Casi 50 años de evolución en minuto y medio
Todos conocemos a Range Rover como submarca de lujo de Land Rover, representada en la actualidad por el Range Rover Evoque -ahora también acompañado del Evoque Convertible con capota de lona-, el Range Rover Sport y el propio Range Rover. Pero de no haber sido por enorme éxito de ventas del modelo original, con 1,7 millones de unidades entregadas, la historia tal vez hubiese sido muy distinta.
En cualquier caso, el Range Rover nació para convertirse en el “buque insignia” de Land Rover, marca dedicada hasta entonces a fabricar todoterrenos puros y que, con este modelo, iba a estrenarse en la categoría de automóvil que hoy conocemos como SUV.
Los primeros 26 prototipos desarrollados por Rover desde 1967 hasta 1969 bajo la denominación Velar dieron lugar al modelo definitivo, que salió al mercado en 1970. Como curiosidad, el primer Range Rover sólo contaba con dos puertas laterales, y hasta 1981 no llegó la primera carrocería de cuatro puertas.
Por supuesto, el Range Rover original equipaba tracción permanente 4x4. Más adelante fueron llegando el cambio automático, los frenos ABS, el control de tracción, las suspensiones neumáticas y, ya en la generación actual, la carrocería de aluminio. El Range Rover se ha convertido en escaparate tecnológico de Land Rover, destacando en igual medida por la exquisitez de sus acabados. E incluso se permite, pese a su orientación aventurera, algún guiño a la deportividad: no será ningún campeón de los circuitos, pero aun así, el nuevo Range Rover Autobiography Dynamic se permite el lujo de montar un motor V8 5.0 de 550 CV con el que marca un “0 a 100” en sólo 5,4 segundos.
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Repasar la historia del Range Rover daría para un libro, por lo que -hasta que nos decidamos a publicarlo- mejor os invitamos a la infografía en vídeo publicada por la marca (y que encontraréis al principio de este artículo), en la que apenas 85 segundos bastan para hacernos una idea sobre la evolución del SUV británico por excelencia.
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