Nissan IDx Freeflow y IDx Nismo Concept

Tras la presentación ayer del GT-R Nismo, Nissan sorprende en el Salón del Automóvil de Tokio con los conceptos IDx, dos compactos en versiones de calle y deportiva creados a partir de las opiniones de lo que Nissan llama ‘nativos digitales’. Los Nissan IDx Freeflow y IDx Nismo reflejan los gustos de una generación de jóvenes nacidos después de 1990 y surgen de una nueva forma de desarrollar coches basada en la co-creación conjunta del fabricante con sus clientes.

Tanto la versión Freeflow como Nismo de estos conceptos se basan en una carrocería compacta de tres volúmenes de 4,1 metros de largo, 1,7 m de ancho (1,8 m en el Nismo) y 1,3 de alto. Llama la atención su morro alargado y una zaga corta, de estilo coupé, con guiños que nos recuerdan a épocas pasadas, como los espejos retrovisores situados en el capó. La carrocería común está diseñada para que el IDx pueda tener diversas apariencias y una alta personalización a través de los parachoques delantero y trasero o los paneles de las puertas.

Los ‘nativos digitales’ también han apostado por un interior flexible. Por dentro estos dos nuevos modelos destacan por un diseño sencillo y por incorporar la cantidad justa de funciones y accesorios pero sin renunciar a la calidad de la piel o al estilo refinado del cuadro de instrumentos.

Los jóvenes que han participado en el proceso de creación de este compacto para cuatro pasajeros han pensado en un coche en el que pudieran sentirse como en el salón de su casa con un grupo de amigos. Se combinan elementos sencillos, prácticos y cotidianos con otros ingeniosos que le dan un toque de originalidad. En una sobria consola con acabados metálicos luce un moderno reloj con grandes dígitos junto con otro analógico más clásico y la tapicería de los asientos es de tela vaquera.

Por fuera se combinan los colores blanco y marrón claro como si de una camiseta blanca y un pantalón de color caqui se tratara. El conjunto se completa con unas llantas cromadas de 18 pulgadas. El Nissan IDx Freeflow podría ir equipado con los motores 1.2 o 1.5 litros junto a una transmisión variable continua CVT.

El rojo, blanco y el negro son los colores predominantes elegidos para la alternativa más deportiva del concepto IDx. Retrovisores redondos también sobre el capó, ópticas delanteras y traseras específicas, paneles de carbono, un difusor trasero, una toma de aire en el capó, un alerón en el techo y unas salidas de escape laterales dotan a este Nissan IDx Nismo de mucho carácter, potenciado a su vez por una carrocería algo más ancha que el Freeflow. La herencia deportiva de la marca se reflejan en detalles como la doble franja roja en el lateral y monta neumáticos 225/40 con llantas de 19 pulgadas.

Por dentro también incita a la competición con asientos de alcántara en rojo, volante achatado, el uso de fibra de carbono en el salpicadero o gracias a los dos relojes que simulan cronómetros antiguos de mano.

Para este concepto los ingenieros han pensado en el motor 1.6 litros de inyección directa –el mismo que monta el Juke Nismo de 200 CV- unido a una transmisión continua variable CVT deportiva de seis velocidades con posibilidad de cambio manual.

Así es el deportivo que se imaginan estos jóvenes nacidos en la época digital y que han crecido jugando a juegos de simulación de carreras, un coche marcado por lo clásico pero también con un aspecto ‘cool’ o moderno, de aspecto atemporal pero con una personalidad propia.

Nissan IDx Freeflow o IDx Nismo, dos nuevos enfoques de diseño por los que apuesta Nissan para el futuro. ¿Y por qué IDx? La denominación elegida por Nissan tiene su significado, donde ‘ID’ equivale a ‘identificación’, en relación a las cosas que todo conductor le gustaría que tuviera su coche, y donde ‘x’ es la variable que representa todos los valores y sueños que han surgido en esta nueva forma de comunicación entre Nissan y estos jóvenes clientes.