Volver a nacer
Nissan ha restaurado por completo una de las unidades más icónicas de su historia en competición: el Nissan Patrol número 211 con el que Miguel Prieto y Ramon Termens corrieron el París-Dakar de 1987. Con este coche lograron la victoria en la categoría diésel y fueron los primeros en colocar un vehículo diésel entre los 10 primeros clasificados.
Este Nissan Patrol “Fanta Limón”, como se conoce por la esponsorización que recibió el equipo ese año fue, junto al Nissan Patrol de los hermanos Jorge y Hansi Babler, uno de los estandartes de la imagen de la marca en las competiciones off-road a finales de los años 80.
La historia de este Patrol comenzó en 1986, cuando Nissan Motorsport decidió arrancar un proyecto para tomar parte en las principales competiciones off-road del planeta, la mayoría centradas en África. La base del coche de competición no podía ser otra que el Nissan Patrol, que esos años se comercializaba con éxito en toda Europa. Los responsables de su desarrollo fueron ingenieros del departamento técnico de Nissan en Barcelona.
Los éxitos vinieron rápido, y la pareja Miguel Prieto/Ramon Termens consiguió en 1986 victoria absoluta en el Rally de los Faraones. El coche también obtuvo una tercera posición en la Baja Aragón y una cuarta posición en el Rally de Tunez.
Pero el principal objetivo era el París-Dakar, de forma que Nissan alineó en la salida a dos Patrol: el número 211 de Miguel Prieto y Ramon Termens, y el número 212 de Jorge y Hansi Babler. El camión encargado de ofrecerles asistencia abandonó en la segunda etapa, por lo que tuvieron que hacer el rally sin recambios. El coche de los hermanos Babler abandonó después de un vuelco, y fue el de Miguel Prieto, el número 211, el que llegó al Lago Rosa como primer clasificado en la categoría diésel.
Inactivo durante 30 años
Este mismo coche es el que Nissan ha vuelto a poner en marcha, después de un intenso trabajo de restauración a cargo de un equipo de ingenieros del Centro Técnico Europeo de Nissan en Barcelona.
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Este Patrol estuvo durante tres décadas en el Museo de Salvador Claret, en Sils (Girona) y al parecer, fue encontrado en un estado deplorable. Juan Villegas, técnico del equipo de restauración, afirma que “el motor estaba en unas condiciones terribles. Era imposible arrancarlo y la corrosión había afectado a muchas de sus piezas. El eje delantero estaba dañado, aunque la peor parte se la llevó la instalación eléctrica, que había sido dañada por las ratas”.
Un equipo formado por 8 personas trasladó el coche a las instalaciones de Nissan en Barcelona, y durante dos años y medio aproximadamente se dedicaron a ratos libres a la restauración, buscando viejas piezas de recambio originales por toda Europa.
No fue hasta el pasado mes de noviembre que el coche estuvo totalmente listo para la primera prueba dinámica, que tuvo lugar en las dunas del Erg Chebbi en Marruecos.
Pedro Díaz Illan, Jefe del equipo de ingenieros electrónicos encargados del proyecto, y único miembro del equipo original de 1987 que desarrolló este Patrol, declaró que “fue un momento de orgullo. Hemos puesto cerebro, corazón y alma en este proyecto, y no ha sido fácil. Pero ver el coche de nuevo en el desierto ha sido fantástico”.
Que hayan restaurado esta joya a ratos libres y fuera de horario de trabajo es para quitarse el sombrero, seguro que son gente que aprecia este vehículo y también dice mucho de lo que FUE la marca en España, que ahora Nissan no se apunte el mérito ni haga campaña publicitaria..... También quiero quitarme el sombrero por los que a día de hoy mantenemos patrol,s de la misma quinta y nos tenemos que buscar la vida ...