Renault Austral: El sustituto del Kadjar, a punto

Adiós al Kadjar, hola al Austral. El SUV compacto de Renault cambia de nombre para liderar, junto al Arkana (prueba en vídeo en este enlace) y al nuevo Mégane E-Tech 100% eléctrico (prueba en vídeo en este enlace), la ofensiva de la marca en el segmento de mayores ventas del mercado. Comparte la plataforma con el Nissan Qashqai (prueba en vídeo en este enlace), pero tiene un diseño completamente diferente, un interior muy tecnológico, numerosas ayudas a la conducción y un sistema de cuatro ruedas directrices.

El Renault Austral se fabricará en España, en la planta de Palencia, y estará en el mercado en otoño de este año. ¿Precios? Todavía no. Demasiado pronto. De entrada, ya os adviertimos que la gama de motores será sólo híbrida de gasolina. Sin diésel, sin versión eléctrica, al menos de momento, y sin la variante e-Power eléctrica con generador de gasolina del Qashqai. El Austral estará disponible solo con dos motores de gasolina con hibridación ligera de 12 voltios y con un híbrido más potente que el Arkana o el Captur. Y, eso sí, con un acabado de aspecto deportivo llamado Esprit Alpine que viene s sustituir al RS Line.

El Austral es un SUV, de eso no hay duda. Pasos de rueda prominentes, línea de cintura elevada, protectores frontales y laterales, 17 cm de altura libre al suelo… En el frontal, la parrilla tiene una línea cromada que la divide longitudinalmente y entra hasta dentro de los faros. El logotipo, el nuevo rombo de la marca, está muy presente y los faros describen una C que reencontraremos en los pilotos en la parte trasera. En el lateral vemos muchos elementos en negro brillantes, desde los pasos de rueda a las carcasas de los retrovisores pasando por el techo o por los marcos de las ventanillas que, según la versión, pueden ser también cromados.

Los faros delanteros pueden ser de LED, de LED adaptativos o matriciales, esos últimos con intermitentes dinámicos. La marca ofrecerá siete colores, dos blancos, un rojo, un azul, un negro y dos grises, uno de ellos satinado exclusivo para las versiones Esprit Alpine. Vamos con las dimensiones. El Austral mide 4,51 metros de largo por 1,83 de ancho y 1,62 de alto y tiene una distancia entre ejes de 2,67 metros. Es ligeramente más largo y con más batalla que el Kadjar al que sustituye y sus llantas pueden llegar a ser de 20 pulgadas de diámetro.

En el interior encontramos un diseño que nos suena de algo. El Austral dispone del sistema OpenR Link ya visto en el Mégane E-Tech eléctrico, con instrumentación digital y una pantalla central de 12 pulgadas que forma con la otra una especie de L acostada. Ambas están tratadas para ofrecer la máxima visión en todo tipo de condiciones de luz lo que ha permitido prescindir de la visera. La pantalla de la instrumentación es configurable con cuatro diseños diferentes y la posibilidad de incluir los widgets deseados.

Como ya sabéis, el sistema OpenR Link trabaja con los servicios de Google y dispone de Google Maps para la navegación con información de tráfico en tiempo real, búsquedas simplificadas en Google, control por voz y actualización constante de la cartografía. Incorpora asimismo Google Assistant para la función de asistente personal y Google Play para la música y las redes sociales con todas las funciones habituales de estos interfaces

A todo ello hay que sumar la posibilidad de disponer de un head up display en el parabrisas en un espacio de 9,3 pulgadas (velocidad, ADAS y navegación). El volante, por su parte, es bastante pequeño y de formas cuadradas. No, no me gustan las formas cuadradas en algo que, por definición, es redondo.

Finalmente, la consola central, elevada y ancha, está libre de todo tipo de mandos, concentrados en el volante y la pantalla. Y se mantienen fuera los mandos de climatización. Tiene, eso sí, un soporte vertical para el teléfono, que podemos recargar de manera inalámbrica en un hueco específico para ello justo debajo de un reposamanos deslizante que permite accionar los botones y mandos más cómodamente. Y existen, evidentemente, múltiples huecos para objetos, en la más pura tradición de la marca.

Los asientos pueden tener tapicerías de tela, de piel y mixtas como la de alcantara y cuero de las versiones Esprit Alpine que tienen detalles interiores en azul y elementos decorativos como una banderita francesa o el escudo de Alpine bordado. En los paneles decorativos, lacados o auténtica madera de poro abierto. Volviendo a los asientos, pueden ser eléctricos, con calefacción y con masaje.

Las plazas traseras son de las más grandes de la categoría, con una altura al techo superior a los 90 cm y una inclinación moderada de la banqueta que permite mantener los pies en el suelo y no levantar en exceso las rodillas. Las puertas de acceso son también de las más grandes del segmento. Además, es posible encargar el Austral con una banqueta posterior deslizante en 16 cm y con los respaldos regulables en 3 posiciones. Detrás hay múltiples huecos para objetos y cargadores USB-C.

La capacidad de carga del maletero es de 500 litros en las versiones de gasolina híbridas ligeras y de 430 en la versión híbrida E-Tech, puesto que la batería se aloja debajo del piso del propio maletero. En las versiones con banqueta deslizante, la capacidad se incrementa hasta 575 litros al adelantar al máximo la mencionada banqueta. La capacidad con los asientos abatidos es de 1.525 litros y el portón es de apertura eléctrica en el acabado Iconic.

Este coche está construido sobre la plataforma CMF-CD de la Alianza, la misma que utiliza el Nissan Qashqai y la marca ofrecerá dos variantes, una con suspensión trasera por barra de torsión y otra con eje multibrazo para las versiones equipadas con el sistema de cuatro ruedas directrices 4Control. Estas últimas deben ofrecer un comportamiento mucho más preciso, sobre todo en curva y reducen en casi un metro y medio el diámetro de giro al poder girar hasta a 5 grados en sentido opuesto a las ruedas delanteras. Cuando se conduce a alta velocidad el eje trasero gira hasta 1 grado en el mismo sentido que el delantero. El cambio es a 50 km/h.

El chasis es mucho más rígido que el del Kadjar, lo que ha permitido afinar mucho más el tarado de muelles y amortiguaciones para ofrecer un mejor compromiso entre comportamiento dinámico y confort. Todo ello lo comprobaremos cuando podamos conducir el coche más adelante. Renault asegura que la versión de acceso pesará menos de 1.400 kilos gracias al uso de aluminio en las puertas y capós y en los brazos de suspensión.

Para las versiones híbridas convencionales Renault ha seguido la misma receta utilizada en el Clio, el Captur y el Arkana, es decir, la combinación de un motor de gasolina con dos motores eléctricos, uno de ellos de propulsión y otro que se encarga de arrancar el motor térmico, insertar las marchas de la caja automática inteligente sin embrague y recargar la batería. La caja gana una marcha y pasa a ofrecer siete, las mismas cuatro para el motor de gasolina y tres para el eléctrico en lugar de dos como hasta ahora.

La gran diferencia con respecto a los modelos citados es que el motor de gasolina no es el 1.6 atmosférico de 4 cilindros sino un nuevo motor de tres cilindros y 1,2 litros con una potencia de 130 CV. El motor eléctrico también es más potente (50 kw en lugar de 36) y esto permite ofrecer dos niveles de potencia con 160 o 200 CV para estas versiones, más acordes con el planteamiento y el tamaño de este modelo que dispone de una batería de 1,7 kwh. Por cierto, ninguna versión del nuevo Austral, al contrario que el Kadjar, ofrecerá tracción a las cuatro ruedas.

Renault asegura que estas versiones híbridas serán capaces de circular en modo eléctrico el 80% del tiempo en ciudad ahorrando hasta un 40% del consumo con respecto de un motor de gasolina. A falta de la homologación oficial, la marca calcula que el consumo estará en 4,6 litros/100 km y las emisiones de CO2 en 105 gramos.

En complemento con estas dos versiones híbridas enchufables, el Austral dispondrá de 2 motores de gasolina con hibridación ligera. El primero es el motor de 3 cilindros y 1,2 litros con 130 CV, el mismo que utilizan las versiones enchufables solo que esta vez asistido por una batería de 48 voltios que ofrece una pequeña ayuda en las fases de arranque o aceleración y permite desconectar en algunos momentos el motor de gasolina. Este motor tendrá un consumo medio de 5,3 l/100 km y unas emisiones de 123 gramos, motivo por el cual, al tener que pagar impuesto de matriculación, no se ofrecerá en nuestro mercado.

La gama española se completará con dos variantes de un motor de cuatro cilindros turbo de 1,3 litros, ya conocido en otros modelos y dotado de una batería de iones de litio de 12 voltios que se utilizará como alternador y motor de arranque. Estará disponible con 140 o 160 CV de potencia, con transmisión automática de tipo CVT o con cambio manual en la versión menos potente.

Entre las numerosas ayudas a la conducción incluidas en el sistema Active Driver Assist, encontramos el asistente de conducción en autopista que incorpora un regulador de velocidad adaptativo con función stop and go, el centrado en el carril y el reconocimiento de señales para adaptar la velocidad a la del tráfico y desacelerar cuando el coche se aproxima a una rotonda o a un cruce. El coche dispondrá también de sistema de aparcamiento automático con cámara de 360 grados, avisos de salida de carril o presencia de vehículos en el ángulo muerto, frenada automática tanto marcha hacia adelante como marcha atrás y el aviso de salida segura que advierte de la presencia de peatones o ciclistas cuando, con el coche ya detenido, los ocupantes abren las puertas para salir de él.

Sorprende que, al menos de momento, Renault no utilice la tecnología híbrida enchufable de la que sí disponen sus rivales de Peugeot o Citroën y que ella misma ya utiliza tanto en la gama Mégane como en el Captur. En cualquier caso, este nuevo Austral tiene todas las virtudes que se esperan en un SUV de segmento C. No es tan radical en su diseño como sus nuevos rivales coreanos, pero ofrece un buen espacio habitable, un maletero correcto y un interior muy tecnológico y con el Open R Link que es espectacular en su funcionamiento. Falta conducirlo y falta conocer sus precios, pero, por lo que hemos visto, apunta a superventas.