Es el primer Land Rover que se suma a la "moda" del 4x2. Una tendencia que desde hace años impera en el mundo de los SUV. Segmento en el que se ha de medir a pesar de que la firma británica no se cansa de repetir que el Freelander tiene ese plus extra que le posiciona un escalón por encima de los SUV tradicionales, y medio por debajo de los todoterrenos más completos. Aún con todo, y más acentuado en el caso de esta versión, los SUV son sus más directos rivales. Y con tracción a un solo eje hay unos cuantos. Entre ellos, el Hyundai ix35, el Kia Sorento o el Renault Koleos.
Esta fórmula de vehículo con apariencia de todoterreno pero tracción a un solo eje es más demandada de lo que pueda parecer pues acapara en torno al 23% de las ventas de su segmento. Claro que la diferencia de precio con las versiones 4x4, en este caso 2.350 euros menos, y también un consumo algo más contenido son razones que los clientes que no van a abandonar el asfalto no pasan por alto.
Hay versiones de Freelander 2 con esta configuración desde poco más de 28.000 euros. La que hemos probado, en acabado S, tiene un precio sin extras de 31.280 euros. Si lo queremos con tracción total en el mismo acabado nos saldría por 33.630 euros.
Diseño exterior
El Freelander en su gama 2011 ha recibo un nuevo paragolpes delantero con formas más abultadas y la incorporación de faros antiniebla, también una parrilla del radiador ligeramente rediseña así como nuevos pilotos traseros y faros halógenos delanteros. Los grupos ópticos traseros incorporan una cubierta semitransparente tipo "Lexus". Las llantas de aleación, de 17" en este modelo, son de nuevo cuño y los retrovisores tienen un 10% más de superficie acristalada.
La marca también ha aprovechado la ocasión para actualizar los logotipos con una nueva cromática. Por lo demás, las formas cuadradas con los cantos redondeados de la carrocería de esta segunda generación del Freelander permanecen invariables con respecto al diseño presentado en 2006. Es una línea que acercó este modelo mucho más a la de sus hermanos de gama alta.
Habitabilidad
Su habitáculo esta acondicionado para acoger hasta cinco adultos conservando un maletero de algo más de 400 l de capacidad. El Freelander 2 es uno de esos coches de los que guardas un buen recuerdo en cuanto a ergonomía y amplitud de habitáculo. Es luminoso, amplio y con mucha visibilidad. Solo tendrá queja el pasajero del centro de la segunda fila, ya que su respaldo, que oculta un apoya brazos escamoteable, resulta duro y el espacio para los pies, a causa del "tunel" de transmisión y de la línea de escape, algo reducido.
En puertas y salpicadero encontramos muchos huecos para llevar cosas y puntos en los que dejar latas o botellas de refresco. Un detalle curioso es que se han diseñado de forma que si el recipiente tiene asa, el hueco (imaginamos que será por si te pilla de viaje en el coche, tomar el tan inglés té de la 5 ) para ésta también se ha tenido en cuenta.
En las plazas delanteras lógicamente el espacio es más amplio, lo que apreciamos yendo en ellas es que no hay una guantera central tan intrusiva y molesta en los codos como en el caso de su hermano Discovery. Un habitáculo que ha obtenido 5 estrellas en las pruebas del Euro NCAP en cuanto a loa protección de ocupantes se refiere.
En las veriones 2011 del Freelander, Land Rover ha incluido cuatro nuevos estilos de tapizados, guarnecidos y salpicadero. Cuatro son también las terminaciones, E, S, SE y HSE.
Mecánica
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El cuatro cilindros 2,2 litros de 150 CV que anima este modelo es nuevo. Cuenta con turbo de geometría variable, refrigerado por agua, inyección common rail con inyectores piezoeléctricos de alta velocidad y cumple la normativa Euro 4 y Euro 5 de emisiones. Va en disposición transversal en el vano motor. Sustituye al anterior bloque 4 cilindros que si bien daba 10 CV más, ofrecía peores cifras de par, 400 Nm contra los 420 de ahora, y un consumo y emisiones superiores.
Es un motor que empieza a desperezarse por encima de la 1.800 rpm y que muestra a partir de ahí una gran elasticidad. Asociado a un cambio manual de seis relaciones resulta muy fácil sacarle provecho y obtener buenos registros de consumo. La marca inglesa anuncia en este sentido una media de 6 litros a los 100 (0,2 l. menos que el 4x4). En nuestro caso obtuvimos 7,1 litros. Cifra bastante buena en su sector teniendo en cuenta que el Freelander 2 4x2 es un coche de 1.710 kg a pesar de haber perdido unos 80 kg con la eliminación de la tracción posterior. A lo que hay que sumar una aerodinámica que sin ser mala sí puede catalogarse como de poco ventajosa. Su aceleración en el 0 a 100 km/h se cifra en 11,7 s. y su velocidad máxima en 181 km/h.
Comportamiento
No puede ocultar que es su tren delantero el que manda. Esto se nota sobre todo en aceleraciones fuertes en donde notamos que hasta la dirección incluso "tira" algo más y se vuelve ligeramente menos precisa. También al ser un vehículo alto y con suspensiones con bastante recorrido se aprecia un cierto balanceo de carrocería, nada exagerado y algo a lo que enseguida se le toma la medida.
En el casco urbano su amplio campo de visión y altura de plataforma ayuda mucho en las maniobras y permite "ver" por encima de muchos coches. Sus 4,5 metros de longitud no son fáciles de aparcar, pero algo ayuda para aprovechar al máximo los huecos sus sistemas acústicos de proximidad.
En carretera su conjunto de suspensiones, de tipo Mcpherson delante y multibrazo detrás, resulta firme en sus primeros centímetros de recorrido pero se ablanda a medida que la inercia de rodadura aparece. Su caja de cambios de 6 relaciones favorece que podamos mantener el motor siempre en sus mejores cotas de par. Su sexta, larga, permite llanear en autopista con el motor muy bajo de vueltas, y la primera corta es una gran ayuda en caso de abordar zonas sin asfaltar.
Seguridad
Bien equipado en este apartado. Incorpora ABS de última generación con repartidor electrónico de frenada EBD, asistencia electrónica en frenadas de emergencia EBA corrector de frenada en curva CBD con función de control de subvirado. Control electrónico de tracción ETC y dinámico de estabilidad. No falta lógicamente un amplio elenco de airbag, 7, repartidos por todo el habitáculo -hay hasta para las rodillas del conductor- ni cinturones con tres puntos de anclaje. También cuenta con 2 fijaciones Isofix, de tres puntos, en las plazas traseras.
Valoración
El Frelander 4x2 es en todo igual a su homónimo 4x4. Las diferencias las marca el precio más bajo, el peso, unos 80 kg menos, y el consumo más moderado, Land Rover anuncia 6 l a los 100 km contra los 6,2 del 4x4. Puntualizar que esta versión, como todas las que equipan cambio manual, viene de serie con el sistema Stop&Start que detiene el motor en paradas prolongadas y lo arranca de nuevo en cuanto pisamos el embrague. El Ferelander 2 fue el primer vehículo de la marca británica en incorporarlo y también el primero en su categoría. Aunque de perezosa respuesta hasta que no alcanza las 1.800 rpm, el motor del Feelander 2 es de esos que te cautiva. Lo que resulta paradójico en la marca que presume de hacer los mejores 4x4 off road del mercado, es que haya cedido al final modificando a su benjamín para que pierda esa cualidad. A pesar de ello el Freelander 2 4x2 es un vehículo que siempre llegará más lejos en una carretera nevada o pista embarrada que un turismo convencional gracias a su mayor altura, tamaño de ruedas y a que su carrocería monocasco conserva intactas sus buenas cotas off road. Para finalizar decir que con los 68 litros de capacidad del depósito pudimos recorrer casi 960 km. Lo que significa en torno a 130 km más por depósito que lo que obtuvimos cuando pasó por nuestras manos la variante 4x4 con este mismo motor.
pues yo tengo un free 2 160 cv con 200.000 km y va perfecto , por donde le metas , 0 averías solo mantenimientos .. 50.000 euros de coche quien diga que es malo se puede acostar, calidad precio claro que los hay mejores , pero land rover en tt es land rover .