Jaguar XFR-S: Ya a la venta

Jaguar pone a la venta en el mercado español la versión más radical de su berlina XF. Considerando las especificaciones técnicas (simplemente superlativas) del XFR-S, y el prestigio de su fabricante, quizás no os soprenda su precio:

JAGUAR XFR-S 5.0 V8 550 CV: 126.202 €

... ¿O quizás sí? En cualquier caso, os describimos a continuación las principales características de este superdeportivo desarrollado por la división especializada ETO (Engineered To Order) y que por fin aterriza en nuestro país.

Jaguar también busca el límite

La marca británica ha decidido acentuar su deportividad y atacar un público distinto del habitual. Empezó con el volcánico XKR-S que probamos en Coches.net hace unos meses, continuó con el nuevo e interesante F-Type descapotable y ahora, en el Salón de Los Angeles, presenta una evolución extrema de su berlina deportiva XF, el XFR-S, un coche nacido para plantar cara al BMW M5, al Mercedes E63 AMG e incluso al Audi RS6. Esta berlina superdeportiva dispone del habitual motor de 5 litros de la marca en la misma configuración que se monta en el XKR-S, es decir, con 550 CV de potencia y 680 Nm de par. Una versión "descafeinada" de este propulsor, con 510 CV, se monta en los XFR, XKR, del que probamos la versión descapotable, y XJ V8 SC además de en el nuevo Range Rover y en el Range Sport. Se trata de un V8 sobrealimentado mediante un compresor volumétrico, una técnica muy "british" que ofrece un empuje constante desde muy bajas revoluciones.

Como en el resto de coches citados, la caja de cambios capaz de aprovechar el potencial del motor dispone de 8 velocidades (con función Quickshift, tecnología desarrollada por Jaguar para el F-Type) y se ve ayudada por un diferencial trasero electrónico. Como no podía ser de otra manera, pese a que Jaguar dispone ya de la tecnología de tracción a las cuatro ruedas recientemente estrenada en los XF y XJ, el XFR-S es un coche de propulsión al eje trasero, de ahí las bonitas derrapadas que vemos en algunas de las fotos de la galería de imágenes. Los que sufren en esas imágenes son los neumáticos Pirelli de dimensiones colosales; 265/35 en el eje delantero y 295/30 en el trasero, colocados sobre unas llantas 'Varuna' de 20 pulgadas.

Con esta mecánica, el XFR-S acelera de 0 a 100 km/h. en 4,6 segundos y alcanza una velocidad autolimitada electrónicamente a 300 km/h, lo que convierte a este devorador de asfalto en la berlina de la marca más rápida de todos los tiempos.

Para hacer frente a semejantes prestaciones, la marca ha endurecido la suspensión (muelles y amortiguadores son ahora un 30% más rígidos), ha aumentado el tamaño de los frenos (380 mm delante y 376 mm detrás) y ha dotado al coche de diferentes retoques aerodinámicos, entre ellos un vistoso alerón trasero que puede ser sustituido, a petición del cliente por otro menos eficaz pero, eso sí, más discreto.

Con esta mecánica de 550 CV, el XFR-S acelera de 0 a 100 km/h. en 4,6 segundos

Y hablando de discreción, los propietarios de esta nueva versión, que se fabricará en serie limitada, lo tendrán difícil para pasar desapercibidos. Personalizado con una parrilla en negro mate y sus apéndices aerodinámicos además del logotipo frontal y trasero R-S en los mismos colores que el Skoda Octavia RS -a Ian Callum, diseñador de la marca, no le hizo mucha gracia que se lo recordáramos en la presentación del XKR-S pero no ha hecho nada por cambiarlos- el coche está disponible en cinco colores; gris oscuro, blanco, negro y los colores de armas francés (ese azul de las imágenes al que llaman French Racing Blue) e italiano (un rojo pasión que lleva por nombre Italian Racing Red), lo que no deja de ser sorprendente. No porqué sean colores feos sino por la ausencia del verde oscuro British Racing Green que, sinceramente, le iría que ni pintado.

Jaguar no dejará de lado en este coche su componente de marca de lujo y lo dotará con, entre otras cosas, un equipo de sonido Meridian con 825 watois de potencia y 18 altavoces, un método eficaz para acallar el rugido del V8, trasladado al interior mediante un tratamiento acústico similar al del BMW M5 pero más auténtico.