Toyota Corolla Cross vs Citroën C5 Aircross

En esta comparativa pondremos frente a frente dos SUV que, pese a estar encuadrados en el segmento C y a ofrecer motorizaciones híbridas con etiqueta Eco, presentan distintos estilos, argumentos e incluso filosofía. Por un lado, la tecnología y robustez japonesas; y por otro, el diseño y confort franceses. Por un lado, el Toyota Corolla Cross; y por otro, el Citroën C5 Aircross.

Contamos para esta prueba en vídeo con la inestimable colaboración de Néstor Abarca. Entre nuestro querido compañero y vuestro humilde servidor, os ayudaremos a descubrir los pros y contras de la gran novedad de Toyota para este segmento y los del veterano SUV galo, así que ¡al lío!

El Toyota Corolla Cross es, sin duda alguna, un modelo que faltaba en la gama de la marca japonesa. De hecho, ha tardado en llegar a España; y lo hace para cubrir el gran hueco que quedaba entre el Toyota RAV4 (un SUV más bien grande y muy costoso) y el Yaris Cross (un SUV urbano y bastante más pequeño); un espacio que el Toyota C-HR, un crossover más cercano a un turismo por concepto, no acababa de ocupar.

• Ofertas para Toyota Corolla Cross nuevo

• Ofertas para Citroën C5 Aircross nuevo

El Corolla Cross se las tendrá que ver con numerosos rivales; entre ellos, uno de los que tiene mejor aceptación en el mercado español es el Citroën C5 Aircross. El SUV de la marca francesa llegó a nuestro mercado a finales de 2018; a principios de 2022 fue sometido a un rediseño estético y de equipamiento y, desde entonces, ha recibido nuevas motorizaciones híbridas enchufables y ligeras que se suman a las tradicionales diésel y de gasolina. 

Por sus dimensiones exteriores, los dos modelos de nuestra comparativa se encuadran en la categoría de los SUV “compactos”, el así llamado segmento C-SUV. El Citroën C5 Aircross mide 4,50 metros de largo, y es por lo tanto 4 centímetros más largo que el Corolla Cross. Marca una importante diferencia en cuanto a distancia entre ejes (2,73 m), donde supera al nipón por 9 cm nada menos. También es 1 cm más ancho (mide 1,84 m) y otros 3 más alto (1,65 m); y monta unas ruedas con una pizca más de diámetro.

En cuanto a imagen, ambos modelos dejan claro el porqué de incluir “Cross” en su nombre, pues siguen los cánones estéticos de la categoría SUV: formas tirando a cuadradas, con aspecto de todoterreno; pasos de rueda grandes y bien definidos, protecciones alrededor de la carrocería, barras de techo (opcionales en el Citroën) y un frontal que transmite poderío. A partir de ahí, cada cual sigue el estilo definido por sus respectivas marcas.

El puesto de conducción del Corolla Cross es similar al del Corolla berlina. Como aquel, presenta una imagen actual y sobria al mismo tiempo; muy Toyota por decirlo de alguna manera. El salpicadero, de líneas simples, alberga una instrumentación digital de 12,3 pulgadas, y está coronado por una nítida pantalla central de 10,5 pulgadas que se sitúa en una posición inusualmente elevada. El sistema de infoentretenimiento es relativamente intuitivo y razonablemente rápido; virtudes a las que cabe sumar la conexión inalámbrica para Android Auto y Apple CarPlay. 

Por su parte, el C5 Aircross sigue la línea de la marca, con un salpicadero muy plano, de aspecto agradable, una buena impresión de calidad general y un correcto reparto de huecos para dejar objetos. El volante ligeramente achatado permite consultar una instrumentación digital de 12” no muy nítida y que empieza a mostrarse anticuada. A partir de aquí, con el último restyling llegaron ciertos cambios; aunque no al sistema de infoentretenimiento, que se sigue mostrando algo recargado y lento de reacciones. Lo que sí ha cambiado es la pantalla que le da acceso. Ahora es más grande y llega a las 10 pulgadas; esto ha provocado que ya no esté tan integrada en el salpicadero y que las salidas de aireación pasen a estar por debajo y no a los lados.

Pasemos a las plazas traseras. En el Toyota, el acceso es relativamente sencillo aunque se complica un poco por el corte de la puerta respecto de la rueda y porque el ángulo de apertura no llega a los 90 grados. La banqueta fija es fija pero el respaldo es regulable, y el espacio piernas nos parece mejor que en el Corolla berlina.

El Citroën se distingue por ofrecer tres plazas individuales y del mismo tamaño, algo poco usual en el segmento. Cada una de estas plazas cuenta con regulación del respaldo; pero ojo, también con desplazamiento longitudinal, lo que permite repartir el espacio disponible para los ocupantes y la carga. Pese a ello, es una sorpresa que, incluso con la banqueta retrasada, la distancia libre para las rodillas sea menor que en el Toyota.

El portón trasero del Corolla Cross tiene desbloqueo eléctrico pero accionamiento manual. La boca de carga no es muy amplia, el umbral queda un poco bajo y el espacio interior, un tanto irregular, se conforma con ofrecernos 433 litros de capacidad. Bajo el piso no hay espacio que se pueda aprovechar, de manera que la capacidad de almacenamiento se queda algo corta. Eso sí: plegando la banqueta trasera, que está dividida en dos secciones, podremos aprovechar hasta 1.295 litros en total.

El C5 Aircross dispone de un portón eléctrico y una boca de carga amplia y rectangular con umbral bajo. Gracias a la banqueta deslizante, la capacidad del maletero es variable, pero siempre superior a la del Toyota ya que, en esta versión híbrida, ofrece 580 litros con todos los asientos en su posición más retrasada y 720 litros si los llevamos todos adelante. Además, las paredes del maletero están muy bien definidas. En el doble fondo hay espacio para una rueda de repuesto; pero si elegimos llevar un kit de reparación, podremos situar el piso en una posición 10 cm más baja. Con los respaldos traseros abatidos, la capacidad de carga llega a 1.630 litros.  

Ambos modelos pueden llevar -y de hecho el Toyota solamente puede llevar- sistemas de propulsión híbridos. Por tanto, lucen la etiqueta Eco en el parabrisas; pero en realidad recurren al uso de tecnologías un poco distintas. Como decía, el Corolla Cross es el único que es híbrido y solo híbrido; ya en su quinta generación, la tecnología desarrollada por Toyota es tan veterana y reputada, que a los vehículos de esta clase los llamamos “híbridos convencionales”.

Esta versión en concreto, apellidada como 140H, es efectivamente híbrida con 140 CV de potencia total. Combina un motor atmosférico de gasolina de 1.8 litros, cuatro cilindros y 98 CV con un motor eléctrico de 95 CV, gobernados por una transmisión de tipo variador continuo con engranaje epicicloidal. En efecto, aquella a la que la marca denomina e-CVT y con la que algunos de nosotros tenemos una relación complicada.

Por su parte, el Citroën C5 Aircross Hybrid 136 monta un sistema híbrido ligero de 48V. Integra en su caja automática de doble embrague y 6 velocidades un pequeño motor eléctrico, de solo 29 CV, cuya prioridad no es tanto mover el vehículo por sí solo como apoyar al propulsor térmico, que es el que entrega la potencia total de 136 CV.

Este motor de gasolina es turboalimentado, con 1.2 litros y 3 cilindros. Y como Citroën es una marca de Stellantis, entonces ¿se trata de un motor PureTech como esos que tantos problemas han dado con su correa de distribución? Pues… sí a lo primero y no a lo segundo. Sí a lo primero, porque este es un motor PureTech; pero se trata de un nuevo motor PureTech: esta variante, destinada a los modelos híbridos, ya no lleva distribución por correa sino por cadena. Por tanto, no a lo segundo, porque al no llevar correa, no hay correa que se pueda romper.

Los que sí llevan correa son los PureTech no híbridos, que siguen presentes no solo en el C5 Aircross sino en otros modelos y marcas de Stellantis; aunque, según nos cuentan desde la casa, ahora incorporan una correa mucho más resistente que ya no debería dar problemas. Esa es la teoría; el tiempo lo dirá.

Centrándonos en los protagonistas de nuestra comparativa, hagamos tres puntualizaciones. La primera: ninguno de ellos ofrece en el mercado español versiones con tracción total. La segunda: tampoco disponen de amortiguación adaptativa; aunque el Citroën, fiel a su filosofía, equipa unos amortiguadores con topes hidráulicos, muy orientados al confort. Y la tercera: en estas motorizaciones concretas, tanto el francés como el japonés montan un eje posterior con barra de torsión. La suspensión trasera multibrazo está reservada al Corolla Cross más potente; y en el C5 Aircross, a las versiones híbridas enchufables .

¡No os perdáis nuestro vídeo! En él, Néstor Abarca nos trae sus impresiones de conducción con estos dos modelos y nos habla sobre el rendimento y prestaciones de sus motorizaciones híbridas, el comportamiento dinámico así como las virtudes y defectos de uno y otro SUV cuando salen a la carretera.

Los consumos son, por supuesto, un apartado importante; más aún en los coches híbridos. Dado el distinto enfoque aplicado por sus fabricantes, lo lógico y normal es esperar menores consumos en el Toyota, que es híbrido convencional, en comparación con el Citroën, que es híbrido ligero.

Eso es justo lo que indica la teoría: 5,0 l/100 km para el primero y 5,7 l/100 km para el segundo. Y también la práctica; aunque en ambos casos, con cifras claramente superiores a las homologadas: en nuestro variado recorrido de pruebas, los promedios obtenidos han sido de 6,1 litros para el japonés y 7 litros para el francés.

Tengamos en cuenta que, mientras el Toyota Corolla Cross solo está disponible con motorizaciones híbridas, el Citroën C5 Aircross también ofrece versiones diésel, de gasolina e híbridas enchufables. Por lo tanto, el modelo francés puede ser mucho más barato pero también mucho más caro que el nipón.

Centrándonos en las versiones que nos ocupan, el Toyota Corolla Cross 140H tiene un precio base de 36.499 euros. El nivel de equipamiento superior Style Plus está reservado al modelo más prestacional, el 200H; de manera que el 140H se ofrece únicamente con el equipamiento Style, que trae de serie todo lo que habéis visto a lo largo de nuestra prueba, incluyendo las llantas de 18”. La única opción incorporada por nuestra unidad es el color blanco perlado Iceberg; de manera que en total cuesta 37.299 euros.

El Citroën C5 Aircross Hybrid 136 está a la venta con un precio de partida de 37.315 € y da a elegir entre los niveles de acabado Plus y Max. Este último, al que corresponde la unidad probada, sube a 38.400 euros y aporta la calandra en negro brillante, llantas bitono, faros antiniebla, retrovisores abatibles, tapicerías más cuidadas y un equipamiento de seguridad activa más completo.

Curiosamente, entre las fechas de la grabación del vídeo y la publicación de este artículo, la marca ha dejado de ofrecer el paquete opcional Black Pack en favor llamado Black Top: incluye las barras de techo y otros elementos exteriores en color negro, pero las llantas son de 18” en vez de 19. Con dicho paquete y el color Azul Eclipse, sale por 39.439 euros; son 2.140 euros más que el Corolla Cross de nuestra prueba, pero a cambio, trae un equipamiento algo superior.

Precios de las versiones probadas

• Toyota Corolla Cross 140H Style 37.299 €

• Citroën C5 Aircross Hybrid 136 Max 39.439 €

• Ofertas para Toyota Corolla Cross de segunda mano

• Ofertas para Citroën C5 Aircross de segunda mano