Volkswagen Golf GTI: La experiencia es un grado

Volkswagen ha ido sumando generaciones y generaciones de su aclamado Golf GTI, hasta llegar a la sexta. Son 35 años de evolución, que han dado pie incluso a una versión conmemorativa y exclusiva, que acaba de llegar a nuestro mercado. Los principios sobre los que se ha diseñado el Golf GTI han respondido históricamente a una misma filosofía: ofrecer un coche con un excelente chasis, deportivo pero no por ello incómodo; un motor potente y prestacional pero a la vez de agradable respuesta; y una estética no excesivamente vanguardista, pero indudablemente atractiva. La perfecta combinación de estas características, sobre el papel antagónicas, junto con el equilibrio que ofrece todo el conjunto, han sido parte del secreto del éxito de este modelo. El Volkswagen Golf GTI es un coche agradable de conducir tanto en el día a día como en viajes en compañía o bien en salidas "a ritmo" por nuestra carretera favorita. Un equilibrio de aptitudes que es el verdadero valor añadido que ofrece este modelo frente a cualquier otro. Su buena habitabilidad, notables acabados y sobre todo, su potente motor de 210 CV, dan mucho juego en cualquier escenario.

PVP: VOLKSWAGEN Golf GTI DSG 2 DI-D 32.420 €

Lucir el logo GTI en el portón trasero siempre ha sido una seña de identidad. GTI o "Gran Turismo Inyección" hace referencia a un tipo de vehículos compactos, ligeros, potentes, en teoría asequibles para el gran público (aunque a decir verdad, nunca han sido precisamente baratos). Las siglas GTI cobran en el Golf todo su sentido, al ser este modelo el que provocó un punto de inflexión en las ventas de GTI's en todo el mundo. Si observamos detenidamente un Volkswagen Golf GTI de última generación veremos que su evidente modernidad guarda algunos detalles que nos recuerdan a los Golf GTI de los años 80. Y es que el equipo de diseño de Walter de Silva, jefe de diseño en Volkswagen, siempre ha tenido muy claro que un Golf tiene que parecer precisamente eso, un Golf. Así, tanto el tamaño (4,21 metros de longitud) como las formas de la carrocería siguen manteniendo algunos puntos en común con los Golf de generaciones previas. La parrilla negra brillante en forma de V, las llantas de aleación ligera pulidas de 18 pulgadas con neumáticos 225/40 ZR 18 (opcionales, en nuestra unidad de pruebas), el difusor negro o los dos tubos de escape cromados en la zaga y la menor altura de la carrocería (22 milímetros más baja en la parte delantera y 15 mm. más baja en la trasera) identifican un GTI frente al resto de versiones de la gama Golf y le dan el aspecto deportivo que siempre va unido a este modelo.

Al sentarnos en el coche percibimos en el ambiente esa misma sensación deportiva, gracias básicamente a los asientos tipo baquet que envuelven y sujetan perfectamente nuestro cuerpo, o los pedales de acero fino pulido, el pomo del cambio de aluminio o el agradable volante revestido en cuero con el emblema GTI en el centro. En su parte posterior vemos unas levas de cambio, señal de que estamos ante un coche que quiere ofrecernos buenas prestaciones y sensaciones. El diseño del salpicadero tira a sobrio, pero lo compensa con unas sobresalientes terminaciones y una calidad de materiales notable. Detalles como el reposabrazos central delantero con ajuste longitudinal, los cajones bajo el asiento del acompañante o los abundantes huecos para depositar objetos contribuyen a una agradable vida a bordo. Los pasajeros de atrás gozan de un espacio correcto teniendo en cuenta el tamaño del coche. El acceso no es complicado, pero no olvidemos que se trata de un dos puertas, que obliga a abatir el asiento del conductor o el pasajero (de forma fácil, en una sola operación). No es un coche con un enfoque familiar, está claro. Pero haciendo honor al equilibrio que caracteriza este modelo, tampoco se trata de un coche pequeño y angosto.

Uno de los puntos fuertes del Volkswagen Golf GTI radica en su motor de gasolina de cuatro cilindros y 210 CV. Este motor se caracteriza por su agradable respuesta, muy elástica y lineal en toda la gama de revoluciones, y por supuesto, por sus prestaciones. Es capaz de estirar más allá de las 5.300 r.p.m. en un santiamén (hace el 0 a 100 km/h en 6,9 segundos), y con él teóricamente podríamos alcanzar 240 km/h. Se asocia muy bien con el cambio automático DSG de seis velocidades, reconocido por su velocidad en la inserción y transición entre marchas, especialmente en modo Sport. El inconveniente de este motor es su elevado consumo, para lo que se estila hoy en día. En este punto, el equilibrio no está tan conseguido. Teóricamente, el consumo medio de este GTI se situa en 7,3 l/100 km. En nuestra prueba nos situamos por debajo esa cifra en carretera y autopista a velocidad constante (6,8 y 7 l/100 km respectivamente). En ciudad el coche se va a los 12 l/100 km. de media, lo que provoca que la aguja que indica la carga del depósito de combustible corra más de lo deseado.

Arrancamos el coche mediante pulsador, un detalle de modernidad que, en este caso, sólo obliga a pisar antes el freno. El coche nos responde con un agradable sonido proveniente de su motor de cuatro cilindros, apenas imperceptible al ralentí. En los primeros compases, mientras esperamos que el motor coja temperatura, el coche no aparenta tener los 210 CV que atesora. Y es que si optamos por un estilo de conducción tranquilo, el motor responde con suavidad, sin brusquedades. Podemos llevarlo como fuese un Golf TSI de 122 CV se tratase. Y es que el coche no se encuentra especialmente incómodo rodando a bajas rpm. Si nos decidimos por un estilo de conducción más agresivo, este Volkswagen muestra rápidamente toda su caballería, que llega de forma progresiva y rápida, hasta más allá de las 6.000 r.p.m. Este motor de dos litros es muy elástico y potente, y está muy bien asociado al cambio automático DSG, que permite exprimir al máximo sus prestaciones. Ya sea en modo D como en modo secuencial, la transición entre marchas es muy rápida, y no permite que el coche baje de vueltas en plena aceleración. Es especialmente placentero usar el cambio en modo secuencial, accionando las marchas mediante las levas que tenemos detrás del volante. En las aceleraciones, este Golf nos deleita con un sonido adictivo, proveniente de su particular sistema de escape, diseñado especialmente para ofrecer esa acústica. Para estirar todavía más las marchas y acentuar esas sensaciones al volante, podemos optar por activar el modo S "Sport" del cambio, y convertir así el pequeño Golf en una máquina de devorar curvas en nuestra carretera favorita. El chasis hace gala de una estabilidad impecable. No tan sólo por el tarado de su suspensión, bastante firme, aunque también de respuesta un tanto seca. Sino también por la efectividad de su generoso calzado (llantas de 17" con neumáticos 225/45 R17, de serie, 225/40 ZR 18 en nuestra unidad de pruebas) y la acción del bloqueo de diferencial electrónico (XDS), que evita pérdidas de tracción al trazar las curvas, llevando el coche sobre raíles. No hay balanceos, y el negociado de los virajes puede hacerse de forma muy intuitiva y rápida, con gran agilidad y total seguridad. El tacto de la dirección, directo y preciso, contribuye a ello. El pequeño volante de deportivas formas, forrado en cuero, y unos asientos de mullido firme y excelente sujeción, acaban de rematar un conjunto ideal para disfrutar de la carretera.

El Volkswagen Golf obtuvo cinco estrellas en las puntuaciones de los tests de seguridad EuroNcap. Equipa airbags frontales, laterales delanteros, laterales de cortina delanteros y traseros, de rodilla, control de estabilidad y tracción, asistente de frenada, ABS, EDS y ASR. También equipa de serie dos apoyacabezas activos con sistema WOKS (antilatigazo). En cuanto a sistemas de ayuda a la conducción, destacan el sistema de ayuda al aparcamiento Park Assist, que maniobra el coche de forma automática; o el equipo de faros bi-xenón con iluminación dinámica en curva, entre otros.

El Volkswagen Golf GTI sigue siendo, después de 35 años, una de las referencias en el segmento de los compactos deportivos. Si tienes oportunidad de conducirlo, te cautivará su excepcional comportamiento general. La marca germana ofrece un coche que hereda el espíritu deportivo de los primeros Golf, pero con todo el paquete de avances de confort, seguridad y dinámica, que hacen la conducción más placentera. Si buscas un compacto con estética deportiva, que de buenas sensaciones al volante y haga gala de una calidad general de construcción, el Golf GTI es una apuesta segura. No obstante, el precio de tarifa de este coche está un poco por encima del de su competencia más directa, al superar los 30.000 euros en versión con cambio manual, o llegar a los 32.400 en la versión que hemos probado, con cambio DSG. Volkswagen hace valorar su producto, está claro. Nosotros pensamos que es justificado, vista la calidad general de todo el conjunto. De hecho, lucir el logo GTI más original del mercado en el portón trasero tiene su precio.