Hyundai i20: más atractivo y con etiqueta Eco

El Hyundai i20 es el representante de la marca en el competido segmento B europeo, un segmento donde debe enfrentarse a coches tan consolidados como el Volkswagen Polo, el Ford Fiesta, el Peugeot 208, el Renault Clio, el Opel Corsa, el Seat Ibiza (comparativa de Ibiza, 208, Clio y Corsa en vídeo en este enlace) o el Toyota Yaris (primera prueba en vídeo del Toyota Yaris en este enlace), por citar solo algunos de ellos. Para enfrentarse a una competencia tan amplia, el nuevo i20 llega con un diseño completamente nuevo, un salto de calidad notable y una gama de motores solo de gasolina que ofrecen la posibilidad de contar con hibridación ligera de 48 voltios y, con ella, la controvertida etiqueta Eco. Los precios arrancan en 12.390 euros.

Empezamos como es habitual por las dimensiones. El i20 no crece ya que mantiene una longitud de 4,04 metros, pero incrementa su anchura en3 cm hasta 1,77 metros y es 2,5 cm más bajo, con una altura de 1,45 metros. La distancia entre ejes se incrementa en un 1 cm hasta los 2,58 metros y el peso oscila, según motor y acabado entre 1.013 y 1.115 kilos. La menor altura y la mayor anchura, características comunes en los nuevos modelos de este segmento, hace que el coche parezca más grande, cuando en realidad no es así.

En contra de lo que sucedía hasta ahora, el Hyundai i20 solo va a estar disponible con una carrocería de 5 puertas, eliminándose la de 3. Según Hyundai, este coche es el primero que refleja en Europa la nueva línea de diseño de la marca, llamada Sensous Sportiness, que podríamos traducir como Deportividad Sensual. Más o menos. Esta línea de diseño se repetirá en los modelos que llegarán a continuación y que ya están anunciados: rediseño de su hermano mayor, el i30 (más información en vídeo del Hyundai i30), rediseño del Kona (más información en este enlace) y nuevas generaciones del Hyundai Tucson (más información en vídeo del Hyundai Tucson en este enlace) y el Santa Fe (más información en vídeo del Hyundai Santa Fe en este enlace).

El frontal cambia mucho más de lo que parece. Pasa a tener una parrilla única, mucho más grande y tanto los faros como la zona de los antiniebla tienen unas formas más simples y más rectas. En el lateral la línea de cintura tiene una tendencia ascendente más acusada que en el modelo anterior y en lugar del cristal de custodia triangular en la ventanilla trasera, tenemos un tercer cristal en el montante posterior. La marca sigue ofreciendo este elemento tan de moda últimamente del techo en un color de contraste. En este caso solo puede ser negro brillante en combinación con una paleta de diez colores, cuatro de ellos nuevos en la gama Hyundai.

Y por detrás, la revolución. La matricula pasa del portón a la parte inferior del parachoques, aparecen unos pilotos muy extremados unidos por una línea roja y con un elemento en negro brillante justo encima que aloja el logo y enlaza con la luneta. Y se ha integrado la trampilla del depósito con la propia forma de los faros.

En el interior también cambia radicalmente el diseño. La nueva pantalla central, relativamente integrada, queda en una posición perfecta, a mucha altura, mientras que la instrumentación, integrada por otra pantalla, ésta de 10,25 pulgadas es completamente digital y cambia de aspecto en función del modo de conducción elegido ya sea eco, confort o sport. Pantallas centrales hay dos. Una pequeña de 8 pulgadas y otra, de 10,25, espectacular en un coche de este tamaño.

Lo más curioso de este salpicadero son las líneas horizontales que unen los aireadores centrales con los situados en las esquinas y que tienen una cierta continuidad en las contrapuertas. El volante es también peculiar, con un diseño de cuatro brazos y mandos para el equipo de audio y el teléfono a la izquierda y para las ayudas a la conducción y el ordenador de bordo a la derecha. Y otra cosa interesante es que los mandos del climatizador se mantienen separados de la pantalla central y se manejan como siempre, con palancas para temperatura y caudal y botones para el resto de funciones. Como debe ser.

Por lo que respecta a la calidad, supone un nuevo paso adelante de Hyundai, con un nivel que se sitúa a la altura del resto de las marcas generalistas. En el salpicadero encontramos diferentes huecos para objetos y para dejar botellas, un cargador de móviles, dos tomas USB y la posibilidad de equipar un sistema de audio Bose con 8 altavoces. El equipo es compatible tanto con Apple Car Play como con Android Auto y tiene los servicios Bluelink que ofrece la marca. Estos servicios conectados con información de aparcamientos, meteorología, ubicación de radares y tráfico en tiempo real y posibilidad de gestión a través del móvil de los servicios de navegación son por suscripción, pero Hyundai los regala durante los 5 primeros años.

Hyundai asegura que en las plazas traseras se han ganado 8 cm de espacio para las piernas y 4 cm en anchura a la altura de los hombros. Es cierto que la habitabilidad trasera de este coche, tanto en distancia entre filas como en espacio al techo está entre los mejores del segmento. Y la ventanilla extra incrementa la sensación de espacio que podría quedar algo en entredicho por el diseño de la puerta tan en ascenso.

El que también ha salido ganando con el cambio es el maletero porque ahora tiene 351 litros que son 26 más que en el modelo anterior y que le sitúan en cabeza del segmento ya que iguala con coches como el Clio o el Ibiza que eran las referenciasen este segmento en el que hay coches que ni tan siquiera llegan a los 300 litros. El maletero tiene un doble fondo y la posibilidad habitual de abatir los respaldos traseros para alcanzar una capacidad total de 1.165 litros.

El motor de gasolina de un litro concentra casi la totalidad de la oferta. Es un tres cilindros turbo que se ofrece en cuatro variantes: con 100 CV y cambio manual de seis marchas, con 100 CV y microhibridación, tanto en cambio manual como automático, en este caso de doble embrague y de siete marchas y con 120 CV y también micro-hibridación y solo con cambio automático. Además, hay un cuatro cilindros atmosférico de 84 CV que es la versión básica y que se destinará esencialmente a flotas y coches de alquiler.

Hyundai anuncia unos consumos en ciclo WLTP de entre 5,1 y 5,3 litros en ciclo mixto con emisiones que no superan los 105 gramos de CO2 por kilómetro. En nuestra prueba y circulando de manera normal nos movimos siempre en torno a los seis litros de manera que creemos que esa es la cifra buena con posibilidad de estar en cinco y poco en autopistas llanas a velocidad legal.

Nuestra unidad tenía cambio manual y el motor de 100 CV con hibridación ligera, un propulsor que, en nuestra opinión, es suficiente para la mayoría de los clientes de un coche de este tipo. Es un motor típico de esta nueva hornada de tricilíndricos ligeros, pero en este caso tiene una potencia razonable, es decir, no está exprimido para 130 o 150 CV como otros motores de tres cilindros. Lo mejor que tiene es la elasticidad. No es un tiro, pero sube de vueltas con relativa alegría, desde 2.500 vueltas, eso sí, que es cuando se nota que el turbo entra en acción, y sin decaer.

Lo cierto es que es un motor agradable de utilizar y que no suena ni vibra mucho lo que significa que Hyundai ha cuidado el asilamiento acústico de este coche. Y es que esta es, tal vez, la mayor diferencia con respecto a la generación precedente. Este i20 es más refinado, más silencioso, está mejor aislado y, al volante, se tiene la sensación de estar en un coche de más calidad en todos los aspectos.

La suspensión del i20 es la habitual en este tipo de modelos, McPherson delantera y barra detorsión en el eje trasero. Los frenos son de disco en las cuatro ruedas salvo las unidades de 1,2 litros que llevan frenos de tambor detrás y puede elegirse entre los modos normal, eco y sport que afectan exclusivamente a respuesta de motor y cambio (cuando es automático) y al tacto de dirección.

Este es un coche ligero y por ese motivo es bastante ágil, pero adolece de una suspensión excesivamente blanda para carretera. Para autopista es perfecta porque ofrece un buen nivel de confort, pero en carretera hace que la carrocería oscile un poco más de la cuenta y el coche tiene un comportamiento claramente subvirador, tira mucho de morro y no tiene uno de estos sistemas habituales últimamente de control vectorial del par que venga a echar una mano.

Para los que queráis un i20 un poco más dinámico en carretera, en unos meses llegará el i20 N Line que, además de una estética un poco más pintona, llevará una suspensión ligeramente más firme. Eso sí, solo con este motor de 100 CV micro-híbrido. Para competir con el rey de los deportivos de este tamaño que es el Ford Fiesta ST (porque es muy bueno y porque no hay otros) deberemos esperar a la llegada del ya anunciado Hyundai i20 N (más información en este enlace).

Vamos ahora con la gama. Hay cuatro acabados, Essence, Klass, Tecno y Style. Desde el acabado Klass se dispone de llantas de aleación de 16 pulgadas (17 en los Style), control de crucero, frenada de emergencia con reconocimiento de peatones y ciclistas y mantenimiento de carril, instrumentación digital, cámara de marcha atrás y cambio de luces cortas a largas. Los Tecno añaden el climatizador, los faros de led, el control del ángulo muerto, el cargador inalámbrico o el acceso sin llave y los Style montan el sistema de seguimiento de carril, la frenada de emergencia al circular marcha atrás y en los cruces y pueden completarse con un paquete Lux con el equipo Bose, el asistente de aparcamiento y el techo de cristal entre otros elementos.

Precios. Las tarifas van de los 16.990 euros del Essence con el motor de 84 CV a los 27.995 del Style Lux automático con el motor de 120 CV, pero, ojo, hablamos de tarifas y ya sabéis que las tarifas recomendadas y el precio final no tienen nada que ver. En la web de la marca el Essence de 84 CV se anuncia desde 12.390 euros y el 120 automático Style desde 22.755.

En resumen, un Hyundai i 20 más serio, mejor acabado, de mayor calidad, con un equipamiento muy completo, más habitable. Un coche, en definitiva, que entra a competir de lleno en el segmento, con etiqueta Eco en la mayoría de sus versiones y con unos precios, si nos fiamos de los que da la marca en su web, que son competitivos al tener equipamientos completos y cerrados. A nosotros, particularmente, en este primer contacto el i20 nos ha gustado.

En este enlace encontrarás toda la oferta de vehículos nuevos, de kilómetro cero y de segunda mano del Hyundai i20 tanto de esta nueva generación como de las anteriores.