Fiat Fullback Cross: prueba a fondo en Marruecos
PRUEBAS

Fiat Fullback Cross: prueba a fondo en Marruecos

Joan Dalmau

Joan Dalmau

10 opiniones

Fiat Professional, la división de vehículos comerciales de Fiat está ya presente en el segmento de los pick-up. El Fullback dispone de un motor turbodiésel de origen Mitsubishi de 2,4 litros y 180 CV y la versión Cross, caracterizada por su completo equipamiento, se vende a un precio, matriculado como turismo, de 36.484 euros, cifra competitiva en relación a su competencia directa. El coche lo fabrica Mitsubishi en la misma línea que el L200 con el que comparte chasis, mecánica y parte del diseño.

El Fiat Fullback es un clon del Mitsubishi L200 como el Mercedes Clase X lo es del Nissan Navara. Los pick-up son vehículos muy específicos cuyo chasis no puede aprovecharse para ningún otro modelo y, por lo tanto, su proceso de desarrollo es muy costoso. Además, estos modelos tienen unas ventas limitadas ya que se dirigen a un público muy específico y poco numeroso, de ahí que resulte mejor, como ha hecho Fiat, acordar con un fabricante como Mitsubishi que le fabrique unidades contribuyendo a pagar la factura del desarrollo que meterse a desarrollar un coche así por si mismo.

Fiat ha intentado dar un aire de familia al Fullback que tiene un cierto parecido con el Tipo. Respecto al Mitsubishi, cambian el frontal, con una parrilla muy Fiat y los parachoques ya que tanto los faros como los antiniebla son los mismos. En la trasera no hay más cambios que los logotipos

Esta versión Cross es, no obstante, algo especial y no tiene parangón en la gama Mitsubishi. El color de la carrocería, un curioso gris mate llamado Motocross Special es exclusivo y lleva de serie la barra de la caja trasera que puede soportar hasta 40 kilos de peso (la barra ya que en la caja se puede cargar hasta una tonelada) y que está pensada para apoyar elementos como las tablas de surf.

También son de serie en esta versión la parrilla y los retrovisores acabados en negro y los tiradores de puertas, los pasos de rueda y las llantas de 17 pulgadas en negro mate. Otro elemento de serie son las estriberas laterales, muy útiles para acceder a bordo para los niños y las personas de talla baja pero que, por el contrario, entorpecen las maniobras fuera de carretera ya que reducen el ángulo ventral.

El equipamiento de serie de este modelo Cross es muy completo. El salpicadero, idéntico al del L200 y con su misma calidad de acabado, integra un equipo de audio con navegador y cámara de visión trasera con líneas de ayuda al estacionamiento. Los asientos están tapizados en cuero, con el del conductor con accionamiento eléctrico y los delanteros son calefactados. Además, lleva climatizador, faros bixenón, aviso de cambio de carril, y faros y limpias automáticos. ¿Precio de todo ello? 36.484 euros.

Las plazas traseras son bastante confortables. Los pick-up suelen tener una banqueta trasera muy vertical, lo que no es el caso y además, en este modelo, la banqueta es ancha y con espacio para tres pasajeros. La distancia entre filas es también generosa, hasta el punto que la sensación en el habitáculo es de disfrutar de un espacio notable.

Por lo que respecta al acabado y ajuste de todos los elementos es también destacable, con una buena impresión al tacto. Los tiempos en que los pick-ups eran vehículos con habitáculos austeros ha pasado a mejor vida y este Fullback no tiene nada que envidiar a un todoterreno grande ni en equipamiento ni en calidad percibida.

En un pick-up, la caja de carga es importante. La del Fullback mide 1,40 metros de longitud por 1,05 de ancho y 41 cm de alto y en el caso de nuestra unidad, llevaba un recubrimiento plástico que es opcional como también lo son los accesorios propuestos por Mopar, el accesorista oficial de la marca, entre ellos un hard-top para elevar la altura del espacio de carga hasta la de la cabina o diferentes soluciones para cubrir la caja ya sea mediante una tapa rígida o de persiana.

Nos fuimos a Marruecos

Probamos el Fullback en la expedición de este año del Desierto de los Niños, una ONG que lleva material escolar a la zona de Erfoud, en el Sur de Marruecos y que construye guarderías en los pueblos de la zona. Este año, Hyundai, patrocinador del evento, donó más de 20.000 euros recogidos en una campaña de pruebas de sus coches en la red de la marca para construir una guardería en la localidad de Fezzou. A esta expedición se suman asimismo representantes de la fundación Alain Afflelou, que gradúan la vista de más de 1.000 personas, niños y adultos, de la zona y, en caso de necesidad, les fabrican en España unas gafas que se envían al cabo de unas semanas.

Utilizamos el Fullback para añadirnos a la expedición y circulamos durante más de 3.000 kilómetros por Marruecos, un país con una red de carreteras en plena expansión y, sobre todo, que ofrece múltiples posibilidades para circular fuera de carretera. El Fullback, como buen pick-up 4x4 es perfecto para este tipo de entornos.

Suscríbete a la newsletter

Suscríbete a la newsletter

Si quieres estar al día de nuestras noticias, tienes que tener una cuenta en coches.net.

Dispone de un motor Mitsubishi de 2,4 litros de cilindrada, diésel, por supuesto, con 181 CV de potencia y una notable cifra de par (430 Nm). Es un motor bastante ruidoso, que vibra al ralentí pero que se adapta bien al uso de un pick-up. Tiene par a raudales, sobre todo desde 2.000 vueltas hacia arriba y consume menos de lo esperado. El consumo homologado por Fiat es de 7,1 litros a los 100 y yo, en carretera en Marruecos, conseguí una media de 7,6 conduciendo de manera suave, en marchas largas y usando la inercia en sexta.

En autopista, debéis contar entre 9 y 10 a 120 por hora dependiendo de la orografía y en off-road, con reductora insertada, se irá fácilmente a 14 litros. Todo eso sin carga, por supuesto ya que no hay que olvidar que el Fullback es capaz de cargar una tonelada de peso en la caja y arrastrar remolques de hasta 3.100 kilos.

El coche tiene un sistema de tracción integral con cuatro posiciones: dos ruedas motrices (las traseras), 4x4 automático, 4x4 con reductora y 4x4 con bloqueo del diferencial central al que hay que añadir un bloqueo trasero opcional. La altura libre al suelo es de 20,5 cm y tiene unos buenos ángulos de ataque: 30 grados y de salida, 22, no así el central, penalizado por sus tres metros de batalla y las estriberas que monta. 3 metros de batalla para 5,28 de largo y sólo 1,78 de ancho.

En carretera va francamente bien. La dirección es correcta y la suspensión delantera es bastante firme. La trasera, de eje rígido con ballestas, rebota, como casi todos los pick-ups ya que solo el Nissan Navara y asociados (Mercedes X y Renault Alaskan, cuando llegue), llevan muelles detrás.

En pista es donde más se disfruta del Fullback. Los rebotes del eje trasero siguen, por supuesto, pero no afectan a la direccionalidad ni a la estabilidad del coche, que puede circular más deprisa que otros vehículos –los SUV, por supuesto- en las amplias hamadas marroquís. La libertad que uno experimenta circulando, casi sin rumbo, por estas llanuras, admirando el paisaje y abriendo camino en un lugar donde hay miles y no hay ninguno, es difícil de describir y coches como este permiten disfrutarlo. Cabe destacar que el sistema de aviso de cambio de carril funciona incluso aquí ya que a mí me avisó de que me apartaba de las roderas!!!. Tremendo.

En las pistas más rotas hay que circular más despacio ya que la suspensión copia en exceso los baches. Hay que tener en cuenta que este vehículo está pensado para transportar mucho peso y que, por lo tanto, en vacío, las suspensiones traseras se muestran muy duras. El motor ofrece un buen rendimiento y la caja de cambios de seis marchas está bien escalonada y resulta muy precisa. En maniobras de franqueo va francamente bien ya que tiene reductora y dos bloqueos lo que hace que sea muy difícil que no consiga pasar por sitios en los que físicamente quepa.

Pero si hay un escenario en el que un todoterreno demuestra de qué es capaz, este son las dunas. Para circular por ellas hay que deshinchar ruedas, desconectar el control de estabilidad ya que, si no el coche se frena, desconectar el start-stop, ya que tiene la mala costumbre de parar el motor antes de que el Fullback esté completamente detenido y eso en las dunas puede ser una faena o, simplemente, conectar la reductora y el bloqueo central.

No sé deciros si es mejor ir en segunda larga o en tercera corta por las dunas, pero lo que sí está claro es que, con reductora o sin ella, el Fullback se muestra casi imparable en arena. Para que fuera perfecto necesitaría algo más de bajos en el motor, que obliga, en cortas, a meter alguna segunda para acometer subidas importantes y el coche se frena en exceso en el cambio.

En cualquier caso, conducirlo en el Erg Chebbi o en las dunas de Erfourd es una gran experiencia. Sube con facilidad y, con el motor por encima de 2.500 vueltas, es imparable. Además, en las dunas, su principal inconveniente, que es el ángulo ventral, desaparece ya que no pasa absolutamente nada si rozamos las estriberas o los bajos en una cresta. Que se sepa, la arena no ha hecho daño a nadie salvo si nos pasamos de optimistas y clavamos el morro en alguna caída excesiva.

Pros y contras

Pros

  • Aptitudes todoterreno
  • Equipamiento de serie
  • Calidad de acabados
  • Plazas traseras amplias

Contras

  • Rebotes del eje trasero
  • Pocos bajos en el motor para off-road
  • Caja de carga pequeña
  • Embrague muy duro

Galería de fotos de Fiat Fullback Cross: prueba a fondo en Marruecos

Opiniones de Fiat Fullback Cross: prueba a fondo en Marruecos

Forma parte de nuestra comunidad

Forma parte de nuestra comunidad

Si te ha gustado nuestro artículo y quieres dejar tu opinión, tienes que tener una cuenta en coches.net.

Anónimo

Este comentario ha sido eliminado.

Reinius
Reinius

También la imagen de Mitsubishi tiene más expansión que Fiat y sus cochecitos. Por cierto, Fiat también copió al Mazda MX5, (el roadster más vendido de la historia) para crear su 124 Spyder. Me equivoco querido y apreciado Joan ??

Reinius
Reinius

Rectificación. El motor del Fullback es de Mitsu y el japonés no le da mil vueltas al Fiat aunque seguro que a nivel global las ventas del Mitsubishi L200 son muy pero que muy superiores a su clon italiano. Por cierto, algún día Fiat debería actualizar sus Panda, 500 y Punto y contar con una berlina estilo Mazda6.

Anónimo
| 1 respuesta

Este comentario ha sido eliminado.

Reinius
Reinius

Exactamente el mismo diésel que el del L200, made in Mitsubishi.

Eduardo Ibañez Valle

Un gran artículo. Me parece un video en el que se describe el coche de una forma muy profesional. Gran periodismo de motor. Felicidades por el trabajo bien hecho.

Reinius
Reinius
| 3 respuestas

No deja de ser una copia italiana del gran Mitsubishi LS 200. Eso sí, el japonés le da mil vueltas.

Joan Dalmau
Joan Dalmau

Sinceramente, el japonés no le da mil vueltas ya que son coches completamente idénticos salvo por los detalles estéticos que comentamos en el video. Este tipo de remarcados se da en la industria cuando una marca quiere entrar en un segmento determinado sin meterse en grandes inversiones. Entonces, llega a un acuerdo con otro fabricante y le compra unidades mínimamente modificadas. Este es el caso del Fullback, un coche idéntico al L200 y, por lo tanto, con sus mismas características y sus mismas virtudes. Saludos.

luis gonzalez

Vaya lucida

Reinius
Reinius

Los motores del Fiat Fullback son los mismos que los que monta el L200 ???. Un abrazo Joan.