El conquistador
Sin necesidad de una imagen llamativa o innovadora el Golf de sexta generación logra conquistar a todo aquel que lo conduce. Suave, preciso, de consumo contenido y con una calidad de rodadura envidiable, el Golf VI sería el compacto ideal para los que disfrutan al volante si no fuera por el precio. La versión Sport 2.0 TDi con cambio manual de seis velocidades objeto de esta prueba cuesta 25.570 euros, sin contar los extras que equipa.
Al igual que en los modelos anteriores, más que de grandes cambios estilísticos cabe hablar de evolución. Generación tras generación, el Golf ha mantenido intacto su carácter, independientemente de su diseñador. Ese carácter que le ha llevado a convertirse en un icono dentro de su clase. Ahora, se acentúan más los pliegues de la carrocería, sobre todo el que recorre la línea de cintura desde la aleta delantera hasta la zaga y que hace resaltar los "hombros" del vehículo. En la parte delantera se aprecia una nueva parrilla negra brillante formada por dos lamas horizontales rematadas con un filo cromado. Los grupos ópticos recurren también al fondo negro con lámparas cromadas. En la zaga, sus trazos buscan la horizontalidad. Algo que se refleja, incluso, en el diseño de los pilotos, muy al estilo del Touareg.
La habitabilidad del Golf está en línea con la de sus competidores. Puede alojar a cinco adultos, aunque el que ocupe la plaza central trasera no irá tan cómodo como el resto. Delante, la sensación de espacio es menor que en un Ford Focus pero los asientos resultan confortables y sujetan bien el cuerpo. Los ocupantes de las plazas posteriores no tendrán problema ni de altura para las cabezas, ni de longitud para las piernas, pero no deberá importarles viajar hombro con hombro. El maletero no es de los mejores, ofrece 350 litros de capacidad de carga, sin embargo es hondo y bien aprovechable.
La buena postura de conducción que ofrece el Golf ya es un punto de partida a favor. Pero añadido a su calidad de rodadura, estabilidad y facilidad de manejo hace que se logre disfrutar de cada kilómetro recorrido. El guiado de la dirección es perfecto, transmite la dureza óptima e información precisa. Otra de las facetas a destacar en el nuevo Golf es la eficiencia de la suspensión adaptativa electrónicamente (DCC). Este sistema se encarga de adaptar permanentemente la fuerza de amortiguación de cada rueda según las señales que recibe de la servodirección, el cambio, el motor, los frenos y los sistemas de ayuda a la conducción. Puede actuar ajustando sus parámetros conforme a tres estilos prefijados: normal, deportivo y confort.
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De momento, en diesel hay dos posibles mecánicas. Ambas toman como base el bloque de 2 litros. La más básica desarrolla una potencia de 110 CV, la otra de 140 CV. Ninguna de las dos son nuevas, aunque sí convenientemente evolucionadas. De hecho la inyección se realiza por raíl común de última generación y también incorporan doble árbol de levas para minimizar las vibraciones. El motor 2.0 TDi de 140 CV, que es el que nos ocupa, va asociado a un cambio manual de seis velocidades, al margen de que también esté disponible con cambio DSG de seis marchas porque eso forma parte de las opciones. Es un motor que entrega su par máximo (320 Nm) desde 1.750 revoluciones por minuto, lo que hace que recupere extraordinariamente bien, y por otro lado deja mucho margen en la utilización del cambio.
Cualquier Golf de la gama incluye de serie, reposacabezas delanteros activos, airbag de rodilla, airbags delanteros y airbags laterales y de cabeza para el conductor y el acompañante. También cuenta con ESP con asistente a la frenada, ABS, y control de tracción. Los airbags laterales traseros son opcionales en todos los casos, al igual que la suspensión adaptativa electrónicamente (DCC). La alarma antirrobo volumétrica es otra de las opciones.
El segmento de los compactos es el más demandado en nuestro país, así que la oferta es tan amplia que al Golf no le faltan rivales. Lo que tampoco le falta al modelo de Volkswagen son argumentos para situarse a la cabeza de los favoritos de la lista. Es un coche agradable de conducir, ágil y que transmite seguridad en todo momento. El promedio de consumo registrado fue de 5,4 litros, bastante contenido para lo que da de si su motor. La única pega, es que tiene un precio algo elevado.
sinceramente cuando cojes un coche asin juvenil como el vw golf ya no kieres otro!!! ni focus ni astras ni c4 ni otra cosa ke no sea esa