Hyundai acaba de anunciar el próximo relevo del SUV Kona. La segunda generación de este coche empezó con el diseño de la versión eléctrica y, a partir de ahí, se desarrolló el resto de las versiones, tanto la híbrida como la de gasolina. La plataforma es una evolución de la existente, es decir, no es la específica para eléctricos de los Ioniq 5 e Ioniq 6, por ejemplo. El coche se empezará a fabricar en el primer semestre de este año y las primeras unidades deberían llegar a nuestro mercado antes del verano.
El Hyundai Kona 2023 prosigue la evolución estética presentada con el restyling de la primera generación del Hyundai Kona y exhibe un diseño todavía más anguloso, con una personalidad más definida si cabe. Su transformado exterior plantea como claves unas finísimas ópticas delanteras y traseras, totalmente horizontales, las marcadas líneas de tensión que recorren los laterales del vehículo, y unos pasos de rueda particularmente voluminosos y que incorporan tanto los faros delanteros como los pilotos traseros igual que sucede con el modelo actual. A partir de aquí, cada tipo de motorización -asunto que trataremos más abajo-, se caracterizará por lucir elementos específicos en su carrocería.
Aparte de un profundo cambio de imagen, la segunda generación del SUV urbano de Hyundai trae consigo un crecimiento de tamaño. Ahora es claramente más grande, pasando a medir 4,36 metros de largo (15 centímetros más) por 1,83 m de ancho (2,5 cm más). La distancia entre ejes también ha aumentado notablemente hasta llegar a los 2,66 m (6 cm más). Este aumento de dimensiones, además de situarlo en una posición equidistante entre sus hermanos, el Hyundai Bayon y el Hyundai Tucson lo acerca mucho al que se convertirá, por muchos motivos, en su rival más próximo: el Kia Niro, con el que comparte plataforma y motores.
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El habitáculo del nuevo Hyundai Kona
Además de un mayor espacio para los ocupantes, el habitáculo ofrece una ambientación muy cambiada, que recoge elementos de diseño ya vistos en el Hyundai Ioniq 5. Entre ellos, el salpicadero totalmente horizontal y la instrumentación digitalizada con dos grandes pantallas de 12,3 pulgadas de diagonal. Por fortuna, se mantienen los mandos giratorios para el climatizador. Lo que sí cambia es la posición del cambio, que pasa a estar tras el volante, de modo que desaparece de la consola central que se aprovecha mejor para el almacenaje.
Hyundai anuncia unos asientos de elevado confort y un mayor espacio para la segunda fila donde el piso es completamente plano (solo en la versión eléctrica) y los respaldos son reclinables. Por su parte, el maletero crece hasta los 466 litros de capacidad y mantiene un piso que permite situarlo a dos alturas manteniendo siempre un doble fondo donde entraría una rueda de recambio de emergencia en el caso de los modelos de combustión.
¿Qué motores llevará el nuevo Hyundai Kona?
Pese a todos los cambios mencionados, el nuevo Hyundai Kona preservará su variada oferta de mecánicas que incluye opciones de gasolina, híbridas y eléctricas, además de una variante de estilo deportivo N Line. lo que no existirá es la renovación del modelo de altas prestaciones N -aquí nuestra videoprueba del actual Hyundai Kona N- que no tiene cabida en la futura gama.
La variante híbrida se mantendrá como hasta ahora, con un motor de 141 CV, mientras que las de gasolina montarán el motor de tres cilindros y un litro de 120 CV con hibridación ligera y cambio manual o automático y el 1.6 de 198 CV que será el único que permita disponer de tracción a las cuatro ruedas con diferentes modos de conducción off-road. Desaparecen definitivamente los diésel, que ya no se vendían desde el último rediseño del modelo saliente.
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El acabado N-Line es específico e incluye un diseño frontal distinto, inserciones decorativas, retrovisores y techo en negro (este último opcional), alerón de techo, difusor inferior, escape doble y llantas de 19 pulgadas entre otras diferencias.
Así es el nuevo Hyundai Kona Eléctrico
El nuevo Kona eléctrico mejora sus características técnicas y ahora dispone de un motor de 160 KW (218 CV) alimentado por una batería de 65,4 kWh. En ambos casos hay una leve mejora, de 10 kW en la potencia del motor y de 1,5 kWh en la capacidad de la batería. Hyundai anuncia una autonomía de 490 km, la más elevada entre los SUV del segmento B. La marca comercializará una segunda variante más modesta con motor de 115 kW (155 CV) con una batería más pequeña de 48,4 kWh para una autonomía de 342 km, de la que no está decidido aún si llegará o no a nuestro mercado.
Hyundai anuncia para este coche el preacondicionamiento térmico de la batería antes de la recarga, una trampilla de recarga iluminada y calefactada que permitirá recargar el coche hasta a 30 grados bajo cero una carga del 10 al 80% en 41 minutos. Este coche dispondrá, además, de un sistema de pedal único con la función i-Pedal y, como novedad, un sistema de regeneración de energía inteligente que adaptará la intensidad de la frenada regenerativa al tipo de vía por la que se circule y al estado del tráfico.
Además, dispondrá del sistema que permite recargar aparatos externos con enchufes en el interior y el exterior que ya conocemos del Ioniq 5 y, entre el equipamiento anunciado, se estrena un head-up display que complementará a la instrumentación convencional. Finalmente, el coche puede abrirse, cerrarse y ponerse en marcha desde una aplicación de móvil que funciona como llave digital. Entre las ayudas a la conducción destacar el cruise control inteligente basado en la navegación, el sistema de aparcamiento que permite mover el coche desde fuera o las cámaras de 360 grados.
Precios del Hyundai Kona 2023
En definitiva, un coche que crece y que, a pesar de ser completamente nuevo, podríamos cualificarlo de continuista ya que tiene una estética muy similar a la del modelo actual, aunque completamente reinterpretada y con un interior a la moda, y una oferta de motores que mantiene los de combustión híbridos, tanto ligeros como convencionales y la variante eléctrica que ahora mismo suma el 40% de las ventas en Europa y que debe alcanzar el 60% al final de vida del modelo. Y es que esta transición al eléctrico es definitiva, nos guste o no. Los precios todavía no han sido fijados, pero atendiendo al tamaño del coche, seguro que serán superiores a las de las versiones actuales y estarán en línea con los del Kia Niro.
El coche no es feo. Por lo menos la versión N Line. Se ve mejor en la realidad que en fotos.