Ferrari, presente y futuro

Ferrari fabricará menos coches a partir del año que viene. Es una decisión que ha comunicado Luca di Montemezolo, presidente de la compañía, en una rueda de prensa en Maranello a la que Coches.net tuvo oportunidad de asistir, y en la que repasó el momento actual de la casa del Cavallino rampante y sus planes de futuro.

Montemezolo dio algunas cifras: Ferrari vendió el año pasado 7.000 coches y en los primeros tres meses de este año 1.800, un 4% más que en el mismo periodo del año anterior. La mitad de estos coches van a Europa y países árabes. La otra mitad, se reparten entre China (30%) y Estados Unidos (20%). Ferrari cerró 2012 con una facturación de 2.433 millones de euros (+8%) y un beneficio neto de 244 millones, un 17,8% más que el año anterior.

A pesar del difícil contexto económico mundial que vivimos, estos resultados son fáciles de entender si tenemos en cuenta que Ferrari es una de las marcas más fuertes y sólidas del mundo, que ha sabido crear clientes fieles en todo el planeta y sobre todo, coches con estilo único, cargados de exclusividad, excelencia, diseño y deportividad que los ha hecho tan deseados a lo largo de su historia.

Con el objetivo de potenciar ese aire selecto y único, Luca di Montezemolo, Presidente de Ferrari, confirmó que a partir del año que viene Ferrari va a reducir su producción, aproximadamente un 2% menos. “Quien compra un Ferrari compra un sueño, y un sueño de exclusividad”, afirma. “Por ese motivo, hemos decidido empezar a fabricar menos coches. Pertenecemos a la cultura del producto exclusivo, de la atención al detalle, de la construcción artesana. Queremos crecer sobre la calidad, no sobre la cantidad”. Esta medida permitirá asimismo no saturar el mercado y aumentar la cotización del mercado de segunda mano, un negocio que tampoco es nimio.

La decisión tomada en Ferrari, aunque pueda parecer sorprendente, es lógica en una empresa que siempre se ha reafirmado en su intención de fabricar coches en series limitadas. La capacidad de producción de la fábrica de Maranello, que combina la automatización con la artesanía en los procesos de montaje, es forzosamente reducida. Así ha sido siempre y por lo que hemos visto y escuchado en Maranello, así será.

La mayoría de empresas en expansión buscan abrir o entrar en nuevos nichos de mercado que le permitan ampliar la facturación y conseguir nuevos clientes. Es lo que hizo Porsche en su momento, por ejemplo, con el lanzamiento de un SUV como el Cayenne, que multiplicó las ventas y dio positivos resultados de la compañía. En Ferrari las cosas funcionan de otra manera. Montemezolo se reafirmó en su intención de seguir manteniendo en los próximos años una gama de modelos con un posicionamiento similar a la actual: “nuestra intención es seguir lanzando cada año un nuevo modelo, y seguir ofreciendo diferentes Ferraris para diferentes Ferraristas. Actualmente tenemos una completa gama de coches con 12 u 8 cilindros, con tracción a dos o cuatro ruedas (Ferrari FF), biplazas o cuatro plazas. No queremos entrar en nuevos espacios de mercado, por eso no vamos a hacer un SUV, ni un Ferrari familiar ni una berlina cuatro puertas. Lanzaremos modelos nuevos en el posicionamiento que ya conocemos”.

Todas los constructores de automóviles, cuando hablan de futuro, hablan de sostenibilidad. La reducción de consumo y emisiones es un objetivo de obligado cumplimiento, y al parecer, Ferrari no es una excepción. Los responsables de la marca nos presentaron en Maranello unas gráficas en las que se muestra cómo han evolucionado hacia la eficiencia los motores de Ferrari , ya sean 12 cilindros (del 612 Scaglietti hasta el F12 Berlinetta) u 8 cilindros ( desde el 360 Módena hasta el remodelado Ferrari California). El hecho de que uno de los principales mercados de Ferrari sea Estados Unidos, especialmente sensible en algunos estados respecto a las emisiones, también ha influido en esta positiva evolución hacia modelos más sostenibles. Ahora bien, en Ferrari dejaron bien claro que el objetivo que se plantea la marca con el lanzamiento de un nuevo modelo es siempre mejorar las prestaciones del motor. “No construiremos un nuevo modelo con el objetivo de reducir las emisiones, sino con el objetivo de mejorar sus prestaciones, aunque sí lo haremos más eficiente”. En este sentido, Ferrari se mantiene fiel a su filosofía, que a lo largo de la historia ha identificado a esta empresa como una excelente fabricante de motores de altas potencia.

El claro ejemplo de todo lo dicho y de hacia dónde van a ir los tiros en Ferrari en los próximos años lo tenemos en el nuevo LaFerrari. Por un lado, no sólo se trata del Ferrari de serie más rápido y potente de la historia, con 963 CV, sino también el que incorpora más sistemas que ayudan a la eficiencia energética. Su aerodinámica activa, el bajo peso que se consigue con su chasis monocasco de fibra de carbono y la incorporación de un sistema KERS de recuperación de energía cinética le permiten emitir relativamente poco CO2. El LaFerrari es un claro ejemplo de la inversión en I+D de esta firma italiana, que destina el 18% de sus beneficios a desarrollo de producto. Esta tecnología, por supuesto, deriva de los avances de la Scuderia en F1, que todos conocemos. Según han anunciado, tienen previsto invertir 250 millones de euros en I+D durante los próximos cinco años para seguir reduciendo las emisiones de los nuevos modelos.

El LaFerrari es un coche difícil de fabricar, como nos estuvieron explicando en la fábrica. En buena parte por el proceso de construcción del chasis de fibra de carbono. Cada chasis requiere una semana de trabajo en Maranello, ya que es una tarea que no puede automatizarse si se buscan los mejores resultados.

Ferrari fabrica 1 chasis de LaFerrari por día, hasta completar los 499 que están previstos vender. Esa dificultad y lentitud para trabajar el carbono es la que hace que Ferrari siga apostando por el aluminio para construir sus coches, ya que además de ser ligero, permite una mayor automatización en la cadena de montaje.

¿A quién no le gustaría trabajar en una empresa como Ferrari? Ese es el sueño de muchos jóvenes que viven en la región de Emilia Romagna y de toda Italia. La fábrica de Maranello es un ejemplo de cuidada inversión en recursos humanos.

Los 3.000 trabajadores que acuden cada día a Maranello (con una edad media de 38 años, casi el 90% hombres) tienen a su disposición numerosas facilidades para mejorar sus condiciones laborales y su calidad de vida en general.

La empresa ofrece desde planes de salud para el trabajador, pasando por programas de fitness o campos para los hijos de los trabajadores, además de un completo programa de formación que le permite avanzar profesionalmente dentro de la empresa. Es lo que la marca italiana denomina Fórmula Uomo, y que Montezemolo puso en práctica desde el primer momento en que presidió la compañía. Esta filosofía, según comentan los responsables de Ferrari, es la que permite llegar a la excelencia en la fabricación de sus coches, con un componente tecnológico y artesanal a partes iguales.

Montezemolo también comunicó que este mismo año contratarán otros 250 trabajadores para la fábrica de Maranello e invertirán 100 millones de euros para la mejora de las condiciones laborales. Esta decisión puede parecer contradictoria teniendo en cuenta que la producción de Ferrari va a reducirse en los próximos meses, pero se explica ya que en Maranello paralelamente se necesita mano de obra para la fabricación de los motores V6 de Maserati, que disponen de una planta de montaje exclusiva en las instalaciones de Maranello.

Otra de las patas de la empresa es el márketing, y esto es algo que los italianos saben hacer muy bien. La marca Ferrari es una de las más valoradas del mundo, y actualmente reporta a la empresa unos beneficios de 100 millones de euros anuales.

Cada minuto se venden en el mundo 95 artículos con la marca del cavallino rampante y se llevan vendidos 460 millones de artículos desde que empezó esta forma de negocio. Ferrari trabaja intensamente para incrementar el valor de la marca, como demuestra la apertura del Ferrari World de Abu Dhabi, el primer parque temático dedicado a la marca de Maranello.

“Después de mi familia, Ferrari es la cosa más importante de mi vida” afirmó Luca di Montezemolo en la conferencia de Maranello. Está claro que el nombramiento de Montezemolo a Ferrari, hace más de dos décadas, ha favorecido un claro avance en esta compañía.

El discurso que realizó en Maranello, frente a centenares de periodistas de todo el mundo, junto con la organización de unas jornadas para conocer más a fondo algunos aspectos de la fábrica, es una clara demostración del buen camino que sigue llevando Ferrari, que no parece estar expuesta a un crisis de ventas en los próximos años, sino todo lo contrario. Como todo en esta vida, es fruto de la pasión, y de esto saben un rato en esta marca italiana.