Comparativo: Qashqai, iX35, Sportage, 3008, S-Cross y Yeti
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Comparativo: Qashqai, iX35, Sportage, 3008, S-Cross y Yeti

Coches.net

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152 opiniones

Todos estos SUV han sido ya eliminados de los catálogos de sus respectivas marcas. El Nissan Qashqai y el Suzuki S-Cross han sido profundamente ediseñados, del Kia Sportage y del Peugeot 3008 se vende ya una nueva generación, completamente diferente, el Hyundai iX35 ya no existe y ha sido sustituido por el Tucson mientras que el Skoda Yeti ha cedido su puesto en la gama al nuevo Karoq.

No obstante, estos seis coches son muy interesantes para aquellos que busquen un SUV de ocasión reciente con motor diésel, consumo bajo y habitabilidad notable. En los siguientes enlaces os dejamos los enlaces a las páginas de coches.net donde encontraréis los anuncios de vehículos de ocasión de todos estos modelos.

Kia Sportage

Hyundai ix35

Nissan Qashqai

Suzuki S-Cross

Peugeot 3008

Skoda Yeti

Nuestro tercer comparativo de segmento versará sobre los SUV compactos. Estos coches, nacidos a rueda de la primera generación del Nissan Qashqai, miden unos 4,30 metros y se han convertido en una alternativa algo más funcional a los compactos del segmento C de toda la vida. Más altos, con una posición de conducción dominante, mayor altura libre al suelo (que sólo les sirve para circular por pistas de baja dificultad) y una "estética todoterreno", estos modelos se han puesto de moda.

La llegada de la segunda generación del Qashqai nos ha servido de escusa perfecta para enfrentarlo con alguno de los rivales lanzados tras el éxito de la primera generación del modelo japonés. Y, además de elegir coches de marcas generalistas con unas dimensiones similares, hemos optado por todos aquellos que o bien son nuevos, como el Suzuki SX4 S-Cross o bien han recibido muy recientemente un rediseño, ya sea casi imperceptible, caso del Hyundai o el Kia, sea algo más notable como en el caso del Peugeot 3008 y del Skoda Yeti. Para ello hemos elegido las versiones más vendidas de todos ellos, las dotadas de motores diésel de entre 110 y 120 CV y de tracción a las ruedas delanteras.

Como siempre vamos a analizar los diferentes aspectos de cada uno de nuestros seis coches con el objetivo de ver si los cinco rivales del Qashqai han conseguir llegar a la altura de este superventas y si la nueva generación del modelo japonés está lo suficientemente preparada para seguir controlando el segmento con mano de hierro.

MOTORES (Por Jaume Gustems)

Todos los SUV de este comparativo montan los motores diésel menos potentes de sus respectivas gamas, que se mueven entre 110 y 120 CV. Por debajo de esa cifra, es evidente que quedarían muy cortos para este tipo de vehículos, que tienen carrocerías grandes y bastante pesadas, especialmente si los vamos a utilizar como primeros coches familiares para el hogar. Lo cierto es que todos ellos pasan el examen algo justos, ya que exceptuando el motor del Suzuki SX-4 S-Cross, el resto de propulsores nos han parecido francamente mejorables.

El punto débil de estos diésel está en la entrega de par a bajas vueltas. La mayoría responden con pereza durante el primer tramo del recorrido de gas y no logran impulsar con determinación el coche. Es frecuente tener que abusar ligeramente del embrague en las salidas en parado o tener que recurrir a reducir una marcha para mejorar la aceleración y las recuperaciones en carretera, sobre todo si éstas son como las del comparativo, básicamente de puerto de montaña.

Estos motores, que rinden de manera más que notable en vehículos más pequeños de los mismos fabricantes, se enfrentan en este caso a carrocerías más pesadas y a cargas superiores y eso se nota en su rendimiento.

Además del motor del Suzuki, el del Skoda Yeti y el del Nissan Qashqai salen razonablemente bien parados. Hacen gala de un correcto nivel de elasticidad y son poco ruidosos, aunque como el resto, se notan poco potentes. El Skoda Yeti es el único de los seis que monta una caja de cambios de 5 velocidades y ello le impide en cierto modo sacar mejor provecho de su superior cilindrada ya que con dos litros, es el que más cubicaje ofrece. El Peugeot 3008 y sobre todo, los dos coreanos, el Kia Sportage y el Hyundai ix35 (que montan el mismo propulsor) adolecen en mayor medida de una falta de respuesta en bajos y de pobres recuperaciones. Por debajo de las 2.000 vueltas no ruedan con soltura.

Por todo ello, si estáis pensando en cargar muy a menudo el coche y tenéis el presupuesto suficiente, es preferible optar por versiones con motores diésel más potentes, en torno a los 140 CV, disponible en todos los modelos probados a excepción del Suzuki del que ya hemos dicho quee s el que ofrece un rendimiento más satisfactorio.

No obstante, hay que puntualizar que estas versiones con motores diésel de menor cilindrada ofrecen algunas ventajas: por un lado, permiten que podamos comprar el coche a un precio más asequible. En comparación con el resto de versiones diésel más potentes la diferencia de precio es notable.

Por otro lado, estos motores acostumbran a gastar un poco menos, sobre todo en estos casos en los que la transmisión es 4X2. Por lo tanto, los costes de mantenimiento, a corto y largo plazo, son menores.

Durante nuestra prueba, que incluyó largos tramos de autovía, mucha carretera de alta montaña y alguna pista forestal en buen estado, el consumo se situó entre 7 y 8 litros a los 100. El que menos gastó de los seis fue el Suzuki SX-4 S Cross (6,7 l/100km) confirmando una vez más la calidad de su motor de origen Fiat. El que más, el Kia Sportage con 8 litros a los 100. El Hyundai ix35 registró 7,9 l/100, el Peugeot 3008 7,6, el Skoda Yeti 7,3 y el Nissan Qashqai 7.0 l/100 km. de media.

En definitiva, desde el punto de vista del comportamiento del motor y el consumo, el Suzuki SX-4 S Cross es el claro vencedor del comparativo. Es el más potente de los seis y el que menos gasta, demostrando esta vez que a pesar de todo, no siempre potencia y consumo van íntimamente relacionados.

COMPORTAMIENTO DINÁMICO (Por Luís Miguel Reyes)

Los seis SUV de este comparativo son los principales protagonistas de un segmento muy popular que le ha “comido terreno” al de los turismos compactos. Pese a que en la mayoría de ellos -prácticamente en todos- la opción de poder hacer off road es más un argumento de venta que una realidad -especialmente en estas versiones 4x2-, el mercado cayó -hace ya algún tiempo-, en las “garras” de este tipo de coches convirtiéndose en uno de los segmentos más populares en nuestro mercado.

Las características de estos todocaminos, hacen pensar que su comportamiento dinámico por asfalto debe ser menos eficaz que el de un turismo. Su mayor peso, un centro de gravedad más alto y unas suspensiones con mayor recorrido y poco firmes son argumentos que ayudan a creer ese razonamiento. Sin embargo esto nunca es ciencia exacta y por eso hemos querido comprobarlo.

Tras realizar un largo recorrido por todo tipo de vías, pero especialmente por zonas de montaña, obtuvimos conclusiones muy concretas que nos ayudaron a definir cuál de ellos nos pareció más eficaz en un terreno u otro y cuales eran sus mejores argumentos.

Entre todos ellos, el Skoda es el más “pequeño” en lo que a dimensiones se refiere -4,22 m de largo- y aunque no es el menos pesado -1420 kg-, sí podemos hablar de mayor ligereza en cuanto a sensaciones de conducción. El Yeti es el que más se acerca, dinámicamente, a un turismo gracias a sus reducidas dimensiones, a una dirección precisa –aunque podría ser algo más rápida- y a una agilidad en zonas viradas superior a la de todos sus rivales.

La suspensión es un poco blanda y eso le impide ser aún más eficaz en carreteras de montaña en mal estado pero una respuesta constante de su motor desde la zona baja del cuentavueltas le ayuda a mantenerse entre los mejores. En zonas rápidas mantiene la calidad pero algunos de sus rivales -como el Nissan por ejemplo-, lo superan en ese aspecto. Los frenos -aunque eficaces- ofrecen un tacto demasiado blando y esponjoso restando confianza al conductor hasta que se habitúa a ello. Por la posición de conducción y tacto general, es el más parecido a un turismo. En conjunto es muy eficaz y unos de los mejores del comparativo.

Pasamos de unos de los más ligeros -al Skoda sólo lo supera el Suzuki en la báscula-, al más pesado del comparativo; el Peugeot 3008. El francés pesa 1.500 kg y se nota. En busca del confort, ofrece un tarado de suspensión blando y una dirección precisa aunque poco directa.

Pese a ello, el 3008 se desenvuelve bien en zonas viradas pero paga el peaje del peso y de una respuesta muy pobre de su propulsor a bajo régimen hasta que se superan las 2.000 rpm, momento en el que progresa con mayor brío pero sin destacar especialmente.

En zonas enlazadas el bamboleo de carrocería es notable e invita a una conducción pausada. El tacto de freno es blando, -más duro que el de algunos rivales- y la dirección está demasiado desmultiplicada, lo que no le ayuda a ofrecer sensación de agilidad. Por el contrario, en zonas más rápidas ofrece un gran aplomo -uno de los mejores- y un alto confort de marcha.

El Kia Sportage es el más grande de todos como lo demuestran sus 4,44 metros de largo y 1,85 m de ancho. Y en marcha se nota. Si bien en carreteras rápidas y autopistas ofrece un buen aplomo, en zonas viradas se ve penalizado por el peso –1.490 kg, sólo 10 kg menos que el Peugeot- y por un tarado de suspensión exageradamente blando.

En ocasiones, la búsqueda del confort a base de dotar al coche de una suspensión blanda crea el efecto “rebote”, es decir, que el vehículo llega a ser incómodo por exceso de morbidez de las suspensiones. Y el KIA es un ejemplo de ello. En zonas bacheadas y sobre todo onduladas, los balanceos y movimientos del morro son excesivos.

El peso y ese tarado de suspensión lo penalizan claramente en zonas de curvas lentas. El motor –con escasa respuesta a bajo régimen como ocurre con la mayoría de sus rivales- no le ayuda en esas circunstancias. Por el contrario, dispone de buen tacto de dirección y de una frenada eficaz con el mejor tacto de pedal del comparativo.

Con el mismo propulsor que el Kia, el mismo peso y unas dimensiones apenas un poquito más contenidas -4,41 metros de largo y 1,82 metros de ancho-, el iX 35 tiene un comportamiento muy similar al de su compatriota, aunque hay que reconocer que existen algunas diferencias.

Para empezar el tarado de suspensión, aunque es ciertamente blando, no lo es tanto como en el Sportage y la dirección es precisa y rápida –pese a que el tacto es demasiado suave y transmite poco-. Todo ello le permite ser un poquito más eficaz en zonas viradas que su compatriota pero las distancias son mínimas. La frenada es potente pero de nuevo el tacto es mejorable. Desde luego, si alguien tiene que decidirse por uno de los dos coreanos presentes en este comparativo, las diferencias en comportamiento dinámico no serán las que decidan la elección.

El Suzuki S-Cross es el más ligero de todos con sus 1.315 kg, el segundo más “pequeño” tras el Skoda -4,30 metros de largo y 1.76 metros de ancho- y el que dispone del motor más potente, como lo demuestran sus 120 CV -110 cv y 115 cv el resto-. No es de extrañar, por lo tanto, que sea uno de los más eficaces en zonas de curvas y carreteras de montaña.

En carretera, es el que gira más “plano”, con menos balanceos y el que tiene el mejor paso por curva. Se inscribe en la curva con gran precisión y es el que mejor mantiene la trayectoria a pesar de que la dirección, aunque precisa, es algo lenta y le resta sensación de agilidad.

El Skoda podría superarlo en ese aspecto, pero su suspensión -un poco más blanda- le traiciona para pelearse con el S-Cross. La frenada está a la altura de las circunstancias pero el tacto es algo esponjoso. En general, el tacto de frenos de todos ellos es, en nuestra opinión, demasiado blando. No entendemos muy bien el motivo… En zonas rápidas también se encuentra a gusto pese a ser el segundo más corto. Desde luego, es una de las mejores opciones del comparativo.

No sé si sería correcto decir que el Qashqai es el vencedor en este apartado porque, en realidad, no destaca especialmente en ningún aspecto, pero hay que reconocer que es eficaz en todos ellos. Si hablamos de suspensión debemos decir que no es la más firme pero no es exageradamente blanda ni incómoda como ocurre con algunos de sus rivales.

La dirección no es muy directa pero tiene un buen tacto y es suficientemente rápida como para ir bien en zonas enlazadas. Tan sólo las dimensiones del volante –un poco grande para mi gusto- lo limitan en sensación de rapidez de respuesta. En curvas rápidas y autopistas es uno de los mejores –si no el mejor- gracias a un buen aplomo y al equilibrio del conjunto.

Igual que ocurre en sus rivales, el motor no es una maravilla a bajo régimen pero, de nuevo, no es el peor y sí es muy correcto cuando supera las 2.000 rpm, aunque en este aspecto se ve superado por el del Suzuki. En zonas reviradas el S-Cross y el Skoda están por delante de él pero se queda muy cerca de ellos. El que en su día marcó la pauta en este segmento, sigue manteniendo el tipo.

PUESTOS DE CONDUCCIÓN (Por Juan Carlos Grande)

Elegir el mejor puesto de conducción no ha sido tarea fácil. De hecho, salvo por detalles particulares casi todos los coches mostrados en nuestra comparativa ofrecen una experiencia de conducción más que correcta. Así pues, la razón por la que he seleccionado al Nissan Qashqai como vencedor en este apartado se halla en su logrado equilibrio entre comodidad, diseño, calidad de acabados y confort de marcha.

El nuevo Qashqai es uno de esos coches que te hacen sentir a gusto al poco de sentarte en el puesto del conductor. Y no sólo porque los asientos sean confortables -que lo son, y mucho-, sino también por lo fácil que es encontrar una postura cómoda al volante. El diseño del salpicadero, discreto y limpio, presume de una ergonomía muy conseguida en general; y mejora al anterior en la calidad de recubrimientos, el tacto de los mandos y la legibilidad de su instrumentación. Además, una vez en marcha, comprobamos que el habitáculo del nuevo Qashqai resulta ser el que ha recibido un mejor tratamiento de insonorización.

Como decía, y pese a todo lo bueno que ofrece el Qasqhai, el nuevo SUV de Nissan tampoco supera a sus rivales por una gran diferencia. Veamos pues en qué destacan, para bien o para mal, el resto de los SUVs que han tomado parte en nuestra prueba.

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El Kia Sportage cuenta a su favor con una notable sensación de amplitud, que se ve aderezada por el diseño agradable y moderno del salpicadero. Los asientos, tan confortables como robustos, son a mi modo de ver los mejores de esta comparativa. Se echa en falta un mayor número de huecos portaobjetos; si bien disponemos de un generoso cofre bajo el reposabrazos, una pequeña superficie para dejar el móvil y también dos portabebidas. Si en algo falla el Sportage es por la escasa insonorización del ruido del motor, y en menor medida, una luneta trasera de pequeña superficie que limita la visibilidad a través del retrovisor.

Precisamente, el coche que ofrece la mejor visibilidad es el Skoda Yeti. A cambio nos encontramos con una postura de conducción algo incómoda, muy al estilo “monovolumen”, que nos obliga a elevar el asiento y acercarnos mucho a los pedales; ésta será la mejor manera de abarcar por completo el volante, que queda poco vertical y más bien lejano. Pese a la notable calidad y ajuste de los mandos y los materiales de recubrimiento, la realidad es que el diseño del Yeti -un gran coche en su conjunto- empieza a acusar el paso de los años.

El Peugeot 3008 puede presumir la mejor “calidad percibida” dentro de un habitáculo muy luminoso y que además ofrece muy buena visibilidad. El diseño del puesto de conducción resulta especialmente original, quizás demasiado, lo que en función del tipo de cliente se podrá considerar como un argumento de compra o de descarte. También intimida un poco su consola central, muy ancha y elevada, y en la que tendremos que controlar demasiados botones. Con el coche en movimiento, tampoco me han gustado ni la dirección, demasiado dura, ni el escaso recorrido útil del embrague.

Por su parte, el Hyundai ix35 viene a ser como un trabajador aplicado, que lo hace todo bien sin destacar especialmente en nada. Su habitáculo nos ofrece una sensación bastante acogedora en conjunto, con buena visibilidad y muchos huecos para dejar nuestras cosas. Pero hay aspectos negativos que comentar. Tal es el caso del volante, que no me ha convencido por el cuero resbaladizo que lo recubre, pero también porque la dirección se nota demasiado blanda y con cierta holgura. Igualmente desacertada es la ubicación ciertos botones, que según sea el caso parecen fuera de lugar o simplemente quedan demasiado lejanos.

Cerramos este apartado con el Suzuki SX4 S-Cross, el más modesto de la comparativa en ciertas cuestiones. Por ejemplo, su habitáculo delantero es el que ofrece menor sensación de espacio; defecto que compensa con una visibilidad por encima de la media y unos asientos que sujetan bien el cuerpo. El salpicadero, de diseño minimalista y dibujado con buen gusto, luce más por estética que por la calidad de sus plásticos. El Suzuki comete, además, los mismos pecados que el Hyundai en cuanto a la ubicación de ciertos mandos, que obligan a desviar la mirada para accionarlos. Pero como decía al principio, las diferencias no han sido muy notables en esta comparativa, con lo que el puesto de conducción del SX4 S-Cross no llega a desmerecer frente al resto de competidores.

ESPACIO INTERIOR Y MALETERO (Por Néstor Abarca)

Los SUVs están de moda. Tan de moda que en estos momentos los compradores los prefieren antes que decantarse por la compra de un monovolumen si la familia crece. La tendencia años atrás marcaba que muchas parejas al tener un hijo cambiaban a un vehículo más grande. Como os digo, generalmente hacia un monovolumen por su generoso espacio y maletero, pero la historia ha cambiado y ahora lo que se prefiere es un SUV, que aporta un aspecto más atractivo y robusto.

En la comparativa de seis modelos que os ofrecemos, seis modelos que perfectamente podrían situarse como primera opción de compra, vamos a ver si cumplen con lo que se espera de ellos. Es decir, un buen maletero para cargar todos los trastos del bebé o las maletas en caso de salir de viaje y unas plazas traseras lo suficientemente anchas como para realizar largos desplazamientos. Vamos a ir uno por uno viendo cuáles son sus puntos fuertes y en qué otros flaquea.

El Nissan Qashqai presenta varias mejoras para continuar siendo el rey de los SUV compactos. Centrándonos en este apartado comprobamos como la anchura de los respaldos y la banqueta es ligeramente mayor que en la generación anterior, así como la altura para la cabeza hasta el techo que es ahora más holgada. La banqueta trasera está situada unos centímetros más atrás, muy poco, pero se ha conseguido ganar longitud para situar las piernas.

Según la marca japonesa, en el maletero se han ganado 20 litros adicionales aumentando su capacidad hasta los 439 litros con los asientos en su posición original. Abatiendo los respaldos traseros se consiguen unos meritorios 1.513 litros, los cuales nos permitirán cargar a consciencia bultos de gran tamaño si no tenemos que llevar pasaje detrás. Otra de las novedades que presenta esta generación es la incorporación de un piso modulable gracias a dos baldas independientes que nos permitirán crear diferentes alturas y huecos independientes.

Las plazas traseras del Suzuki S-Cross son las que menos espacio ofrecen, aunque se encuentran dentro de un rango aceptable para dos adultos de estatura media. Yo por ejemplo, con mi altura de 1’85, voy con la cabeza prácticamente en el techo y la plaza central, sin ser incómoda de mullido, acerca aún más al pasajero al techo. Como punto favorable destacamos que los respaldos son inclinables, aunque se limita únicamente a dos posiciones prefijadas de anclaje.

Con 430 litros homologados es el que tiene el maletero más justo de los seis modelos que enfrentamos, pero a su favor es uno de los que ofrece unas formas más cúbicas que ayudarán a distribuir bien el equipaje, doble piso y dos espacios laterales para depositar pequeños objetos. Los 1.269 litros totales que ofrece parecen pocos y los asientos quedan ligeramente elevados al abatir los respaldos.

El Peugeot 3008 es el más “monovolumen” de los seis, un hecho del que se benefician en gran medida las plazas traseras. Es de los pocos que atrás podrán viajar mínimamente bien tres adultos gracias a que todos disponen del mismo espacio para las piernas, aunque como suele ocurrir el que viaje en la plaza central no obtendrá el mismo confort que los dos laterales al estar situado ligeramente más alto y con un respaldo más duro.

Los 432 litros del maletero se pueden distribuir gracias a la balda modulable en distintas alturas. Los asientos se abaten cómodamente mediante los dos tiradores situados en los laterales (cosa que no hemos hecho en el vídeo por error) ofreciendo la posibilidad de aumentar generosamente el espacio de carga total. El portón cuenta con doble apertura: se puede abrir la parte superior o las dos, aunque es un sistema que no nos convence demasiado ya que, si están las dos partes abiertas, dificulta en exceso el llegar hasta el fondo del maletero.

El Kia Sportage y el Hyundai ix35 son prácticamente iguales. En ambos se respira confort y espacio de sobra en las plazas traseras, de las más anchas entre los modelos comparados. La altura, la anchura y la distancia para las piernas es muy buena, sin embargo la plaza central sitúa a su ocupante en una posición demasiado elevada y le resta confort. Las personas altas tocarán con la cabeza en el techo si van sentadas en el centro.

En el maletero calcan el volumen de carga homologado con 465 litros, aunque cada uno con sus puntos a favor y en contra. El Sportage tiene la boca de carga más grande que la del ix35 y cuenta con unas prácticas cintas a modo de tirador para abatir los asientos en los mismos respaldos. Por su parte, en el Hyundai, los pasos de rueda son menos intrusivos y pueden aprovecharse mejor los dos huecos laterales que resultan. Abatiendo los asientos, el ix35 homologa unos litros de más que el Kia: 1.436 litros frente a 1.353 litros, aunque “in situ” la diferencia apenas se aprecia. Los dos modelos cuentan con rueda de repuesto y una práctica red de sujeción.

Hay un modelo que en este apartado se sitúa claramente por encima del resto. El Skoda Yeti no tiene rival si nos centramos exclusivamente en estas dos categorías. El sistema VarioFlex de los asientos traseros permite abatirlos y plegarlos, quitar uno, dos o los tres asientos independientemente, quitar el central y colocar sólo los dos laterales en una posición más centrada, variar el ángulo de inclinación de los respaldos o correr la banqueta. De este modo puede optarse por aumentar el espacio de carga en el maletero u otorgar una mayor habitabilidad a los pasajeros.

Atrás, la gran boca de carga nos da la bienvenida a un maletero sobresaliente. Con los asientos en la posición más retrasada el volumen de carga es de 405 litros, si corremos la banqueta hacia adelante se amplía hasta los 510 y si plegamos los asientos aumenta hasta unos generosos 1.580 litros muy aprovechables gracias a la considerable altura hasta el techo. Cuenta con una “barrera” desmontable en un lateral para separar los objetos más delicados de la carga general, unos prácticos ganchos móviles en los raíles laterales para colgar las bolsas de la compra, por ejemplo, y como en el Peugeot 3008 la luz de cortesía es una linterna extraíble. Como diría la marca: soluciones “Simply Clever”.

EQUIPAMIENTO Y PRECIOS (Por Joan Dalmau)

Suzuki ofrece cuatro acabados en el S-Cross llamados GL, GLE, GLX y GLX-EL. Éste último era el correspondiente a nuestra unidad de pruebas. Los equipamientos son cerrados y sólo existe la opción de la pintura metalizada que vale 400 euros. El GL lleva 4 elevalunas, cierre y retrovisores eléctricos, control de crucero con limitador, airbags frontales, laterales y de rodillas, aire acondicionado, ESP y radio MP3 con USB. Cuesta, PIVE incluido, 17.795 euros.

El GLE añade llantas de aleación de 17 pulgadas, arranque sin llave, climatizador, Bluetooth, faros antiniebla, cristales sobretintados, asistente al arranque en pendiente y volante de cuero. Su precio con PIVE es de 19.295 y supone una opción muy equilibrada. El GLX añade navegador con cámara trasera, asientos calefactados, faros de xenón con luces de día de LED, faros y limpias automáticos y sensores de parking. Se factura a 20.895 PIVE incluido. Finalmente, el GLX-EL de pruebas costaba 23.195 euros al añadir llantas pulidas, tapicería de cuero y techo de cristal panorámico.

Nissan ofrece cuatro acabados en el Qashqai con el motor 1.5 dCi. El inicial es el Visia, ya bastante completo con aire acondicionado, ESP con asistente de arranque en pendiente, faros de día de LED, cuatro elevalunas, cierre y retrovisores eléctricos, radio con USB y Bluetooth, control de crucero, freno de mano eléctrico y sensor de presión de neumáticos. El precio, con Plan PIVE es de 20.550 euros.

Nuestra unidad era un Acenta que añade asiento regulable en altura, climatizador, llantas de aleación de 19 pulgadas, faros antiniebla, retrovisores abatibles eléctricos, doble fondo de maletero, faros y limpias automáticos y volante de piel. Cuesta, PIVE incluido, 21.750 euros.

Por encima quedan el N-TEC con cristales sobretintados, techo panorámico, acceso sin llave, cámara de retrovisión, navegador, sensores de parking y un pack de elementos de seguridad con cambio automático de luces cortas a largas, reconocimiento de señales, frenada de emergencia y aviso de cambio de carril. Precio: 23.850 euros. Cierra la lista el Tekna con asiento del conductor eléctrico, asientos calefactados, barras de techo, faros completos de LED, asistente de aparcamiento, cámara de visión perimétrica, control de ángulo muerto, detector de movimiento marcha atrás y detector de fatiga. Cuesta 25.850 euros y puede montar opcionalmente llantas de 19 pulgadas. El precio de la pintura metalizada para todos es de 488 euros.

El Hyundai IX35 ofrece cinco acabados. El básico, Essence, se factura a 19.440 euros con descuento y PIVE. Lleva seis airbags, cierre, elevalunas y retrovisores eléctricos, control de presión de neumáticos, ESP con asistente de arranque en pendiente y asistente de descensos, faros antiniebla, llantas de aleación de 16 pulgadas, faros de día de LED y radio CD con MP3 y USB.

El acabado Klass (21.740 euros con descuento y PIVE) añade volante de cuero, asientos calefactados, Bluetooth con control por voz y sensor de parking trasero y el Tecno (23.750 euros) tapicería mixta tela-cuero, climatizador, control de crucero, cristales sobretintados, llantas de 17 pulgadas, barras de techo, parabrisas térmico y sensores de lluvia y faros.

Nuestra unidad era un Go Brasil, una serie especial lanzada con motivo del patrocinio de la marca del Campeonato del Mundo de fútbol. Cuesta 24.350 euros y, sobre el acabado Tecno añade faros bi-xenón, llantas de 18 pulgadas y retrovisores de color negro. Hay una versión más equipada aún llamada con navegador y cámara de retrovisión que cuesta 25.250 euros. La pintura metalizada en estos Hyundai cuesta 450 euros.

En el Peugeot con este motor puede optarse por cuatro acabados, dos de los cuales son casi idénticos. El base es el Access, vendido desde 16.900 euros con PIVE y financiación de la marca y que queda por 18.640 sólo con el PIVE. Lleva seis airbags, control de crucero, ESP, radio CD, llantas de aleación de 17 pulgadas, aire acondicionado, retrovisores, cierre y cuatro elevalunas eléctricos y volante de cuero. Los acabados Active y Style, vendidos con descuento y PIVE a 19.830 y 20.030 euros respectivamente, añaden climatizador, USB y Bluetooth, sensor de aparcamiento trasero, faros y limpias automáticos y faros antiniebla. La diferencia entre ambos es que el Style lleva el pack Adventure, con protectores de bajos delantero y trasero y llantas bi-tono. Cortinillas parasol (100 euros), navegador (970) y el pack motricidad (200) son opcionales en ambos.

El Allure, al que correspondía nuestra unidad, se vende por 22.640 euros con Plan PIVE descontado y añade retrovisores abatibles eléctricamente, navegador, head-up display, sensor de presión de neumáticos, cortinillas parasol traseras, retrovisor anti-deslumbramiento, techo de cristal y llantas de 18 pulgadas que implican la eliminación de la rueda de galleta y su sustitución por un kit anti-pinchazos.

Opcionalmente, el equipamiento del Allure puede completarse con tapicería de cuero (1.680 euros), asiento del conductor eléctrico (460 y sólo con cuero), alarma (560), el pack Grip (200), el sistema de asistencia Peugeot Connect SOS (250), la cámara de retrovisión (200), el asistente de aparcamiento con medidor de espacios y la mencionada cámara (480) y un pack de video con dos pantallas, lector de DVD y dos auriculares inalámbricos (600). La pintura metalizada son 490 euros para toda la gama.

El Skoda Yeti está disponible en tres acabados y una serie limitada Edition que ofrece sobreequipamiento a buen precio y que es la versión más interesante. El base se llama Active y está disponible por 18.475 euros con PIVE que pueden llegar a ser 17.400 si se financia parte del valor del coche con la financiera de la marca. Esta versión tiene un equipamiento con algunas lagunas. Lleva airbags frontales y laterales pero no de techo ni de rodilla, faros antiniebla, aire acondicionado, cierre, elevalunas y espejos eléctricos y radio CD.

La versión Ambition suma llantas de aleación de 16”, retrovisores térmicos, volante de cuero, airbags de techo y de rodillas, Bluetooth, faros y limpias automáticos, control de crucero, linterna en el maletero y numerosos huecos y redes portaobjetos. Esta versión cuesta con PIVE 20.375 euros pero el Edition, más equipado (lleva llantas de 17 pulgadas, por ejemplo), es más barato. Vale 19.397 euros aunque se desconoce hasta cuándo estará disponible porque era una serie de lanzamiento.

La versión más equipada es la Elegance (21.575 euros). Añade llantas de 17 pulgadas, cristales oscuros, retrovisores abatibles eléctricamente, sensores de aparcamiento, asientos de cuero, control de descensos, climatizador, navegador, faros bixenón y portagafas.

Hay que recordar además que del Yeti existen esos mismos equipamientos en una versión normal (no Outdoor) que prescinde de la decoración “campera” y que cuesta exactamente lo mismo. Como la mayoría de coches del Grupo Volkswagen, Skoda ofrece múltiples opciones para completar el equipamiento de cualquiera de los tres acabados. Las más interesantes son la cámara de retrovisión (280 euros), el techo de cristal (1.155), el asistente de arranque en pendiente (85), el doble fondo del maletero (165), las mesillas tipo avión (110), el asistente de aparcamiento automático (1.060) o diferentes navegadores (entre 350 y 1.580 euros).

Finalmente, Kia ofrece su Sportage en cuatro acabados; Concept, Drive, Maracaná (esta es una serie limitada durante el Mundial de Fútbol) y Emotion.

El primero cuesta, con el PIVE descontado, 18.170 euros y lleva volante de cuero, asistente de arranque en pendiente y control de descensos vinculados al ESP, airbags frontales, laterales y de techo, llantas de aleación de 16 pulgadas, retrovisores eléctricos, faros antiniebla, faros diurnos de LED, aire acondicionado, sensor de lluvia, elevalunas, cierre y retros eléctricos y control de crucero.

Sobre este equipamiento, el Drive (nuestra unidad de pruebas) añade guantera refrigerada, cristales sobretintados, red de maletero, retrovisores anti-deslumbramiento, llantas de 17 pulgadas, sensor de parking trasero, climatizador y faros automáticos.

La serie Maracaná (22.011 euros con PIVE) lleva la instrumentación Supervision, faros de xenón, tapicería de piel, navegador, cámara de marcha atrás, dirección asistida FlexSteer (con tres niveles de asistencia) y equipo de audio Infinity mientras que el Emotion (24.711 euros) añade techo panorámico de cristal, asistente de aparcamiento automático, tapicería mixta de cuero y ante y acceso y arranque sin llave.

En definitiva, la valoración final del comparativo es que el Qashqai, aunque lo tendrá difícil, tiene mimbres para mantener el liderato de ventas en este segmento. Su evolución respecto a la generación anterior es notable y es posiblemente, el coche más equilibrado del conjunto. En nuestro comparativo se ha impuesto en la valoración de la parte delantera del habitáculo pero en el resto de apartados ha estado siempre entre los mejores y es el que más calidad percibida ofrece.

En el resto de apartados, el Suzuki destaca por su motor (tanto en rendimiento como en consumo) mientras que al Skoda no hay quién le tosa en el apartado de modularidad de la parte trasera y del maletero.

Los dos modelos coreanos, destacan por su equilibrio general y por su buena relación precio-equipamiento además de por el espacio que ofrecen en plazas traseras y maletero al ser los más grandes y finalmente, el Peugeot, el menos "off-road" de todos es quién ofrece un equipamiento más completo y una buena relación calidad-precio con los descuentos en vigor.

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E
Edson

El suzuki S-cross el mejor.

M
Miguel

quién iba a decirlo.... El Suzuki el mejor prácticamente en todo..... Bravo

s
silvestre

hola buenas, nada mas decirles que el Reportaje les salio fenomenal, muy completo... les felicito y gracias.

A
Anonimo

yo entiendo que la gente de sus opinion en pos de dar a conocer sus ideas y pensamientos acerca de un tema; pero porfavor me parece una completa falta de compresión lectora y auditiva que critiquen tanto este segmento SUV/URBANO comparandolo con el segmento dedicado a las 4x4; no hay que ser un genio para darse cuenta que ninguno de estos vehiculos esta realmente hecho para uno de esos camino dificiles, osea, me explico.. si tienes un conocimiento basico te daras cuenta que el toque/potencia/cilindrada/peso/tamaño promedio de este vehiculo no pegan mucho, compararlos con un 4x4 no es mas un comentario irrelevante que a nadie le interesa, y bueno.. en mi opinion si alguien esta buscando un vehiculo en este segmento es porque efectivamente quiere un clio mas alto respondiendo a un comentario mas abajo. Simplemente el cliente o comprador quiere algo espacioso, mas alto, con un equipamiento algo distinto o adaptado de otra manera que no esta presente en un sedán corrientes.

Anónimo

quien diria que el suzuki seria de lo mejor

Qd
Que decepcion...
| 4 respuestas

A mi mujer le gusta este tipo de coches, el otro dia me dejaron probar el sportage...la sensacion que transmite en su interior no tiene nada que ver con un coche grande, muy al contrario, solo es un clio o un seat ibiza elevado...asi de claro, tengo un espace y no hay color, de conducir un avion a meterte en un cuchitril..muy chulos por fuera pero una caca por dentro....esta claro que solo son sucedaneos de un todoterreno de verdad...land rover, Toyota land cruiser, tuareg...etc...claro esta ,coches de otra categoria.

ps
ps si

#154 ps si, que decepción que un auto del doble de precio tenga mas calidad!!!!

Anónimo

#154 Cada uno que se compre el coche que le guste o le venga bien, y dejemos de criticar gratuita y despectivamente.

J
Jose

#154 El Espace sera espacioso, porque no le veo otra virtud, en general los franceses no saben hacer coches, ni son resistentes ni eficientes y Renault en concreto más caro que una mortaja para lo que ofrece.

a
anonimo

#164 Tu comentario es absurdo.

RT
Raul Taveras

Estaba indeciso entre la kia y la hiunday por el tema.confort precio y mecánica, me decidí finalmente por la kia, me siento contento hasta ahora, es muy cómoda, elegante y amplia. Y más economica que la hiunday

JP
Juan Pablo M.

Fui a ver la Nissan Qashqai y a punto de comprarla, me dí cuenta de una falla de fábrica. Los asientos traseros están casi en los 90 grados, lo que hace incómodo irse sentado atrás. Es un vehículo grande y lo mínimo que se le exige es confort, sobre todo para la familia que irá sentada atrás. Basta con fijarse en otros modelos y verán que son más de 90 grados de inclinación, lo que los hace más cómodos para viajar. Lamentable que por un tema de diseño más amplio de la maleta, no hayan dado mayor inclinación a los asientos traseros. Hasta el propio vendedor reconoció lo incómodo que es ir sentado atrás. Espero que este detalle le sirva a alguien, antes de comprar algo que no dará confort a su familia en un viaje que debería ser placentero.

A
A.J.

Yo dude entre varios de este tipo,incluyendo el Toyota RAV 4 y el MazdaCX5(creo que estas son las siglas).Finalmente me decante por esa relacion calidad precio del 3008 ALLURE por ser el mas equipado.Seguramente no tenga el rendimiento de otros pero me encanta y estoy muy contento para "lo que yo necesito".Un saludo.

J
Juan

¡Menudo mejunje! Se me pinchó la rueda de mi coche nuevo (no tenía ni un mes). Un bordillo de una acera hizo un boquete, en el taller me dijeron que menos mal que no había usado el maravilloso kit antipinchazos, porque, no sólo no sirve para nada, sino que además lleva 4 ó 5 horas de taller volver a limpiar la llanta. Una rueda de repuesto igual que las que tengo no cabe en el hueco que tiene el coche al efecto, una rueda de galleta sólo sirve para ir a trancas y barrancas hasta el taller (depende dónde te pille el pinchazo). El lobby de los fabricantes de coches que ha impuesto esta ley a nivel europeo, tiene un morro que se lo pisa ruedas más grandes y más caras de las que no hay stocks en los talleres, por lo que tienes que esperar varios días para que te lo arreglen y un viaje convertido en pesadilla por culpa de la avaricia de esta gente a los que les importa un bledo sus clientes.