En color infierno verde
El color verde AMG green hell magno honra al infierno verde, el mote que recibe el mítico bucle norte del Nürburgring, el Nordschleife. No en vano el Mercedes-AMG GT R ha sido intensamente probada en esta histórica pista alemana.
Las vías delanteras y traseras son más anchas para aumentar el agarre y permitir un paso por curva mucho más veloz. La calandra recuerda claramente a la del AMG GT3 de competición con sus lamas verticales. El alerón trasero también es otro elemento que parece derivado directamente de los circuitos.
En sus llantas de aleación forjada ultra-ligeras calza neumáticos de altas prestaciones para optimizar al máximo su capacidad de tracción. En el tren trasero cuenta con dirección activa, el control de tracción cuenta con nueve posiciones y los amortiguadores también disponen de una gestión electrónica.
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Bajo su largo capó delantero encontramos un V8 de 4 litros biturbo que entrega 585 CV a 6.250 rpm y nada menos que 700 Nm de 1.900 a 5.500 rpm. Según el fabricante declara un 0 a 100 km/h en 3,6 segundos y una punta de 318 km/h.
Dios que cosa más fea...el color, por lo demás es tremendo, todo él.