Toyota Land Cruiser

El Land Cruiser es uno de los últimos todoterreno auténticos que quedan en el mercado y aunque el mundo del off-road camina indefectiblemente hacia su asfaltización definitiva, Toyota ha decidido dar un nuevo impulso a su icono off-road con un notable rediseño que le permitirá mantenerse en el mercado una buena temporada.

Los cambios en el frontal son obvios. El coche estrena una parrilla más contundente con cinco barras verticales que parecen "clavadas" en el parachoques y enmarcadas por una gruesa franja cromada que dibuja otras dos barras, inclinadas, en ambos extremos. Estas dos barras se apoyan en los nuevos faros, más grandes y con una lágrima de LED en su parte inferior para los faros de día.

También cambian los parachoques, con un protector inferior nuevo, el espacio para la matícula y los antiniebla que ahora van empotrados directamente en el parachoques y disponen de un marco cromado.

En la parte trasera también hay cambios aunque menos notables. Se mantiene el diseño del portón sin la rueda de recambio -en esta generación va debajo del vehículo- pero cambia el de los pilotos -aunque no la forma- que pasan a ser de LED. También gana en tamaño el adorno cromado sobre la placa de matrícula, más grueso y más ancho.

En el habitáculo, el nuevo Land Cruiser modifica, en sus versiones más equipadas, la disposición de los mandos de la consola, con un equipo de climatización nuevo y un navegador más sofisticado que ha obligado a rediseñar las salidas centrales de aire. También es nueva la instrumentación, con una grafía diferente y una pantalla central TFT de 4,2" dónde la información se presenta de manera más completa -en especial la del funcionamiento de los elementos off-road- y con unos pictogramas más modernos, elaborados y atractivos.

Toyota asegura que ha modificado alguno de los materiales y algunos de los mandos como el de selección de los modos off-road para aumentar la sensación de calidad percibida en el habitáculo.

A nivel mecánico no habrá grandes cambios. La marca mantendrá el motor diésel de cuatro cilindros, tres litros y 190 CV disponible hasta la fecha y las opciones de cambio manual y automático así como el V6 de gasolina, de ventas absolutamente testimoniales (en España sólo se vende si existe un pedido en firme). También se mantiene la gama desdoblada en versiones de 3 y 5 puertas, la primera de cinco plazas y la segunda de siete con una tercera fila que se abate contra el piso del maletero. Las dimensiones no cambian salvo la longitud, que crece en 2 cm en ambas versiones como consecuencia del incremento de tamaño de los nuevos parachoques.

Toyota no ha comunicado el detalle de la gama y de los equipamientos que llevará este nuevo Land Cruiser ni su fecha exacta de comercialización pero teniendo en cuenta que se presentará en el Salón de Frankfurt y que los cambios son mínimos, la llegada del coche se producirá antes de final de año.