Audi busca los límites de la conducción autónoma
Poco importa si nos gustan más o menos. Los sistemas de conducción autónoma forman parte inseparable del futuro de la automoción. Y todo apunta a que, cuando lleguen por primera vez al mercado al inicio de la próxima década, los coches capaces de conducirse a sí mismos irán robando terreno, de manera inexorable, a los automóviles convencionales.
Los principales fabricantes han encontrado en la conducción autónoma un nuevo escaparate donde lucir sus habilidades tecnológicas; y lo que en un principio
La conducción autónoma es un nuevo escaparate para los grandes fabricantes.
podíamos considerar como ciencia-ficción aplicada al automóvil se ha convertido en una alocada carrera hacia el futuro en la que nadie quiere llegar en segunda posición.
En Coches.net ya os hemos mostrado los últimos avances presentados por Volvo, Ford, Renault, Nissan, Honda, Toyota, BMW y Mercedes-Benz. Pero ¿y Audi? ¿Acaso se ha quedado fuera de este juego? En absoluto. De hecho, su juego consiste en descubrir los límites de la conducción autónoma, llevando hasta el circuito lo aprendido de su experiencia en la carretera.
Un RS7 sin conductor para hacer historia -o fracasar en el intento-
Audi ha desarrollado el automóvil autónomo más deportivo hasta la fecha, el ‘RS7 piloted driving concept car’. Sobre la base del RS7 Sportback de producción (una bestia de 560 CV con tracción a las cuatro ruedas), la casa de Ingolstadt ha preparado un complejo equipamiento informático que conecta los sistemas de dirección,
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El Audi RS7 sin conductor pretende completar el trazado de Hockenheim en 2'10"
transmisión, y frenada, y que combina cámaras 3D con transmisores de radiofrecuencia y localizador GPS para guiarse por la pista sin asistencia humana.
La marca de los cuatro aros ha elegido como escenario para su presentación la última carrera del prestigioso Campeonato Alemán de Turismos (DTM), que tendrá lugar en próximo domingo 19 de octubre en el conocido autódromo de Hockenheim. Pero este RS7 sin conductor no está aquí para pasearse por el circuito, ni mucho menos. El plan previsto para su exhibición en las horas previas a la carrera de DTM es completar el trazado en un tiempo de sólo 2 minutos y 10 segundos. Casi nada.
En caso de cumplir con la marca prevista -más le vale a Audi conseguirlo, con sus mayores rivales enfrente y todo el mundo observando-, este ambicioso reto anticipa otro para el futuro: ¿será un un coche autónomo capaz de rodar más rápido que a manos de un piloto profesional?
Veo por aquí descendientes de los mismos que afirmaron que la televisión no tenía futuro porque a ver quién se iba a pasar horas mirando ese trasto, o que la aviación era poco más que algo anecdótico y sin aplicación comercial... Visionarios, visionarios everywhere.