Hyundai Elantra 1.6 CRDi 136 CV DCT Style

Cuando el fabricante coreano anunció la incorporación de un motor diésel a la nueva generación de su Elantra, quedó evidente que pretendía dar un soplo de aire fresco al modelo en el mercado europeo. Pero además del motor 1.6 CRDi de 136 CV que seguro que muchos amantes de Hyundai estaban esperando, la berlina compacta ha recibido una puesta al día estética. Gracias a este rediseño, la marca lo ha dotado de un aire más actual y lo ha introducido en la línea visual de sus modelos más recientes. A ello se suma una mayor sobriedad interior y mejores acabados.

La buena relación precio-equipamiento es una de sus ventajas ya que, si bien esta versión con cambio automático y acabado Style cuesta 28.700 euros (sin opcionales), dicha cantidad se reduce a 24.400 euros incluyendo los descuentos promocionales y por financiación actuales. Dentro de su abanico de rivales se hallan modelos como el Seat Toledo, el Citroën C-Elysée o el Renault Fluence.

Para comenzar a repasar el exterior de la renovada berlina coreana hay que señalar que tiene una longitud de 4,57 metros, una altura de 1,45 m y una anchura de 1,80 m. Estas proporciones suponen un crecimiento con respecto a la generación precedente, con un aumento de 2 cm de largo y de 2,5 cm de ancho. Este sedán con un toque cupé conserva su estructura de tres volúmenes y, si bien no ha recibido una transformación en profundidad en lo que respecta a su apariencia, lo cierto es que los diseñadores de Hyundai han aplicado algunas actualizaciones que refrescan su estética.

El frontal del coche ha evolucionado, con la incorporación de una nueva parrilla que adopta la forma hexagonal tan habitual en otros modelos de la firma coreana de los últimos tiempos. A ello hay que sumar la llegada de nuevas ópticas, de forma más rasgada que antes, con tecnología HID e iluminación diurna de tipo LED. Siguiendo con las novedades, destaca la presencia de unas tomas de aire, concebidas para optimizar la aerodinámica del vehículo, objetivo que comparten con la cobertura de bajos y el spoiler posterior.

Al observar la vista lateral del vehículo se aprecia su línea estilizada, con una suave caída del techo hacia la zaga. Hay que destacar que, en este acabado Style (el superior de la gama), los tiradores de las puertas son cromados y las llantas son de aleación de 17 pulgadas. En esta unidad, la pintura metalizada (450 euros) forma parte del equipamiento opcional.

Una vez dentro del habitáculo puede verse que Hyundai ha aplicado novedades más evidentes que las del exterior del coche. Por ejemplo, el diseño es más sobrio y se han abandonado las líneas curvas, que dejan paso a un aspecto dominado por las líneas horizontales. La calidad de acabados se ha optimizado, con plásticos y materiales mejor ajustados.

También es más sencillo guardar pequeños objetos gracias al incremento de espacios con este objetivo. El tamaño de la nueva pantalla táctil de 5 pulgadas (antes inexistente) del sistema de infoentretenimiento es más bien pequeño para los tiempos que corren. Llama la atención que, al menos en estos primeros meses de comercialización del modelo, no es posible contar con navegador. El puesto de conducción es confortable, con un buen mullido del asiento y una buena sujeción del torso.

En la segunda fila pueden viajar dos adultos de estatura media de forma muy cómoda y holgada, aunque para un tercero la plaza central es más estrecha y de mullido más firme. No hay que pasar por alto que los ocupantes traseros de más de 1,80 m de estatura notarán algo justa la altura al techo debido al diseño exterior del coche. La capacidad del maletero es de 458 litros, nada espectacular aunque dentro de la media del segmento.

El nuevo Elantra, en la terminación tope de gama de este unidad, cuenta con un amplio equipamiento de serie que incluye airbags frontales, traseros, de cortina y de rodilla para el conductor, control de estabilidad, apertura automática “manos libres” del maletero, asientos delanteros ventilados y calefactables, tapicería de cuero, cámara de aparcamiento trasera, conexiones USB y Aux así como Bluetooth, si bien no cuenta con sistema para utilizar aplicaciones de Smartphone desde el dispositivo multimedia.

También dispone de climatizador automático bizona, sistema de ayuda de arranque en pendientes, control de crucero, equipo de audio Radio CD MP3 con seis altavoces, llave inteligente con botón de arranque y detector de proximidad, volante multifunción de cuero, sensores de aparcamiento delantero y trasero, sensor de lluvia, sistema de detección de ángulos muertos, sistema de parada y arranque automático y techo solar practicable.

Para esta prueba, la mecánica elegida ha sido la más anhelada en el mercado europeo. Puesto que hasta el momento el Elantra solo se ofrecía en versión de gasolina, la llegada del motor diésel que mueve esta unidad supone un fuerte impulso para el modelo de Hyundai. Se trata del propulsor 1.6 CRDi de 136 CV de potencia y un par máximo de 300 Nm entre 1.750 y 2.500 rpm. Su entrega de fuerza en la zona baja del cuentarrevoluciones es correcta, aunque se agradecería algo más de ímpetu.

En cualquier caso, a medida que va subiendo de vueltas, este comportamiento mejora considerablemente. De hecho, a partir de 2.000 rpm se comporta de forma muy satisfactoria y se estira muy bien. En esta unidad, el motor está asociado a una caja de cambios automática DCT de doble embrague y siete velocidades. Dicha combinación de propulsor y cambio es obligatoria para este acabado Style, de que cabe recordar que es el más equipado de la gama.

Esta transmisión automática se caracteriza por su rapidez de funcionamiento, así como por completar los cambios de marcha de manera suave y progresiva, lo que acentúa el confort durante la conducción. El consumo es uno de los puntos fuertes del motor, ya que registra una media homologada de 4,1 litros cada 100 km. Una vez finalizada esta prueba, la cifra fue de 5,3 litros, un valor que sigue siendo muy competitivo. En cuanto a prestaciones, su comportamiento es bastante razonable, pues necesita 11,0 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h.

Las mejoras en rigidez torsional de la carrocería, unidas a los cambios en la suspensión trasera, dan lugar a una dinámica más estable y a una mayor sensación de control y seguridad al volante. Los balanceos del Elantra en los apoyos son mínimos y, al mismo tiempo, ha subido un escalón en cuanto a confort de marcha. Por su parte, la amortiguación absorbe de forma más eficaz las irregularidades del asfalto.

En lo que respecta a la dirección, tiene un tacto agradable y suave, a lo que hay que sumar una importante precisión. El sedán coreano cuenta con una buena insonorización, tanto en lo que respecta al ruido proveniente del motor como del exterior, lo que se agradece sobre todo a la hora de realizar largos viajes por autopista. En este tipo de vía, además, pone de manifiesto un importante aplomo que lo convierte en un buen compañero de viaje.

El vehículo cuenta con tres modos de conducción que modifican el comportamiento de diferentes parámetros según la voluntad del conductor. En modo Normal, el sistema busca un equilibrio general, mientras que en modo Eco se sacrifica cierto nivel prestacional para mejorar el consumo y las emisiones. El tercer modo es el Sport, en el cual se logra una mayor capacidad de aceleración por parte del motor, un cambio de marchas más rápido y una dirección endurecida.

En definitiva, se trata de un vehículo que combina una apariencia elegante y actualizada con un muy buen equilibrio precio-equipamiento y con un habitáculo práctico y racional. Además, al recibir este motor diésel crecen sus posibilidades y se adapta a las preferencias de los conductores de nuestro país en este segmento. Esta nueva generación es aún más cómoda que la anterior, a lo que hay que sumar una dinámica más estable.