El Mini John Cooper Works es la versión más radical de la gama actual. Se espera que en breve la familia Mini crezca con la incorporación de dos nuevas carrocerías ambas de dos plazas, un coupé y un convertible tipo Speedster. Suponemos que la planta motriz escogida para estos dos nuevos Mini será igual o similar al John Cooper Works pues se trata de dos conceptos que buscan aportar la máxima deportividad posible. Igual que sucede con el resto de modelos Mini, el John Cooper Works cuenta con un inagotable catálogo de opcionales para poder configurarlo completamente a nuestro gusto. Un utilitario de pequeñas dimensiones muy práctico a la hora de movernos por ciudad ,con el que además podemos disfrutar de lo lindo en una carretera secundaria. Opciones interesantes son:Abarth 695 Tributo Ferrari y Audi A1 1.4 TFSI.
Diseño
Dentro de la gama Mini, la carrocería de tres puertas es la que mejor representa el espíritu del modelo original en el que está inspirado. De todas formas en breve la familia de modelos Mini seguirá creciendo y se rumorea que habrá un Mini "mini" o sea de dimensiones más reducidas para respetar mejor los cánones de estilo y tamaño del modelo clásico. Por el momento tenemos que contentarnos con el coche que hoy nos atiende y que no es poco. La 3 puertas no es la única carrocería con la que está disponible la versión John Cooper Works. Mini también lo ofrece en el Clubman, la versión "familiar" con cinco puertas y un maletero de mayor tamaño, un vehículo más enfocado a cuatro pasajeros gracias a su mejor habitabilidad. Asimismo también existe el John Cooper Works Cabrio, un 2+2 descapotable con capota eléctrica con un maletero de reducidísimas dimensiones. Estéticamente el John Cooper Works es prácticamente idéntico al modelo sobre el que está basado, el Cooper S. A nivel estético es muy difícil distinguir entre un modelo y otro, puesto que ambos montan la misma entrada de aire sobre el capó delantero, los mismos parachoques y una salida de escape doble en posición central trasera. Los logotipos "John Cooper Works" tanto en el frontal como en la trasera, así como las llantas específicas de 17" lo distinguen.
Habitabilidad
El Mini como su nombre bien indica no es un coche de grandes dimensiones sino más bien todo lo opuesto. Se trata de un utilitario pequeño concebido eminentemente para realizar desplazamientos dentro del medio urbano. Esta es la teoría, si bien es un coche que se desenvuelve de forma excepcional tanto en carretera como en autovía, así que podemos darle el uso que nos plazca. En su interior nos encontramos con unos acabados de buena calidad, muy superiores a los que Mini montó en la primera generación del New Mini. Los plásticos tienen un tacto agradable y los ajustes entre los elementos móviles son bastante buenos. En el salpicadero, justo frente al acompañante hay un panel que podemos presionar para abrir una segunda guantera escondida. Un elemento que mucha gente desconoce y que forma parte del equipamiento de serie en todos los Mini y que complementa a la guantera principal. En las plazas delanteras nos encontramos con unos asientos de corte deportivo que sujetan bastante bien, aunque a nuestro gusto falta algo de recogimiento en lo que a longitud de banqueta se refiere. En la parte trasera encontramos una banqueta de dos plazas perfecta para dos niños y un tanto justa para dos adultos. El maletero ofrece un volumen de carga de 160 litros, algo limitado en el caso que viajemos cuatro a bordo. Siempre podemos ampliarlo hasta 680 litros al abatir la segunda fila en configuración 2 plazas.
Mecánica
El motor es la pieza clave de esta versión John Cooper Works. La anterior generación de este modelo se denominaba Mini Cooper S John Cooper Works con lo quedaba bien claro que era una variante del Cooper S. Ahora aunque el nombre ha perdido el "apellido" Cooper S sigue siendo el mismo concepto de automóvil una versión potenciada del propio Cooper S. A su vez la versión es mucho más sencilla de catalogar, al contar con una denominación más simple. El motor se trata de un cuatro cilindros en línea de 1,6 litros sobrealimentado por un turbocompresor que rinde una potencia máxima de 211 CV a 6.000 rpm. Uno de los grandes atributos de esta mecánica es su brillante entrega de par a bajas revoluciones. A partir de 1.850 rpm entrega ya 260 Nm, una cifra que sigue estando disponible de forma constante hasta las 5.600 rpm. Además de facilitar aceleraciones fulgurantes, esta ventaja nos permite conducir sin tener que subir mucho de vueltas con el consiguiente ahorro de carburante. Si bien las cifras facilitadas por el fabricante sitúan el consumo medio en torno a los 7 l/100 km, lo más normal es estar en torno a los 9 o 10 l/100 km. Mientras que en la anterior generación existía la posibilidad de montar un diferencial autoblocante mecánico en la versión actual del Mini no. Por contrapartida Mini ofrece de serie un control de tracción, que cuenta con una función de autoblocante para simular el efecto de uno mecánico. Es una solución que ya hemos visto en modelos como Skoda Fabia RS o Seat Ibiza Cupra que ofrece una buena efectividad. Con esta solución se limita bastante las pérdidas de tracción sin que ello llegue a limitar demasiado la entrega de potencia.
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Comportamiento
Para empezar nada más ponerte al volante del nuevo John Cooper Works, te encuentras con una palanca de cambio que ofrece un tacto mucho más duro que el del Cooper S. Esto se debe a que se trata de una caja reforzada con respecto a la versión "convencional", puesto que de este modo puede aguantar mejor la mayor entrega de par de esta versión vitaminada del 1.6 Turbo. El John Cooper Works además sólo está disponible con una única caja de cambios manual de seis relaciones, aquí no hay opción de montar la automática que si podemos montar en un Cooper S. El chasis también es más deportivo gracias a una completa puesta a punto, que ha dotado de mayor firmeza al conjunto de elementos de suspensión. Tal y como el John Cooper Works viene de serie ofrece un equipo de suspensiones muy duro, ideal para rodar por carreteras en conducción deportiva, pero quizás demasiado duro para movernos sólo por ciudad. Es sobre un asfalto en mal estado donde se muestra menos cómodo con respecto a un Cooper S. Por si esto era poco, Mini ofrece un equipo de suspensión opcional todavía más rígido que el de serie del John Cooper Works, sólo apto para los más atrevidos. El equipo de frenos también ofrece un excelente rendimiento en conducción deportiva. Es por ello que monta discos de 316 mm delante y 280 mm detrás. A través de las llantas de 17" de serie podemos ver como en las pinzas de color rojo hay el logo de la versión. Si unimos que son discos ventilados y el diseño específico de las llantas, damos con una refrigeración del conjunto de frenos muy buena, que aporta unas buenas prestaciones en todo momento.
Seguridad
El control de estabilidad en Mini se denomina DSC las siglas del alemán Dynamische Stabilitäts Control. El Mini John Cooper Works es un coche muy seguro en todo tipo de circunstancias, pues gracias a las numerosas ayudas electrónicas cualquiera puede disfrutar al volante sin sufrir ni un ápice. En lo que a seguridad pasiva se refiere equipa anclajes Isofix en las plazas traseras y 8 airbags entre otros. Es uno de los utilitarios más completos en este aspecto.
Valoración final
El Mini es un coche perfecto para movernos dentro de una ciudad o incluso para conmutar de un núcleo urbano a otro, a diario. Es importante tener en cuenta el tema del acceso y confort de las plazas traseras, así como el tamaño de su maletero. La versión más radical de la gama bautizada como John Cooper Works sólo es apta para aquellos que busquen lo más de lo más en deportividad, de lo contrario un usuario medio lo puede llegar a encontrar incómodo. Opciones son: Abarth 695 Tributo Ferrari y Audi A1 1.4 TFSI.
el que prueba el Mini JCW, no quiere otra cosa. Y no es el mejor coche del mundo (hay mucho para escoger, pero.....) Sólo digo eso