delante. Detrás los discos son de 310 mm.
Ofrece un nivel de agilidad que no esperas encontrar en un SUV. En numerosos aspectos recuerda bastante al Alfa Romeo Stelvio Quadrifoglio. Una auténtica referencia entre los SUV deportivos.
También tuve la ocasión de probarlo en circuito. Es super noble, se agarra muchísimo y cuando empieza a hacer un desplazamiento lateral lo hace con gran nobleza y transparencia. Sin brusquedades, sin violencia. De forma natural y comunicativa.
El eje trasero cuenta con un diferencial de deslizamiento limitado con gestión electrónica que reparte el par entre las ruedas traseras. CUPRA ha bautizado este diferencial como Torque Splitter. Va en el eje trasero y cuenta con dos embragues pequeños que permiten llegar a entregar casi todo el par del motor a única rueda del eje posterior.
Modo Drift
Me quedé con ganas de más circuito así que era hora de continuar con la siguiente experiencia. Precisamente en el circuito escuela del Fast Parcmotor pude probar la otra gran novedad del VZ5, el modo Drift. Fue un placer contar con los consejos del equipo técnico dirigido por David Bosch. Ya lo dice el refrán: “nunca te acostarás sin saber una cosa más”.
Cuesta bastante hacerse con este modo. No ofrece la naturalidad que sí ofrece cuando desactivas todos los controles por completo. Aquí el coche busca trasladar el máximo par a la rueda exterior trasera y si bien busca derrapar de una forma más fácil, termina haciéndolo de una forma más complicada.
En resumidas cuentas
El CUPRA Formentor VZ5 es justo lo que esperaba. Un aparato serio de verdad. Un auténtico deportivo camuflado de SUV. Un coche con una puesta a punto de chasis impecable y con un motor para enmarcar.
Una auténtica maravilla para 7000 afortunados.