Ford Shelby GT350 Mustang

Ford resucita las siglas GT350 acuñadas por Carroll Shelby para el nuevo Mustang. En el Salón de Los Angeles de 2014 la firma del óvalo azul desvelará el nuevo Shelby GT350 Mustang, la versión más enfocada a las altas prestaciones y a los circuitos de la sexta generación del pony car por excelencia.

El motor es el gran protagonista de esta creación, se trata del V8 atmosférico más potente que Ford ha creado jamás para un coche de calle. Se trata de un 5,2 litros que rinde más de 500 CV y 542 Nm de par. La característica que más destaca de este motor inspirado en la competición es su cigüeñal de tipo flat-plane.

También son toda una demostración de intenciones la caja de cambios manual de 6 relaciones, el sistema de amortiguación MagneRide y el diferencial de deslizamiento limitado Torsen que equipa de serie.

Las llantas de 19" tienen una anchura de 10,5" en el tren delantero, 11" en el trasero y están calzadas con neumáticos MICHELIN Pilot Super Sport. Detrás de ellas equipa un potente equipo de frenos con discos de 394 mm delante y 380 mm detrás. Por lo que respecta a las pinzas de freno, delante son de 6 pistones y detrás de 4.

En el interior sigue el diseño marcadamente racing que presenta en el exterior de la mano de su kit de carrocería específico. Asientos deportivos Recaro y volante con la parte inferior de su aro plana son algunos de los detalles inspirados en la competición que se encargan de ambientar el habitáculo del nuevo GT350.

Ford lo ha concebido a imagen y semejanza del GT350 original para que sea un coche que brille tanto en una carretera secundaria como sobre el asfalto del circuito más exigente del mundo.

El GT350 original es hoy en día una cotizada pieza de colección para los amantes del Ford Mustang. Una unidad de primera serie, o sea de 1965, en estado de concurso ronda un valor próximo a los 250.000 euros.

Tras el éxito logrado por Carroll Shelby con los Cobra basados en el AC Ace británico el siguiente proyecto de embergadura en el que se involucró fue en el desarrollo de una versión picante del recién presentado Mustang.

Así fue como en 1965 nació el Shelby GT350 un coche con el que Ford ofrecía a sus clientes la posibilidad de disfrutar de un rápido deportivo para disfrutar tanto en la carretera como en el circuito. Para darle forma Shelby desmontó hasta el último tornillo del Mustang para a partir de ahí dar forma a un coche casi de competición. Se eliminó todo el peso posible hasta lograr 1.265 kilos. Se ensancharon los pasos de ruedas y montó llantas de 7" de anchura, amortiguadores Koni, frenos de mayor tamaño, caja de cambios Borg Warner T-10 de 4 relaciones...

A partir de la versión HiPo del motor V8 de 4,7 litros que erogaba 271 CV de origen Carroll Shelby sacó a relucir su maestría en la preparación de motores hasta lograr 306 CV de la mano de un carburador Holley 715 CFM con cuatro cuerpos.

Las versiones de competición, los GT350R llegaron a rondar los 340-360 CV. Según los datos de la época el GT350 original era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y alcanzaba una velocidad punta de 240 km/h.