Seat Tarraco e-Hybrid vs Kia Sorento PHEV

Recién llegados en este 2021, el Seat Tarraco e-Hybrid y el Kia Sorento PHEV son dos SUV grandes, potentes y con tecnología híbrida enchufable con unos 50 kilómetros de autonomía eléctrica. Ambos se posicionan como coches para la familia, para el día a día y para viajar, con un consumo combinado muy bueno.

Pese a tratarse de dos híbridos enchufables, similares, en cuanto a mecánicas son un poco distintos:

El Kia Sorento PHEV se decanta por un propulsor de gasolina, turbo, de 1.6 litros de cilindrada con 180 CV de potencia. Se le une un motor eléctrico capaz de entregar 91 CV adicionales, alimentado por una batería de polímero de litio de 13,8 kWh. Cuando trabajan a la vez a máximo rendimiento la potencia que se consigue es de 265 CV y un par motor de 350 Nm. Todo ello asociado a un cambio automático de 6 velocidades y a la tracción a las cuatro ruedas.

El Seat Tarraco e-Hybrid también monta un motor de gasolina turbo, pero en este caso de 1.4 litros de cilindrada, que entrega 150 CV. El motor eléctrico rinde 116 CV (25 CV más que el Sorento) y la potencia conjunta que se consigue es de 245 CV (20 CV menos que el Kia) y 400 Nm de par. El cambio también es automático, pero en este caso de doble embrague, también con 6 relaciones pero con tracción delantera.

Resumen rápido: El Kia es más potente en conjunto, pero el Seat parece que ofrece un rendimiento superior usando sólamente el motor eléctrico.

El Kia Sorento híbrido enchufable puede adquirirse con el nivel de acceso Drive o con la versión que estamos probando corresponde al nivel de equipamiento Emotion, mucho más equipado, con un precio de 50.941 euros, descuentos aplicados.

El Seat Tarraco e-Hybrid está disponible en acabados Xcellence y FR como este que nos ha cedido Seat España. Es más barato que el coreano, en concreto casi 6.000 euros más económico, con un precio con descuentos que se queda en 44.980 €.

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Con la batería cargada al máximo, seleccionamos el modo EV o 100% eléctrico para realizar en torno a 10 km en trayecto urbano. Esta podría ser la distancia que recorre un conductor para cruzar toda Barcelona o incluso para salir de Madrid. Después circularemos por autopista y carretera hasta comprobar cuántos kilómetros podemos hacer con el resto de carga sin usar el motor de combustión.

Pero vayamos por pasos:

En ciudad el Tarraco se muestra menos confortable que el Sorento, debido en gran medida al tarado de las suspensiones. Mientras que el modelo español mantiene la seña de identidad de la marca, con chasis puestos a punto para una conducción más dinámica, el Kia apuesta por la pura comodidad, con una amortiguación muy blanda que se come, literalmente, cualquier resalto o badén que nos crucemos en el camino.

Los dos utilizan en la mayoría del tiempo el motor eléctrico tanto para arrancar como para circular a baja velocidad, con soltura y suficiente fuerza a la hora de arrancar de un semáforo a un ritmo correcto.

El Tarraco e-Hybrid se mueve con mayor agilidad entre el tráfico, incluso a la hora de callejear, donde el Sorento PHEV, por su tamaño y por un radio de giro más amplio es un poco más torpe. Incluso a la hora de aparcar, habrá que hacer más maniobras con el coreano.

El Kia Sorento PHEV mide 4,81 metros de largo, 1,90 m. de ancho, 1,70 m. de alto y tiene una distancia entre ejes de 2,82 metros. El Tarraco e-Hybrid es más pequeño: 4,73 m. de largo, 1,84 m. de alto, 1,66 m. de alto y tiene una batalla de 2,79 metros. Por lo tanto, el Sorento es 8 centímetros más largo, 6 centímetros más ancho, 4 más alto e incluso la distancia entre ejes también es 3 centímetros mayor.

También hay una diferencia apreciable en el tema del peso: El Seat Tarraco tiene un peso de 1.868 kg mientras que el Kia Sorento para la báscula en 2.174 kg, así que el Seat se muestra 306 kg más liviano, y eso puede ser un factor determinante.

En autopista ambos modelos son unos grandes rodadores. Coches pensados para viajar, con la familia, incluso cargados hasta los topes. Tienen potencia de sobra para mantener ritmos de crucero legales sin apenas despeinarse, pero hay uno que destaca sobre el otro en cuanto a confort de marcha.

El Kia Sorento ofrece un agrado de marcha superior al del Seat Tarraco en vías rápidas, básicamente por un mayor filtrado, en cuanto a suspensiones y también en el apartado de insonorización del interior.

Con el acabado FR del Tarraco que estamos probando, se añade una suspensión un poco más deportiva. Algo más firme que la convencional. Pero que no es para nada incómoda. Incluso ofrece algo más de información respecto a la del coreano. Pero si de viajar cómodo se trata, creemos que el Sorento está un punto por encima, haciendo gala de un rodar prácticamente de un SUV de categoría.

En cuanto al consumo en autopista. Ambos modelos pueden circular a gran velocidad usando sólo el motor eléctrico sin problema. E incluso, si utilizamos el modo híbrido, podremos apreciar de forma clara como usan la propulsión 100% eléctrica en muchas fases de llaneo.

Nuestra prueba de autonomía se basó en torno al 25% del recorrido en ciudad y un 75% en carretera y autopista, con unos resultados bastante sorprendentes. El Kia Sorento PHEV homologa una autonomía media en modo eléctrico de 57 kilómetros, mientras que el Seat Tarraco e-Hybrid expone en su ficha que puede circular sin usar el motor de combustión en una media de 49 km.

En nuestra prueba, la batería del Tarraco nos dio para hacer un total de 39 kilómetros antes de que se encendiera el motor de combustión. Mientras que el Sorento fue capaz de aguantar la conducción eléctrica hasta los 40 kilómetros. Sólo hay 1 km de diferencia, pero al Kia aún le quedaba prácticamente 1/4 de la capacidad. Lo que pasa es que el coreano no la agota por completo, activa el modo híbrido y se reserva algo de carga para usarla en combinación.

Si hubiésemos realizado más kilómetros por ciudad, que es donde menos gasta un coche eléctrico, podríamos estirar mucho más esa autonomía, incluso estamos seguros que podríamos realizar incluso más de 50 km sin ningún problema.

En carretera se invierten los papeles. Si el Sorento hacía gala de un confort de marcha excelente en autopista, es aquí donde el Tarraco saca a relucir una puesta a punto del chasis mejor afinada para soportar una conducción un poco más dinámica.

El Tarraco e-Hybrid, pese a tener un motor menos potente que el del Sorento PHEV, se muestra claramente más lleno y vivo en su forma de entregarla. También es mucho más dinámico en todos los demás aspectos, frena de forma más contundente, la dirección transmite más y es mucho más precisa e incluso el cambio automático de doble embrague responde mejor.

Con el Sorento PHEV hay que tomarse las cosas con un poco más de calma. La suspensión blanda y el mayor peso del conjunto le restan cualidades dinámicas. En este aspecto es un coche que balancea mucho, sobretodo en los cambios de apoyo, pero tiene una cosa muy buena, y es que es capaz de recargar mucho mejor la batería en las frenadas o con el mismo motor de combustión. Con lo que se aprovecha mejor el sistema híbrido.

Tras este test de alrededor de 300 km, el consumo medio de combustible que ha registrado el Seat Tarraco e-Hybrid ha sido de 4,1 l/100 km. El del Kia Sorento PHEV ligeramente inferior: 3,9 litros, por su mayor aprovechamiento del motor eléctrico.

Esto nos demuestra que son dos coches que podremos usar a diario, sin gastar apenas gasolina, siempre y cuando podamos cargarlos en casa o en destino, y que a la hora de realizar algún viaje también son capaces de mantener unas cifras de consumo combinado muy buenas.

Ahora bien, tampoco nos engañemos, porque sin carga en la batería, ambos modelos pueden superar los 9 litros de media...

En el apartado del diseño, todo es subjetivo, pero cada uno apuesta por su propia fórmula. El Tarraco… es un Seat, y como la mayoría de Seat sigue un patrón de diseño muy marcado. El Sorento, en cambio, parece un coche americano, no sólo porque sea más grande, sino porque su aspecto es más imponente, tanto en el frontal como en la trasera.

En el Tarraco el maletero se ve ligeramente perjudicado respecto a una versión de combustión por la ubicación de la batería. Ofrece 610 litros de capacidad, que no está mal, y la posibilidad de ganar espacio gracias a la banqueta corredera y al abatido de los respaldos.

El del Sorento tiene 6 litros menos, 604 litros en concreto, pero ocurre lo mismo que en el Seat, gracias a la banqueta corredera y al abatido de los respaldos casi llegaremos los 2.000 litros de capacidad.

En las plazas traseras ambos modelos apuestan por ofrecer mucho espacio para los ocupantes, tanto para las rodillas como para la cabeza. Incluso la plaza central es utilizable. Los dos tienen banqueta corredera para aumentar la capacidad del maletero pero hay una gran diferencia entre los dos: el Sorento PHEV tiene una tercera fila con dos asientos, en el Tarraco e-Hybrid no se puede elegir. Así que uno es un 7 plazas y el otro se tiene que conformar con 5.

En la parte delantera el diseño del Tarraco es muy límpio y ofrece un nivel de acabado ligeramente superior al del Sorento. Sin embargo el espacio habitable es más confortable el del Sorento, aprovechando mejor su mayor tamaño. En tema asientos los del Kia también son más cómodos, pero no recogen tanto como los del Seat, de corte más deportivo.

Más diferencias entre ambos: en el caso del Kia Sorento, el equipamiento de esta versión está completamente cerrado. No se puede añadir ni quitar nada. Tan sólo podremos elegir el color. En este caso, la pintura Azul Gravity se paga aparte, y habrá que desembolsar 488 euros de más. Nada del otro mundo.

En el caso del Tarraco, pese a que la versión FR viene bastante bien equipada de serie, si lo queréis tal y como lo veis en las imágenes, tendréis que acudir al catálogo de opcionales para añadir: la pintura, las llantas de 20 pulgadas, el chasis adaptativo y la toma de 230 V en el maletero.

Al final, el Sorento PHEV que hemos probado cuesta 51.422 euros. Es caro, pero ultra-equipado y eso sí, mucho más barato que cualquier modelo premium a igualdad de equipamiento.

El precio del Tarraco e-Hybrid ha subido un poco respecto a los 44.980 € que comentábamos al principio. En concreto, esta unidad, con todos los extras mencionados, cuesta 47.376 euros. Es más barato que el Sorento, y sí, también cuesta menos que cualquier alemán, menos equipado.