Ford Ranger 2.2 TDCI XLT: Duro rival

La llegada del Ford Ranger pone las cosas difíciles al hasta ahora líder, casi indiscutible de este segmento, el Volkswagen Amarok. El Ranger es un coche totalmente nuevo que nada tiene que ver con su antecesor y que permite a Ford entrar pisando fuerte en esta categoría. Dispone de un motor 2.2 TDCI de 150 cv y, dinámicamente, es mucho más eficaz en cualquier tipo de terreno que el anterior modelo. Está más cerca de un TT que de un coche de estas características. Ahora es más largo, más ancho y más alto que la anterior versión. Todo ello le permite ser el pick-up más largo del mercado y ganar en habitabilidad, especialmente para las piernas de los ocupantes de la fila trasera. Un dato especial: es la única pick-up que ha conseguido cinco estrellas en el test EuroNCAP. Va a ser, o mejor dicho, es un duro rival para la competencia. Fotos: Eloy García

El nuevo Ranger supera al anterior modelo en prácticamente todos los aspectos y la estética no es una excepción. Se trata de un pick-up, a nuestro gusto, con un estilo atractivo, muy mejorado en este aspecto y que hace que no pase desapercibido. De ahí las miradas que "te caen" cunado lo conduces. Y es que en Ford han acertado plenamente en este aspecto, como también lo ha hecho en la parte técnica y en la composición de su interior. La "cabina" (doble en este caso) es 5 cm más ancha y otros tantos más alta. Así, el nuevo Ranger ofrece un mayor espacio a sus ocupantes, tanto en las plazas delanteras -con unos asientos más confortables-, como en las traseras en las que encontraremos mayor distancia respecto a los asientos delanteros y algo más de altura al techo. El puesto de conducción es cómodo, natural y transmite sensación de "familiaridad" como si lo hubiéramos conducido siempre. El diseño del tablier y del cuadro de instrumentos está a la altura de un turismo y la calidad de los materiales también. La instrumentación es de fácil lectura y de completa información. El centro del tablier está presidido por la pantalla digital y todos los mandos del vehículo referentes a la calefacción, aire, radio, etc. En la consola central destaca la palanca de cambio, de cómodo uso, y el botón para insertar la tracción total con y sin reductora. No faltan detalles como el apoyabrazos central, la nueva guantera a la izquierda del conductor, un espacio para guardar las gafas en el techo y huecos en el suelo de la parte trasera. Uno de los pocos puntos negativos que podemos notar desde su interior es la visibilidad trasera. En nuestra opinión, en este modelo se hacen, casi imprescindibles, los sensores de aparcamiento. Exteriormente también crece y se convierte en el pick up más largo de todos. Sin embargo, el espacio de carga de la caja se mantiene en los 150 cm de longitud, aunque en anchura ha ganado seis centímetros y sólo es superado en este aspecto por el Amarok. En cuanto a capacidad de carga, el fabricante anuncia 1.152 kg de carga útil.

El motor 2.2 TDCI Duratorq de que disponía nuestra unidad de pruebas no es radical ni muy potente, pero si proporciona al nuevo Ranger una respuesta exquisita a bajo y medio régimen sin decepcionar cuando la aguja sube a la parte alta del cuentavueltas. En general, se trata de un motor muy efectivo que hace agradable la conducción. Los 150 cv a 3.700 rpm y un par máximo de 375 Nm entre 1.500 y 2.500 rpm de que dispone, son más que suficientes para afrontar cualquier recorrido con una excelente respuesta. Dinámicamente, el Ranger ha mejorado mucho gracias a que la suspensión independiente delantera pasa a ser de doble triángulo con muelles y amortiguadores, olvidando las barras de torsión. El tren trasero mantiene el esquema de eje rígido con ballestas pero se ha aumentado en 22 cm la batalla. Todo ello hace que el comportamiento del nuevo Ranger sea mucho mejor y que hayan desaparecido los desacuerdos entre el tren delantero y trasero, como ocurría anteriormente. Ahora se muestra más estable, aplomado y equilibrado en sus reacciones. La nueva dirección de cremallera también colabora a ello.

Esta es la sensación que nos ha dado el nuevo Ranger cuando lo hemos probado. Si bien es verdad que debemos saber y ser consciente de que estamos hablando de un vehículo que en muchas ocasiones es para trabajo o para uso lúdico buscando un poco los extremos, también los es que el nuevo Ford nos sorprenderá por el buen rendimiento y efectividad en un uso, podríamos decir, más "cotidiano". Es grande, sin duda, no muy práctico para su utilización en ciudad, pero el confort conseguido en su interior y el buen rendimiento general lo hacen muy apto para ser utilizado "para todo". Fuera del asfalto ha mejorado en zonas complicadas gracias al recorrido de rueda, la intervención de la electrónica, al sistema de arranque en pendiente, al control de descensos, a una primera relación muy corta y a una buena tracción. Por el contrario sigue "pecando" por el radio de giro y ángulos limitados. En caminos, el comportamiento nos gustó especialmente.

El equilibrio entre los dos trenes se pone de manifiesto con un comportamiento bastante neutro. Los controles de seguridad hacen su trabajo pero, incluso sin ellos (se pueden desconectar manualmente o al utilizar la reductora), el comportamiento es eficaz. Como es lógico, sin las ayudas y sin la tracción total (que se acciona mediante el botón de la consola central), se muestra sobrevirador pero lo hace de una manera dócil y muy controlable. En asfalto ocurre un poco parecido. Ahora se nota mucho más equilibrado, estable y con menos balanceos. Incluso siendo lo "grande" que es, en curvas se atreve a mantener el tipo si le exigimos un ritmo ligero. El cambio de seis relaciones dispone de las tres últimas marchas con un desarrollo bastante largo para beneficiar la velocidad de marcha y los consumos que, por otra parte, se situaron en los 10.3 litros de media sin carga. La unidad probada es el acabado XLT que, como se puede comprobar, está bien equipado, con un precio de 29.450 € que lo sitúa en una buena posición en este apartado. Queda enfrentarlo con sus rivales y ver cuál es el resultado de esa comparación, pero a nosotros nos ha gustado y pensamos que es un adversario difícil para cualquiera de su segmento.