La ‘Triple Alianza’ -Renault, Nissan y la recién incorporada Mitsubishi- ha desvelando sus planes para el desarrollo de su oferta de vehículos eléctricos con una notable ampliación de su oferta. El grupo basará su estrategia en dos ejes principales: un ataque en toda regla al segmento de los ‘midsize eléctricos’, es decir vehículos de tamaño medio, como un posible Nissan Qashqai eléctrico y las sinergías entre el Nissan Leaf y el Renault Zoe, que ahora son vehículos distintos y que deben pasar a emplear plataforma y motorización comunes.
La apuesta por el segmento ‘midsize’ es muy ambiciosa: vender entre 400.000 y 500.000 a partir de 2020. Esta apuesta pasa por dos aspectos clave: una nueva plataforma común para todos los modelos y, sin olvidar las berlinas, poner el acento en las carrocerías tipo SUV, las de mayor demanda del mercado. El apartado de las plataformas es clave ya que en un segmento donde el coste es una de las principales razones de no compra, trabajar con plataformas diferentes ha supuesto sobrecostes de desarrollo y también mayores costes de producción.
El Leaf acaba de ser renovado, así que está por ver si en un par de años tenemos un nuevo Zoe o este aspecto del plan se ‘retrasa’ a la siguiente generación En 2017 entre Leaf y Zoe, la Alianza ha vendido 93.000 vehículos eléctricos, un aumento de un 11% con respecto a 2016. Obviamente esta cifra debe aumentar notablemente de aquí a 2020.
En conjunto, el proyecto comprende una oferta de 12 modelos eléctricos en 2022. Una inversión cuantiosa para la cual es imprescindible la sinergia entre las tres marcas. El trabajo conjunto permitirá disminuir hasta un 30% los costes de desarrollo.
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Más adelante también se atacará segmentos mayores, pero siempre de forma conjunta. Como de forma conjunta -y en ello Mitsubishi tendrá un papel clave- se desarrollarán nuevos motores y se trabajará en el tema de las baterías de ion-lition.
Vistos los planes de la ‘Triple Alianza’, parece claro que el desarrollo de la comercialización de vehículos eléctricos será muy importante, pero no tan rápida como algunos analistas tenían previsto inicialmente. Con todo, hacia 2022, casi un 20% de los coches comercializados por Nissan, Renault y Mitsubishi podrían ser eléctricos.
