Seat Ateca: Al volante de todas las versiones

Ya le tenemos aquí. Esta semana llegarán a los concesionarios las primeras unidades del nuevo Seat Ateca. Nosotros, en Coches.net ya os contamos muchas cosas de él en este video de la presentación estática del modelo y en este otro de una primera presentación dinámica, todavía con coches de pre-serie. Esta vez hemos asistido a la presentación dinámica oficial internacional celebrada en Barcelona donde hemos tenido ocasión de conducir diferentes unidades de la gama, ya con unidades de serie.

Lo primero que hemos podido hacer es corroborar las impresiones sobre habitabilidad que habíamos tenido en la presentación estática. El espacio en las plazas traseras, tanto en hueco para las piernas como en altura libre al techo van a convertirse en referencia dentro de los SUV compactos. Pese a que el Ateca, con sus 4,36 metros de largo, es uno de los coches más cortos del segmento (el Nissan Qashqai mide 4,37 metros, el Renault Kadjar 4,44 y los Hyundai Tucson y Kia Sportage se van casi a los 4,50 metros), su habitáculo está muy bien aprovechado.

El maletero es otra de sus virtudes. Tiene una capacidad de 510 litros en las versiones de dos ruedas motrices con lo que supera a los 503 litros del Sportage, los 488 del Tucson, los 472 del Kadjar y los 430 del Qashqai. Las versiones más equipadas Xcellence podrán llevar accionamiento automático del portón trasero con la posibilidad de abrirlo y cerrarlo mediante un movimiento del pie por debajo del parachoques trasero. Las versiones de tracción a las cuatro ruedas, con un eje trasero más grande y sofisticado, pierden 30 litros de maletero y se quedan en 485 litros.

La parte delantera del habitáculo es casi calcada a la del León, modelo con el que el Ateca comparte tanto la plataforma como los motores. El diseño del salpicadero es muy parecido, con la consola ligeramente orientada al conductor, una pantalla de 8 pulgadas en las versiones más altas (de 5 para las menos equipadas), y una mayor sensación de espacio que en el León. Me explico. A mi, particularmente, no me gusta el diseño interior del León ya que lo encuentro excesivamente macizo. Además, como me gusta conducir en una posición baja, el salpicadero del León me agobia un poco por su contundencia y su altura. En el Ateca, al ir sentado más alto -la posición más baja del asiento es más alta que la más alta del León, esa sensación de "agobio" que, insisto, es una sensación muy personal, desaparece.

La calidad del habitáculo no es espectacular. Seat ha usado materiales de segmento C, sin alardes en la calidad de los mismos. En ese sentido creo que estará un pelín por debajo de algunos de sus rivales que han trabajado mucho este apartado en el cambio de generación. El Qashqai, por ejemplo, tiene una calidad percibida muy buena aunque luego el ajuste sea otro cantar. En este caso, creo que la calidad de fabricación del Ateca tiene mejor pinta, con un ensamblado correcto salvo en algunas piezas de la parte baja como, por ejemplo, la tapa de la guantera, excesivamente simple. Hay que recordar que el coche no se fabrica en Martorell sino en la República Checa.

En la presentación pude probar algunos elementos de seguridad que incorpora el Ateca -la mayoría son opcionales- como, por ejemplo, las cámaras de 360 grados. Éstas ya me parecieron muy buenas el día de la presentación del modelo pero ahí no pude verlas funcionar más que en estático. Esta vez, conduje un Ateca "a ciegas" en un pequeño circuito de conos, con los cristales tapados y usando sólo la imagen cenital de la cámara, fruto de combinar las imágenes que captan las cuatro cámaras instaladas en el frontal, el portón trasero y las bases de los retrovisores exteriores. La verdad es que el resultado es muy satisfactorio. El software de proceso de imágenes trabaja bien y con rapidez y estas cámaras resultan muy útiles para aparcar, circular fuera de carretera o maniobrar en espacios reducidos.

También pude probar los sistemas de mantenimiento de carril, que funciona como el del León o el del Alhambra y no resulta tan intrusivo como otros de otras marcas que se empeñan en mantener el coche centrado en el carril (éste sólo interviene cuando se está a punto de pisar la línea y mueve el volante para devolver el coche al carril) y el control de crucero adaptativo, que funciona sin problemas. El Ateca puede montar asimismo un asistente de atascos, que acelera y frena el coche de manera automática cuando circula por una vía de más de un carril y por debajo de 50 km/h.

Otras ayudas a la conducción son el detector de ángulo muerto, la alerta de tráfico cruzado trasera, que detecta los coches que se acercan tangencialmente cuando se sale de un aparcamiento marcha atrás (típica situación del parking de supermercado), el reconocimiento de señales de tráfico y el asistente de aparcamiento automático, un sistema que ya conocemos de otros modelos de la marca como el Alhambra. La marca ofrece también un gancho de remolque eléctrico.

Seat lanzará una completa gama de versiones del Ateca. En gasolina, el motor base, que no pude conducir ya que no había unidades en la presentación es el tres cilindros de un litro y 115 CV, disponible sólo con tracción delantera y cambio manual. El motor gasolina que más se venderá será el 1.4 TSi de 150 CV con sistema de desconexión automática de dos de los cilindros cuando no son necesarios.

Pude probar este motor más a fondo que en la primera ocasión en que conduje el Ateca -esta vez no iba con un ingeniero al lado ni tenía la necesidad de producir un video- así que pude buscar algo más los límites del coche y exprimir más el motor. La verdad es que el propulsor de gasolina es ideal para el Ateca. Tiene una potencia respetable pero, sobre todo, es muy elástico, empuja desde bajas revoluciones y consigue unos consumos bastante lógicos. En la prueba, gastó 6 litros en autopista a velocidad constante y 9,6 en carreteras de montaña exigentes y buscando probar el chasis. En condiciones de uso normales debe estar sobre los 7 litros.

Este motor está disponible con tracción delantera o integral y con cambio manual o DSG con ambos tipos de tracción. Yo conduje una unidad de tracción delantera y cambio manual que me gustó mucho. El Ateca es uno de los SUV más dinámicos del segmento -algo que cabía esperar tratándose de un Seat-, tracciona muy bien pasando la potencia al suelo con eficacia, balancea muy poco y transmite una gran confianza. Además, el conjunto motor-cambio le va como anillo al dedo para aprovechar ese dinamismo del chasis. Un coche, por tanto, de rodar estable en autopista y que no le hace ascos a las curvas cerradas de una carretera de montaña.

El día anterior conduje, también en carreteras de montaña, un TDi de 150 CV también con cambio manual que me gustó algo menos. El motor va bien, sobre todo una vez superadas las 2.000 vueltas pero se acaba antes que el gasolina y permite estirar menos. Aún así, tiene unas recuperaciones notables. Lo que no me gustó tanto fue el comportamiento del chasis, más tendente al subviraje y al rebote del eje delantero en los apoyos fuertes a consecuencia del mayor peso que soporta el eje frontal. Mi impresión fue que el 1.4 TSi de gasolina está más equilibrado que el diésel aunque también es cierto que la carretera por la que circulé con el TDi estaba en peor estado, más deslizante y bacheada.

De esta variante diésel de 150 CV se ofrecen versiones con cambio manual de dos y cuatro ruedas motrices y de tracción delantera también con cambio automático. La combinación de cambio DSG y tracción integral se deja para la única versión con motor diésel de 190 CV La gama se completa con un diésel de 115 CV de tracción delantera y cambio manual.

Seat venderá el coche en tres niveles de acabado: Reference, Style y Xcellence aunque la disponibilidad del primero de ellos se retrasará hasta finales de año. Por este motivo, en la lista de precios que publicamos a continuación no hay todavía precios de estas versiones aunque ya están aprobados y costarán 2.250 euros menos que los equivalentes con acabado Style.

Precios: Seat Ateca 1.0 TSi Style: 23.690 € Seat Ateca 1.4 TSi Style: 25.730 € Seat Ateca 1.4 TSi Xcellence: 28.550 € Seat Ateca 1.4 TSi DSG Xcellence: 30.660 € Seat Ateca 1.4 TSi 4Drive Xcellence: 31.170 € Seat Ateca 1.6 TDi Style: 26.370 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV Style: 28.130 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV DSG Style: 30.240 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV 4Drive Style: 30.890 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV XCellence: 30.940 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV DSG XCellence: 33.060 € Seat Ateca 2.0 TDi 150 CV 4Drive Xcellence: 33.560 € Seat Ateca 2.0 TDi 190 CV DSG 4Drive Xcellence: 37.790 €

Sobre estos precios hay que explicar que Seat ofrece un descuento de salida que, sumado al PIVE y a un descuento extra por financiar con la marca, dejan el precio final del 1.0 Tsi Style en 18.800 euros y el del diésel 1.6 en 21.500 euros, tarifas muy competitivas que calcan casi a las del Nissan Qashqai al que el Ateca está dispuesto a discutir el liderato del segmento C SUV en nuestro mercado.

A nivel de equipamiento, la versión Style lleva faros antiniebla, asistente de cambio de carril (que avisa pero no actúa sobre el volante), cambio automático de luces cortas a largas, detector de fatiga, asistente de frenada de emergencia, llantas de aleación de 17 pulgadas, volante en piel, control de crucero, sensores de aparcamiento traseros, climatizador, retrovisores plegables eléctricamente, equipo de audio con pantalla de 5 pulgadas y USB, sensores de lluvia y faros y freno de mano eléctrico entre otros muchos elementos.

La versión Xcellence añade pasos de rueda de color negro, cristales oscurecidos, llantas de 18 pulgadas, faros de LED, sistema de acceso y arranque sin llave, asientos deportivos con tapicería de Alcantara, equipo de audio con pantalla de 8 pulgadas, cámara de visión trasera y Seat Driver Profile que modifica la respuesta de dirección, motor y, en las versiones DSG, del cambio de marchas.

Las opciones, de precio bastante justado son el Connectivity Box, con cargador de móviles por inducción y amplificación de la señal de antena (200 euros), el detector de ángulo muerto y de tráfico cruzado trasero (380 euros), el portón trasero eléctrico (350 euros), la cámara de visión de 360 grados (750 euros o 550 en los Xcellence), el paquete Advance Confort & Driving con el asistente de atascos, el control de crucero activo, el sistema de reconocimiento de señales y la protección de peatones (215 euros), el doble piso de maletero (135 euros), la apertura de portón con el pie (490 euros), el asistente de aparcamiento automático (380 euros), el sistema de conectividad de móviles Seat Full Link (250 euros), la calefacción programable (950 euros), el parabrisas térmico (180 euros), la tapicería de piel conasientos calefactables (1.200 euros y 900 en los Xcellence), el navegador normal (820 euros en el Style ya que incluye la pantalla de 8 pulgadas y 400 en el Xcellence), el navegador Plus (1.775 o 1.335 euros) y la pintura metalizada (550 euros). Además, buena parte del equipamiento extra del Xcellence se puede montar opcionalmente en las versiones Style.

Para completar nuestro artículo, compartimos con vosotros este interesante vídeo en el que Seat nos describe el proceso de diseño de este SUV tan esperado. Un proceso que, como veréis, no es trivial precisamente: los especialistas de la marca han dedicado 1.400 días (es decir, casi cuatro años) para crear los bocetos en papel, los modelos por ordenador y los prototipos en arcilla que han dado forma al automóvil que ya hemos conducido en coches.net, además de trajabar en la definición de los interiores del vehículo y de las gamas de colores que forman parte del catálogo del nuevo Seat Ateca.