Hyundai i30: Nueva etapa

Sin cambiar la base del coche, Hyundai lanza ahora la tercera generación del i30, que cambia un poco su estética exterior y diseño interior, mejora algunos puntos del chasis y amplía el equipamiento disponible, sobre todo en lo que se refiere a sistemas de seguridad y ayuda a la conducción.

Han pasado casi 10 años desde que Hyundai decidió lanzar en Europa el i30 (aquí la prueba de la primera generación), para dar guerra dentro del segmento de mercado más competitivo, el de los compactos con longitud en torno a los 4,50 metros.

Este modelo se ha convertido en estos años en uno de los más importantes para la marca y en uno de sus pilares del volumen total de matriculaciones en Europa. Y hacía falta una actualización para mantenerlo al día, ya que en este segmento quedarse parado es dar un paso atrás.

El i30 2017 lo reconocéis por su nuevo frontal que, aunque no cambia radicalmente, sí que se identifica con una nueva parrilla hexagonal un poco más grande que la anterior y con nuevos elementos cromados dispuestos en forma de cascada, según define la marca coreana. El efecto visual es de un mayor grado de robustez y agresividad en comparación con la anterior parrilla, aunque el diseño recuerde un poco al Singleframe de Audi.

Los faros mantienen las formas perfiladas y agresivas del i30 anterior, pero incorporan la tecnología LED en sus ópticas. Y el nuevo paragolpes dispone las luces diurnas LED en vertical e integra los antinieblas de forma diferente.

Las líneas básicas de la carrocería se mantienen generación tras generación, y ni el pilar A inclinado ni la línea de techo descendente cambian. También se ha preservado la alta línea de cintura con la “línea de carácter” como la llaman los diseñadores, que cruza el coche en horizontal, del morro a la zaga, y que da volumen y aspecto deportivo a la carrocería.

Atrás podéis ver el spoiler con funciones no sólo estéticas sino también aerodinámicas, y un portón que cambia su diseño profundamente. Ahora se apuesta por líneas horizontales, más marcadas, que potencian la sensación de anchura y estabilidad del coche visto por detrás. Además, se han rediseñado las ópticas, que son parecidas a las del Hyundai Tucson.

El i30 no ha sido nunca un coche espectacular desde un punto de vista del diseño, pero también es cierto que su imagen siempre se percibe agradable, elegante y discreta. Es un coche que se ha diseñado en el Centro Técnico de Hyundai Motor Europa en Rüsselsheim (Alemania) bajo las órdenes de otro alemán, Peter Schreyer, que en su día contribuyó al diseño del Audi TT. Por lo tanto, su filosofía es plenamente europea. Se fabrica en Nosovice (República Checa).

Rediseño del salpicadero

El interior ha sufrido un cambio radical, ya que se ha modificado totalmente el salpicadero, con un nuevo diseño y nuevos materiales. La primera impresión al sentarte al volante es muy buena. De hecho, el volante es totalmente nuevo, mucho más deportivo y con una superficie de agarre excelente. Cambian los relojes y la pantalla del navegador, que ahora ya no está integrada, pero sí en una posición más elevada que evitar tener que apartar demasiado la vista de la carretera. Parece que poco a poco se va imponiendo esta disposición en el mercado. Al final, Mercedes-Benz y su Clase A van a tener razón.

En la consola central encontramos dos huecos: uno delante de la palanca del cambio, que cuenta con una base para la carga inalámbrica del móvil, junto a una toma USB y Aux. Detrás hay dos portabebidas y más atrás una guantera con cubierta que se desplaza horizontalmente, por si queremos utilizarla de apoyabrazos.

El salpicadero se remata en su parte superior con un plástico blando, de buen aspecto y tacto. Para la zona inferior se utilizan plásticos más duros, pero aparentemente de buena calidad. Los acabados y la sensación de calidad percibida son buenos, el coche demuestra estar a buen nivel en este sentido.

El tacto de todos los mandos y pulsadores es cercano al de un compacto “Premium” de mayor precio, y no exagero. Destaca el buen funcionamiento de la pantalla táctil del navegador, a cuyos menús puede accederse también con el grupo de pulsadores situados a los lados de la pantalla. Estos pequeños detalles hacen que el manejo del coche sea fácil y agradable y, por lo tanto, se consiga un buen placer de conducción.

En las plazas delanteras no hay sensación de estrechez, algo que tampoco se percibe en las plazas traseras. Atrás caben tres adultos, y el que viaja en medio puede hacerlo con un nivel de confort correcto. El respaldo es duro y poco ergonómico, ya que se también se utiliza de apoyabrazos; pero en este compacto, afortunadamente, no molesta el túnel de transmisión, y hay un correcto espacio para las piernas.

Vamos un poco más atrás. El maletero ofrece una capacidad de 395 litros, una cifra en la media del segmento. Supera en capacidad al maletero de un Kia Cee’d, Ford Focus, Renault Mégane, Seat León y Mazda3, pero se ve superado por el maletero de un Citroën C4 y un Peugeot 308. Tiene buenos detalles, como ganchos para sujetar la carga, cromados, y una bandeja en el doble fondo para colocar pequeños objetos. Se amplía hasta los 1301 litros abatiendo los respaldos de la segunda fila.

En definitiva, la habitabilidad de este Hyundai es buena y demuestra una vez más porqué ha sido un modelo con un buen nivel de ventas en toda Europa. Puede ser usado tanto como coche de familia como vehículo utilitario. Tiene el tamaño ideal para resultar versátil a mucha gente. De hecho, estas son las características que hacen de los compactos una tipología de coche superventas.

Hyundai organizó una presentación internacional del nuevo i30 en los alrededores de Marbella. Allí pude conducir una unidad con el nuevo motor de gasolina 1.4 T-GDI de 140 CV, que llevé por carreteras de montaña de la sierra de Ronda y algo de vías rápidas.

El tacto de conducción de este coche me resultó rápidamente familiar, ya que en realidad cambia poco respecto a la anterior versión. La marca coreana dice que ha modificado la desmultiplicación de la dirección, para hacerla más directa y precisa. Ciertamente, lo es. Y si a ello sumamos que se monta un nuevo volante, con diseño más deportivo, que es más ergonómico y tiene mejor agarre, entenderéis que las sensaciones de conducción a través de lo que sienten nuestras manos han mejorado.La dirección es incisiva, y ofrece buena información. Además, podemos endurecerla si activamos el programa Sport del modo de conducción.

El coche entra bien en las curvas, aunque lamentablemente, lo hace balanceando bastante la carrocería. Esto es debido a que el tarado de la suspensión es demasiado blando, a pesar de que Hyundai afirma haberlo endurecido. El i30 no es un compacto con filosofía deportiva, y sigue sin serlo. Pero aún así, creo que hubiera sido interesante aprovechar esta renovación del modelo para mejorar algo más este aspecto y acercarlo así dinámicamente a alguno de sus competidores, más eficaces en carretera. Me refiero al Seat León, Ford Focus, Volkswagen Golf o Peugeot 308, por citar algunos.

Falta más de sujeción en los apoyos, algo que percibes especialmente en esta versión con el nuevo motor de gasolina de 140 CV y cambio automático de 7 velocidades, la más prestacional de la gama, de momento. Digo de momento porque Hyundai presentará a finales de este año el i30 N Performance, una versión más deportiva, capaz de rivalizar con Honda Civic Type R, Seat León Cupra o Renault Mégane RS, entre otros GTI de altas prestaciones (aquí tienes un comparativo entre todos ellos). Ha sido desarrollada en el centro que la marca coreana tiene en el mismísimo circuito de Nürburgring.

El nuevo motor de gasolina se nota potente y bastante elástico en su entrega de par y potencia. Pero existe un pequeño retardo entre la orden que damos al acelerador y la respuesta del propulsor, que debería ser algo más instantánea. Esto se nota más a bajo régimen o saliendo desde parado.

Es un motor con turbo, de baja cilindrada, que sustituye al anterior 1.6 GDI. Debería gastar poco, pero no es éste precisamente su punto fuerte. Hyundai declara que su consumo medio está en 5,5 l/100 km. para esta versión con cambio automático. Pero seguramente, a falta de una prueba del coche en profundidad, estará bastante por encima. En nuestra toma de contacto se movió entre 8 y 10 l/100 km., si bien hay que puntualizar que gran parte del recorrido se hizo por carreteras de montaña.

El nuevo Hyundai i30 mejora especialmente su equipamiento de seguridad y sistemas de ayuda a la conducción. Así, incluye de serie frenada autónoma de emergencia, control de crucero con limitador de velocidad sistema activo de cambio involuntario de carril, , sensores automáticos de luces y sistema activo de cambio de luces.

Como novedad, se incorpora por primera vez en un Hyundai el sistema de detección de fatiga del conductor. Las versiones con el acabado más alto, Style Lux, montan además el sistema de reconocimiento de señales y el control de crucero inteligente, sistema de detección de ángulos muertos y alerta de aproximación de tráfico trasero. Por lo tanto, desde los acabados más básicos este compacto ya incluye un buen equipamiento tecnológico, que puede ser especialmente completo en los acabados superiores, sin necesidad de buscar en el listado de opciones. La “democratización” de la tecnología es algo que siempre ha identificado a los fabricantes coreanos, que siguen apostando por ofrecer una relación precio-equipamiento muy favorable.

Y hablando de precios, la tarifa del nuevo i30 queda de la siguiente manera:

I30 5P TGDI 1.0 120CV KLASS*

20.500€

I30 5P CRDI 1.6 95CV KLASS*

21.550€

I30 5P CRDI 1.6 110CV KLASS*

22.150€

I30 5P TGDI 1.0 120CV KLASS MAX*

21.675€

I30 5P CRDI 1.6 95CV KLASS MAX*

22.725€

I30 5P CRDI 1.6 110CV KLASS MAX*

23.325€

I30 5P TGDI 1.0 120CV KLASS LE

22.270€

I30 5P CRDI 1.6 110CV KLASS LE

23.920€

I30 5P TGDI 1.0 120CV TECNO

23.225€

I30 5P TGDI 1.4 140CV TECNO

24.025€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT TECNO

25.700€

I30 5P CRDI 1.6 110CV TECNO

24.875€

I30 5P CRDI 1.6 110CV DT TECNO

26.550€

I30 5P TGDI 1.0 120CV TECNO TECH

24.175€

I30 5P TGDI 1.4 140CV TECNO TECH

24.975€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT TECNO TECH

26.650€

I30 5P CRDI 1.6 110CV TECNO TECH

25.825€

I30 5P CRDI 1.6 110CV DT TECNO TECH

27.500€

I30 5P CRDI 1.6 136CV TECNO TECH

26.625€

I30 5P CRDI 1.6 136CV DT TECNO TECH

28.300€

I30 5P TGDI 1.4 140CV STYLE

25.975€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT STYLE

27.650€

I30 5P CRDI 1.6 136CV STYLE

27.625€

I30 5P CRDI 1.6 136CV DT STYLE

29.300€

I30 5P TGDI 1.4 140CV STYLE SKY

26.975€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT STYLE SKY

28.650€

I30 5P CRDI 1.6 136CV STYLE SKY

28.625€

I30 5P CRDI 1.6 136CV DT STYLE SKY

30.300€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT STYLE LUX

30.490€

I30 5P CRDI 1.6 136CV STYLE LUX

30.465€

I30 5P CRDI 1.6 136CV DT STYLE LUX

32.140€

I30 5P TGDI 1.4 140CV DT STYLE LUX BLUE

30.490€

I30 5P CRDI 1.6 136CV STYLE LUX BLUE

30.465€

I30 5P CRDI 1.6 136CV DT STYLE LUX BLUE

32.140€

Esta versión de 5 puertas del i30 ya está a la venta, pero en los próximos meses llegarán la versión Wagon (que tendrá su presentación oficial en el Salón de Ginebra) la N Performance (que se presentará en septiembre en su versión definitiva en el Salón de Frankfurt) y finalmente, una versión “fastback”, con estética más cupé.