Tres compactos asequibles por menos de 20.000 euros

Comparamos tres de los compactos más baratos del mercado en la actualidad. Enfrentamos el Skoda Scala contra el Kia Ceed y el Fiat Tipo, tres modelos con un precio de partida claramente por debajo de los 20.000 euros.

En el proceso de compra de un coche intervienen muchos factores, como por ejemplo, la potencia del motor, si es gasolina, diésel, híbrido, eléctrico, o que pueda funcionar a gas, el color, las llantas y por supuesto el tipo de carrocería. Pero, también está la regla de las 3 B: que sea Bueno, Bonito y Barato. Hoy en día casi todos los coches son buenos. Unos más, y otros menos, pero coches malos ya prácticamente no se hacen. Por lo tanto, nos quedan las otras dos B: que sea bonito y barato.

Los coches con carrocería tipo SUV ahora mismo son la moda. Tanto en el segmento B como en el C. Pero los compactos de toda la vida se mantienen como uno de los formatos que continúa vendiéndose muy bien en nuestro país. Por eso mismo, os hemos traído tres compactos que, además de bonitos, también tienen precios ajustados.

Fiat Tipo, Skoda Scala y Kia Ceed son tres de los compactos más baratos que hoy en día puedes comprar en España. Veamos:

El Fiat Tipo con motor de gasolina de 100 CV en su acabado base tiene un precio de tarifa de 18.850 €. Que con los descuentos que ofrece la marca a modo de promoción y financiación se queda en apenas 12.388 euros.

El Kia Ceed 1.0 de gasolina y 100 CV, en acabado Concept cuesta 18.100 €, aunque con los descuentos la cifra se rebaja hasta los 14.100 euros.

El Skoda Scala es el más caro de los tres. Bueno, el menos asequible. Su precio arranca en 20.850 € con el motor gasolina 1.0 de 95 CV, pero con descuentos se queda prácticamente igual que el Kia Ceed.

Las unidades que hoy nos acompañan no son las más baratas, pero son las que hemos podido conseguir. Os las presento:

El Fiat Tipo es un acabado Life con el único motor de gasolina disponible de 100 CV, las demás versiones son diésel. El Life ya incluye un equipamiento de serie decente. Por ejemplo: incluye climatizador, cuadro de instrumentos digital, volante multifunción, sistema multimedia con Apple CarPlay y Android Auto, control de crucero, detector de fatiga, asistente de velocidad, sensores de aparcamiento, faros antiniebla y llantas de 16 pulgadas, entre otros.

Para configurar la unidad que probamos hay que añadir las llantas de 17 pulgadas, el color azul océano y todos los packs de seguridad, full LED, conectividad, pack parking y pack confort, el USB trasero, los cristales tintados y la apertura y arranque sin llave.

Su precio asciende a 25.550 euros, pero con descuentos se puede quedar en 17.123 €.

El Skoda Scala es un acabado Sport con el motor 1.0 TSI de 110 CV, con 10 CV más que el Tipo. Con el equipamiento Sport nos vienen las llantas de 18 pulgadas, los antiniebla, los asientos deportivos, el cuadro digital, una radio con pantalla de 8 pulgadas, el climatizador, el volante multifunción, sensores traseros, entrada y arranque sin llave y el paraguas en la puerta como solución “simply clever” característica de Skoda.

Esta unidad también monta algunos extras: como el color Azul Race Metalizado, los Packs Advance Full Light, con faros full LED, y el Comfort & Design Plus, que añade la cámara de marcha atrás y los pilotos traseros con intermitentes dinámicos, entre otros.

El precio de esta unidad es de 25.510 €, que con los descuentos aplicados se quedaría en 18.860 euros.

Y por último tenemos al Kia Ceed. Éste es un acabado Concept, el más básico, al que sólo se le ha añadido como extra la pintura Blue Flame que cuesta 500 euros. Pese a ser el nivel de equipamiento base, no se puede decir que no venga bien equipado. Por ejemplo, tenemos: “llantas” de 16 pulgadas (son tapacubos, pero bastante disimulados), volante y palanca de cambio forrados en piel, sensor de luces y asistente dinámico para luces de carretera, control de crucero, asistencia de mantenimiento de carril, detección de fatiga, advertencia de colisión frontal, cuadro de instrumentos con pantalla TFT de 3 pulgadas, sistema multimedia con pantalla de 5 pulgadas, rueda de repuesto temporal y, eso sí, no lleva climatizador, sólo aire acondicionado.

Aunque el Ceed está disponible con una motorización de gasolina de 100 CV, lo cierto es que la marca no nos ha podido prestar una unidad con este propulsor. Así que hemos tenido que elegir el siguiente nivel de potencia, que monta el mismo motor pero con 120 CV, 10 CV más que el Scala y 20 CV más que el Tipo.

Su precio es de 20.690 €, o 16.609 € con descuentos aplicados.

El Tipo acaba de recibir un pequeño restyling de media vida para refrescar su imagen. Tiene un diseño general agradable e incluso a mí particularmente me gusta bastante. Con el restyling de media vida cambia el frontal, con un nuevo paragolpes y una parrilla más ancha y también se incluyen nuevos diseños de llantas.

El Skoda Scala está construido sobre la plataforma que utilizan Ibiza y Polo, pero en cambio es más grande que un Golf. Esto hace que sea un coche más económico de fabricar sin renunciar a una buena habitabilidad. ¿Y cómo lo hacen? Pues estirando la distancia entre ejes.

Estéticamente se reconoce muy rápidamente como un Skoda. Mantiene el lenguaje de diseño de la marca, con un frontal muy familiar, y muchas líneas y ángulos bien marcados. Otro rasgo identificativo es la gran luneta trasera, que al menos es bastante original.

Del Kia Ceed se acaba de presentar un restyling de media vida que llegará a finales de año y que modifica tanto el frontal como la parte trasera. De todas formas, el Ceed actual sigue siendo un compacto que entra bien por los ojos. Es más, si te gusta más éste que el nuevo, o si realmente te da igual la estética, y te quieres comprar un Ceed, es un buen momento para ir al concesionario y pedir una oferta, porque al llegar al fin de vida de este modelo puedes encontrar mejores precios.

El Fiat Tipo es el más grande de los tres. Es el más largo (4,37 m), y también el más alto (1,49 m). La anchura (entre 1,79 y 1,80 m) y la batalla (entre 2,64 y 2,65 m) es prácticamente la misma en los tres modelos. Pero hay otra gran diferencia: el peso. El Skoda Scala es el más liviano, con poco más de 1.200 kg. Le sigue el Kia Ceed con 80 kg más, mientras que el Tipo, se va casi hasta los 1.400 kg.

Los puestos delanteros de estos tres modelos no se parecen en nada. Tenemos un italiano, un checo y un coreano, cada uno con su propio estilo y funcionalidad propia.

El interior del Tipo a simple vista parece un poco sobrio, pero entra por los ojos. La sensación de amplitud que ofrece es generosa y resulta un coche muy cómodo con una postura de conducción bastante alta. Tiene pocos adornos, un salpicadero de tacto blando por todo lo demás es plástico duro, incluso en toda la puerta. El nivel de acabado es aceptable, pero algunos elementos deberían estar mejor terminados.

Con la actualización de media vida llegan algunos cambios al interior. La instrumentación es nueva, el volante es un poco más pequeño, se añaden nuevas inserciones decorativas y tapicerias para asientos, y la posibilidad de instalar la pantalla de multimedia de 10,25 pulgadas, como la que lleva la unidad que probamos, con el sistema U-Connect de 5ª generación y Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos. Eso sí, no tiene navegador, habrá que usar el que llevemos en nuestro smartphone.

El habitáculo del Scala es el que mayor sensación de amplitud ofrece de los tres. El diseño interior es el que más nos ha gustado, por su simpleza pero a la vez muy del estilo de la marca. También combina una parte de tacto blando con otros acabados plásticos en toda la zona del salpicadero, pero está ligeramente mejor terminado que el Fiat Tipo. Los asientos son los más deportivos, con una posición baja y muy buena sujeción lateral. No nos ha gustado que el sistema multimedia sea completamente táctil, sin botones, incluso para modificar el caudal del climatizador habrá que pasar por la pantalla.

La pantalla multimedia está situada en un plano inferior a la de sus competidores, por lo que hay que desviar más la vista para consultar alguna cosa. Es fácil de usar y ofrece todo lo necesario, excepto la navegación, porque tampoco tiene.

El interior del Kia Ceed es quizás el más soso o el que menos adornos tiene. Ofrece una parte generosa de goma de tacto blando en prácticamente todo el salpicadero. La postura de conducción es la más cómoda de los tres, gracias tanto por su postura muy natural como por el confort que ofrecen sus asientos.

Kia mejora con los años, hasta el punto de estar a la altura de los mejores generalistas del mercado. El interior del Ceed es agradable. Nos ha gustado también lo bien ordenado que está todo, a mano del conductor y fácil de recordar en apenas unos días. La pantalla que monta este acabado tan básico se queda muy anticuada. Es pequeña, no es táctil, lo que ofrece es muy justo y por supuesto, tampoco contamos con navegación. Tampoco tiene climatizador. En su lugar monta un aire acondicionado como los de toda la vida.

Las plazas traseras del Tipo son las más confortables de los tres por mullido y posición del cuerpo. La distancia para las rodillas es muy buena y la altura hasta el techo va sobrada hasta para adultos de gran estatura. No tiene un reposabrazos central, tampoco aireadores ni ningún puerto USB. La plaza central es la menos incómoda de los tres.

El espacio habitable en la segunda fila del Scala también es muy bueno. Va bien de piernas, ofrece una buena altura hasta el techo y son los asientos que mejor recogen el cuerpo. Tampoco tiene reposabrazos central, pero cuenta con dos salidas de aire y dos USB de tipo C. La plaza central es un poco más justa, pero se podría llegar a utilizar en casos esporádicos.

La entrada al Ceed es la más generosa por la buena apertura de la puerta. El espacio para las piernas es bueno pero la altura disponible es la menor de los tres. Los asientos son cómodos y en este caso sí tenemos un reposabrazos. La plaza central también es la más justa e incómoda, y sólo disponemos de un único USB para cargar dispositivos.

En cuanto a los maleteros, hay bastante diferencia de capacidad entre ellos. Mirad: el Kia Ceed ofrece una capacidad estándar de 395 litros, un poco por debajo de la media del segmento. El del Fiat Tipo es de 440 litros, buena cifra, y superior a la del Ceed, mientras que el Skoda Scala ofrece ni más ni menos que 467 litros de capacidad, uno de los más grandes de todo el segmento.

Los 395 litros de capacidad del Ceed son un poco justos para lo que ofrece el segmento C. No están mal, porque se pueden aprovechar bien, pero nos hubiese gustado un poco más de capacidad. En cuanto a equipamiento, tiene 2 ganchos para colgar bolsas, 2 argollas para fijar una red. No tiene doble fondo pero, bajo el piso tenemos una rueda de repuesto temporal. Si abatimos los asientos, llegaremos hasta los 1.291 litros totales.

El del Tipo ofrece una capacidad de 440 litros que ya es una cifra bastante buena, incluso de las mejores del segmento. Además, ofrece buenas soluciones, como 2 ganchos, 2 argollas, un divisor bajo el piso y un doble fondo donde dejar algún objeto junto con el kit reparapinchazos. Con los asientos plegados la capacidad total es muy generosa, pudiendo cargar bultos de gran volumen sin problema.

Lo del Escala es digno de mención. Los 467 litros lo colocan cómo el maletero más capaz de entre los compactos. Y además también es el que más posibilidades de distribución presenta, con hasta 6 ganchos para colgar, una correa lateral y 2 argollas para red. También tiene una funda para el suelo reversible, para no ensuciar la parte tapizada y bajo el piso una rueda de repuesto temporal muy útil. Abatiendo los asientos lograremos hasta 1.410 litros, aunque el piso no queda totalmente plano.

De entrada todos son motores de gasolina, de tres cilindros, de 1 litro de cilindrada y con turbo, y además tienen en común que no son muy suaves que digamos…

Existen algunas diferencias entre unos y otros. Veámos: en el Fiat Tipo esta mecánica sólo está disponible con una potencia de 100 CV. Entrega la potencia máxima a 5.000 vueltas y ofrece un par motor de 190 Nm -en teoría- a partir de las 1.500 rpm. Además, de los tres es el único que ofrece un cambio manual de 5 velocidades.

El motor 1.0 TSI del Skoda Scala está disponible con 95 o 110 CV. Ambos pueden montar cambio manual, de 5 relaciones para el de 95 CV y de 6 para el del 110, como el que probamos, además de la posibilidad de incorporar el cambio automático DSG de doble embrague para este último. La versión más potente se complementa con un par motor de 200 Nm disponible entre las 2.000 y las 3.000 vueltas.

El propulsor de acceso a la gama Ceed es el 1.0 T-GDi de 100 CV, pero nos hemos tenido que conformar con la versión de 120 CV del mismo bloque de tres cilindros porque no había unidades de prueba, una opción que, a priori, se presenta un poco más interesante. Con 120 CV es el más potente de los tres pero, sorprendentemente, es el que menos par motor ofrece: sólo 172 Nm entre las 1.500 y las 4.000 vueltas.

Precisamente ese rango de par contínuo es el que determina el rendimiento de esta mecánica del Kia, que se muestra muy progresiva desde muy bajas vueltas hasta prácticamente el corte sin perder fuelle.

Según su ficha, acelera de 0 a 100 km/h en 11,1 segundos y podría alcanzar los 190 km/h de velocidad punta. Sin duda es una mecánica muy agradable para tratarse de un tres cilindros. Es el que menos “efecto turbo” muestra, muy suave en la entrega de potencia y con una pequeña estirada final por encima de las 5.000 rpm que sorprende.

El Skoda Scala es el que más par tiene, pero ese par se percibe por encima de las 2.500 rpm. Por debajo su rendimiento es un poco pobre. Como en el Kia, la entrega de potencia también es progresiva pero es al que más le cuesta reaccionar cuando soltamos gas y volvemos a pisar el acelerador. De los tres motores, el del Scala es el que tiene un tacto más áspero.

Esa sensación de empuje se traduce en un 0 a 100 en 10,1 segundos y una punta de 199 km/h. Este conocido bloque del grupo VAG hace valer sus 200 Nm de par para acelerar con más contundencia si cabe, pero ese “vacío” a bajas vueltas y una mayor rumorosidad le restan puntos.

Y en el caso del Fiat Tipo, que monta un motor menos potente que el de sus rivales pero con un buen par de 190 Nm, necesita que lo subas bastante de vueltas para sacarle todo el potencial. Por el contrario, también es uno de los más suaves en su funcionamiento.

Con un 0 a 100 en 11,8 segundos sobre el papel es al que más le cuesta arrancar. Pero también es cierto que ese registro está cerca del del Kia Ceed, que tiene 20 CV más. Es el más “turbo” de los tres e incluso da la sensación de estar conduciendo un coche diésel en este sentido.

En resumen, de los 3, el motor que más nos convence es el del coreano por ese menor retraso en la entrega de la potencia y el par, además de su suavidad de funcionamiento.

El Fiat es el más blando de los tres y el que tiene la dirección más desmultiplicada. Por ello es el que transmite menos agilidad de los tres. También es el más pesado, y se nota. Los tres huyen de una conducción deportiva, pero quizás el Tipo es el que debe conducirse de forma más tranquila para sentirnos más agusto al volante.

Cuando recogimos el Kia Ceed en el concesionario debemos confesar que nos llevamos las manos a la cabeza, porque se trata del nivel de acabado más bajo que, entre otras cosas, monta tapacubos de 16 pulgadas y sobre el papel iba a salir perjudicado frente a sus rivales. Pero la realidad ha sido otra y es que la buena puesta a punto del chasis del coreano, a medio camino entre el confort y la dinámica de conducción, hacen del Ceed un coche estupendo para todos los públicos. Es el más efectivo tanto en vías rápidas como zonas viradas. La dirección es la mejor de los tres pero el tacto de freno es mejorable.

Como ocurre con los otros dos modelos, el Skoda Scala es un coche con la suspensión blanda, pero no tanto como la del Fiat, y la dirección también está menos desmultiplicada, por lo que el guiado es más directo. Tiene el mejor tacto del pedal del freno y además, en este acabado Sport, podemos variar el temperamento del coche con los modos de conducción, que permite modificar la dureza de la dirección, la respuesta del acelerador y la suspensión más firme. Con lo que consigue, en modo Sport, un comportamiento dimámico mucho mejor que el de sus rivales.

Con el tema de los consumos nos hemos llevado alguna sorpresa. Si repasamos sus consumos homologados según el ciclo WLTP nos queda lo siguiente:

El Tipo de 100 CV homologa 5,6 l/100 km. El Scala de 110 CV hace lo propio con una media de 5,4 l/100 km. El Ceed de 120 CV en principio debería gastar 5,2 l/100 km de media.

Durante esta prueba los 3 coches han recorrido los mismos kilómetros y nos los hemos rotado para que el estilo de conducción de cada uno no fuese un factor influyente. Nuestras mediciones han sido éstas:

El Tipo, que debería gastar 5,6 litros, ha gastado 6,1, medio litro más. Al Scala le hemos rebajado su consumo homologado, con 5,3 l/100 km por los 5,4 que homologa. Y el Ceed nos ha gastado 5,7 litros, medio litro más del que homologa. Que sería lo normal.

Así que, la sorpresa del día en este aspecto: el Skoda Scala.

En resumen: los tres modelos se posicionan como fantásticas alternativas para todo aquél que esté buscando un buen compacto sin tener que desembolsar una gran cantidad de dinero. Cada uno tiene sus cosillas, como ya habéis visto, pero ninguno sobresale frente a los otros dos de forma clara.

A nosotros el que más nos ha convencido ha sido el Kia Ceed, pero con un equipamiento mayor, por su relación calidad/precio y por su comportamiento muy equilibrado. El Skoda Scala es el que puede ofrecer una mayor “deportividad” si lo equipamos con suspensión variable y es el que mejor maletero tiene. Y el Fiat Tipo es el más barato, el más suave y también el más confortable.