Volkswagen Jetta 2.0 TDI Sport DSG: Cambio de Jetta

El Jetta es un auténtico "bestseller" en la casa alemana que ha vendido 9,5 millones de unidades desde su lanzamiento, hace ya 31 años, pasando por cinco generaciones distintas. En esta nueva entrega incrementa significativamente su longitud, ahora alcanza los 4,64 metros, que son 9 cm. más que la quinta generación. De las opciones de motor que hay para el nuevo Jetta hemos probado la más potente en diesel, 2.0 litros con 140 CV y 320 Nm de par, en combinación con el cambio de doble embrague DSG de 6 marchas, que es la única variante que puede acompañar al Jetta con esta motorización. El consumo medio declarado es de 5,3 l. a los 100 km. (4,8 en la versión con caja manual de 6 relaciones). La marca anuncia las siguientes prestaciones: 0 a 100 Km/h en 9,5 segundos y una velocidad máxima de 210 km/h. El precio de esta versión 2.0 TDI con paquete Sport&More, navegador y con cambio DSG, una vez restados los descuentos promocionales en vigor se queda 27.155 euros. Destacar que hay versiones del nuevo Jetta desde los 21.180 euros.

Diseño exterior

Salta a la vista que estamos ante un Jetta nuevo en su totalidad que solo conserva de la versión antecesora el nombre. Por primera vez en su dilatada carrera comercial la base de esta berlina ya no tiene nada que ver con la plataforma de su hermano de gama el Volkswagen Golf. En esta sexta generación, el Jetta estrena un chasis monocasco con carrocería de acero galvanizado y en tres volúmenes, diseñada y fabricada expresamente para él.

Sus formas exteriores, que por cierto, no se ven favorecidas en las fotos en este color blanco, recogen el ADN de la nueva saga Volkswagen, marcado por un frontal en el que se dibuja una fina línea que engloba faros y parrilla del radiador. Ésta cobra todo el protagonismo y eclipsa a una segunda, casi de idénticas proporciones, que queda en los bajos del paragolpes y lleva los faros antiniebla incorporados.

Los perfiles están bien definidos por una alta línea de cintura que luce por encima de las manetas de las puertas y muere en la aletas traseras cuando están a punto de alcanzar los pilotos posteriores. Una línea de hombros alta, de neta inspiración deportiva, que queda cerrada por el musculoso paragolpes. Elemento que, junto con el capó trasero, culmina la zaga. En la que hay que destacar que su línea de corte, vertical al suelo, contrasta enormemente con la muy inclinada luneta posterior. Para terminar con este apartado citar que en el nuevo Jetta se ha alargado la batalla en 7,3 cm. lo que mejora su aplomo y ha permitido ampliar notablemente el habitáculo.

Habitabilidad

El interior del Jetta está configurado para cinco pasajeros, las plazas traseras son, con algún matiz del que más adelante comentaremos, las más favorecidas con el "estiramiento" que ha recibido la nueva plataforma de coche. Ahora disponen de casi 7 cm. más para las rodillas. Siendo en total casi 97 cm. lo que tenemos entre su respaldo y el delantero. La segunda fila puede acoger a tres adultos pero el que ocupe la plaza central se encontrará con dos puntos negros: un respaldo muy duro (tras el que hay una compuerta que da acceso al maletero, y en esta versión sport oculta también el apoyabrazos para esa 2ª fila) y que la parte posterior de la guantera central delantera invade bastante su espacio para las rodillas. Los respaldos de esta segunda fila se pueden abatir asimétricamente, 40/60%, lo que amplia notablemente el espacio para carga en un maletero que tiene nada menos que 510 l. de capacidad. En su doble fondo se aloja la rueda de repuesto, que es del mismo tamaño de las demás pero con llanta de chapa de acero en vez de aluminio.

En el acabado Sport los asientos del Jetta van tapizados en tela y piel. Y en piel totalmente volante y el pomo de la palanca de cambio. Son asientos cómodos en los que uno no se "pega" con el calor y que sujetan el cuerpo de forma eficiente en las curvas. Una amplia guantera central y otra frente al copiloto, con conexiones para iPod y MP3, permiten organizar mejor la vida a bordo. Y suplementando la generosa capacidad del maletero encontramos amplios huecos en los guarnecidos de las puertas y consola central.

Mecánica

La oferta mecánica para las versiones del nuevo Jetta incluye seis opciones pero en 2011 solo cuatro están disponibles. Son: Un gasolina de 105 CV con tecnología "Blue Motion" y con caja manual de 6 relaciones, y tres diesel cuyo rango de potencia va de los 105 a los 140 CV. Las versiones diesel menos potentes cuentan con el nuevo cambio DSG de 7 velocidades dotado de dos embragues que funcionan en seco. Mientras que en el TDI de 140 CV, la versión que hemos probado, mantiene el tradicional cambio DSG de 6 velocidades con dos embragues en baño de aceite.

El 2 litros TDI de 140 CV es un tetracilíndrico de cuatro válvulas por cámara de combustión que cuenta con doble árbol de levas, turbo e intercooler y también con inyección por Common-Rail. Propulsor que destaca por ofrecer un constante empuje, sus mejores cotas de par están entre 1.750 y 2.500 rpm, sin que apenas se aprecie la intervención del turbo. Va asociado al cambio DSG de 6 relaciones (con levas en el volante para usar en modo secuencial) que si bien se ve capaz de aprovechar correctamente el par motor de este 2.0 l. nos dio la sensación de que es un tipo de cambio que ya está notablemente superado, en suavidad y enlace de marchas, por la variante más moderna de 7 relaciones. Que por el momento se reserva para modelos de la gama Jetta de gasolina y diesel de menos cilindrada.

Los responsables de Volkswagen argumentan que el DSG de 7 marchas no está indicado para motores que superen los 250 Nm de par. Sin embargo hay modelos de Volkswagen, el nuevo Tiguan por ejemplo, que ya asocian el DSG de 7 marchas al 2.0 TDI.

En nuestra unidad de pruebas se apreciaba una respuesta algo torpe y tardía de este cambio. Hecho sorprendente puesto que el recuerdo que teníamos de él, instalado en otros modelos y marcas del grupo Volkswagen, era que lo elogiábamos siempre por la rapidez de intervención. Algo que hasta ahora siempre lo había caracterizado. Será porque nos hemos vuelto más exigentes o porque en la unidad probada el DSG no funcionaba tan fino. El caso es que empobrecía un poco el buen hacer del motor 2.0 TDI. Obtuvimos mejores resultados usándolo en modo secuencial con las levas del volante que son tan discretas que hasta pasan desapercibidas en él.

Comportamiento

El nuevo Jetta ha dado un enorme salto cualitativo. Sus acabados aún pueden tacharse de sobrios pero son de muy buena calidad. Es uno de esos coches que se conduce sin pensar aunque.... ese DSG de 6 marchas. Su aumento de tamaño no ha mermado su excelente maniobrabilidad y capacidad para desenvolverse con agilidad en ciudad y atascos. Parte del secreto de su éxito radica en que su habitáculo siempre ha tenido una muy buena visibilidad desde el puesto del conductor, a lo que se suma que esta versión cuenta con dirección asistida electromecánicamente. Lo que permite ajustar muy bien, rápido y de manera casi intuitiva, a las maniobras.

Sin ser especialmente brillante en lo que refiere a tacto de suspensiones (McPherson delante y multibrazo detrás) que pecan de poco recorrido, disimula bien esa carencia gracias a una amplia batalla. Algo que además le confiere un gran aplomo en carretera y autopista.

No es uno de esos coches en los que te da por investigar cuanto tardan en entrar en acción las ayudas de la conducción. Pero éstas, aparte de ser poco intrusivas, pudimos apreciar que funcionan en el grado justo y en el momento que hace falta, no antes. A lo largo de nuestra prueba obtuvimos un consumo medio de solo 5,5 l. a los 100 km casi calcando el oficial. Lo que nos daba una autonomía con los 55 l. de su depósito de 1.000 kilómetros exactos.

Seguridad

Ya en la gama más asequible, Advance, cuenta con 6 airbag, control de estabilidad ESP, aviso de si hay algún cinturón desabrochado, activación de luces de emergencia en caso de frenada brusca, ABS, ASR, EDS, MSR, etc. En las dos versiones se puede optar, según motores o cambio, por asistente de arranque en pendientes, sistema Start/Stop, etc.

Valoración

No se trata de una nueva variante sobre lo ya conocido, la 6ª generación del Jetta es un vehículo totalmente nuevo en el que se ha ganado en todo. Su monocasco es más grande, cuenta con más habitabilidad y capacidad de maletero, su nivel de equipamiento es más rico y sus acabados se han refinado. Dinámicamente ha ganado en aplomo sin perder en manejabilidad en el casco urbano. Su gama de motores y cambios cubre un amplio espectro aunque en ellos no todo es compatible. El único handicap que le notamos es que con el cambio DSG que se ha adaptado a esta versión del Jetta el propulsor 2.0 TDI de 140 CV no brilla de la misma manera que lo hace el resto del conjunto. Aunque mejora si se usa en su configuración secuencial mediante las levas del volante.