Kia XCeed vs Toyota C-HR: Duelo de crossovers

Enfrentamos dos claros ejemplos de crossovers: El nuevo Toyota C-HR, que acaba de lanzarse al mercado, y que es el segundo híbrido más vendido del mercado, y el Kia XCeed, que aunque no tiene el éxito del Toyota también se sitúa entre los híbridos, en este caso microhíbrido, más matriculados en España.

Aunque el aspecto de ambos sea parecido, el de crossover con aires deportivos, en realidad son dos coches con tecnología bastante diferente: uno es híbrido convencional, el Toyota, el otro es microhíbrido, el Kia. Por otro lado, el C-HR tiene 140 CV y el XCeed 160.

El Kia XCeed nació hace tres años como la variante crossover del compacto Kia Ceed, y ahora es uno de los pilares de las ventas de Kia en España. Hace poco recibió pequeños cambios en su diseño, que afectó a los faros, que son más estilizados, de tipo LED y con los antinieblas integrados. Por supuesto, también se incorporó el nuevo logo de Kia, una nuevas llantas de 18 pulgadas y unos paragolpes deportivos, que se montan en el acabado GT Line, el que corresponde a nuestra unidad de pruebas. En el Kia XCeed vemos la típica línea cupé en la que el techo va descendiendo, en caída, hacia la zaga, acabando en un discreto spoiler. La trasera de este crossover es bastante convencional, no demasiado estridente, con los elementos de diseño justos y necesarios. De hecho, no tiene a la vista los tubos de escape, ni tan solo simulados. Eso sí, el difusor y las nuevas y llamativas formas lumínicas de las ópticas LED dan un toque algo más atrevido.

Bajo su capó hay un motor de gasolina de 4 cilindros y 1500 centímetros cúbicos que da 160 CV. Es un motor microhíbrido. Es decir, se acompaña de un pequeño motor eléctrico que funciona a una tensión de 48 voltios y de una pequeña batería que apoya al motor térmico en los arranques y en momentos puntuales para reducir el consumo. Se une a un cambio automático de 7 velocidades. El Kia XCeed tal cual lo veis, con acabado deportivo GT Line y motor 1.5 T-GDI cuesta de tarifa 35.300 euros.

Enlace a la oferta de Kia XCeed nuevo en Coches.net

Enlace a la oferta de Kia XCeed de KM0 en Coches.net

Enlace a la oferta de Kia XCeed de segunda mano en Coches.net

Por otro lado, traemos a este comparativo la segunda generación del Toyota C-HR, un modelo importantísimo para la marca japonesa desde que se lanzó al mercado hace ya 7 años. Toyota fue muy atrevida al presentar este crossover con diseño rompedor, que en un principio generó dudas pero que al final demostró ser todo un superventas. La marca japonesa ha vendido más de 800.000 unidades en todo el mundo, 100.000 de ellas en España. En esta nueva generación, el C-HR es fiel a la línea vanguardista que lo caracteriza, pero incorpora la nueva línea de diseño de Toyota, que se reconoce por los faros con luces diurnas en forma de C, un frontal con diseño de morro de tiburón, las formas diamantadas en los laterales de las puertas, el alerón trasero partido, los nuevos paragolpes con color integrado en el propio plástico o las nuevas ópticas traseras con una barra de luz que las une, con el detalle del logo C-HR iluminado.

El Toyota tiene, en general, un diseño más atrevido que el del Kia, y esto gustará a algunos más y a otros menos. En cualquier caso, lo que está claro es que tiene una marcada personalidad, no deja indiferente. Probamos el Toyota C-HR en su versión 140H, con motor de gasolina de 1.800 centímetros cúbicos, acompañado de un motor eléctrico de 70 kW (95 CV); en total, entrega 140 CV. Este motor híbrido se une a una transmisión de tipo variador continuo, muy diferente a la del Kia. El Toyota C-HR tal y como os lo hemos probado en versión 140H y acabado Advance tiene una tarifa de 36.500 euros. Es un precio solo un poco superior al del Kia, aunque tened presente que en general, la tarifa del japonés, dependiendo del acabado y la motorización, es superior a la del coreano. Y mientras que el XCeed se ofrece con motores gasolina, diésel, híbrido o híbrido enchufable, el Toyota solo lo hace en híbrido, la gran especialidad de la marca, y ahora, como novedad, también en híbrido enchufable. Los dos miden prácticamente lo mismo en longitud y batalla, aunque el Kia es 6 centímetros más bajo, algo que después veréis que se nota en la habitabilidad interior. También es 3 centímetros más largo.

Enlace a la oferta de Toyota C-HR nuevo en Coches.net

Enlace a la oferta de Toyota C-HR de KM0 en Coches.net

Enlace a la oferta de Toyota C-HR de segunda mano en Coches.net

Sobre el papel, el motor de gasolina del Kia está más apretado que el del Toyota. Tiene menos cilindrada, 1500 cc y da más potencia, 160 CV. No obstante, la diferencia entre los dos no es acusada en cuanto a empuje, sino más bien en cuanto a manejo. Es decir, la diferencia la marca la tipología del cambio (de tipo doble embrague en el Kia y de tipo CVT en el Toyota), ya que en el Kia podemos practicar una conducción “convencional” subiendo y bajando marchas con las levas, mientras que en el Toyota el funcionamiento del variado continuo no permite ningún control sobre el mismo. En el Kia la carrocería no balancea apenas en curva, se mantiene neutra pese a tratarse de un coche más alto que un compacto, y lo hace en menor medida que en el Toyota, ya que cuenta con suspensiones un poco más rígidas.

El XCeed es un coche con un enfoque muy equilibrado. Es muy cómodo en cualquier terreno, desde vías rápidas a sinuosas carreteras de montaña, y a la vez acepta una conducción un poco más deportiva que la del C-HR. El Drive Mode Select permite al conductor personalizar la dureza de la dirección, la respuesta del acelerador y la respuesta del cambio de marchas. Hay tres modos: Eco, Normal y Sport.

La dirección del Kia es precisa e informativa. Transmite mucha confianza con un guiado estupendo. Los frenos también son correctos, aunque el tacto del pedal es extraño, ya que resulta algo brusco al inicio, como también ocurre con su competidor.

El Toyota C-HR también cuenta con un chasis de mucha calidad y bien puesto a punto. En esta última generación ha ganado rigidez estructural y se beneficia de un nuevo equipo de suspensiones. Sin embargo, los nuevos ajustes no logran evitar algunos balanceos en curva, algo superiores a los que presenta su rival. El C-HR es un crossover para viajar cómodamente a ritmo tranquilo, ya que tiene en el confort de marcha y conducción muy punto fuerte.
Cuenta, además, con una dirección predecible y más incisiva que la del Kia. Como su rival, el pedal de freno tiene un tacto algo brusco al inicio de su recorrido, para ser progresivo a continuación. 


El consumo oficial de estos coches está en 6,2 litros a los 100 para el XCeed y 4,8 para el C-HR. En nuestra prueba gastaron un litro más aproximadamente: 7,6 litros el Kia y 6,1 litros el Toyota, de media. El consumo del Toyota, en cualquier caso, es excelente, ya que si hilamos fino podemos situarlo fácilmente en torno a 5 litros. Vamos, lo que vendría a ser el consumo de un diésel en un coche de gasolina, híbrido en este caso.

La primera sensación que recibes al subirte al XCeed es de confort, se percibe un tacto más "premium" de lo esperado. Los logos GT en el volante, la palanca del cambio convencional en cuero, el piano black… todo ayuda a tener esta sensación. Tiene una pantalla central poco integrada, algo más pequeña que la del C-HR, pero que cuenta con buenos menús, incluida la navegación servicios en línea y Android Auto y Apple Carplay para conectar nuestro dispositivo móvil. Este coche, como su competidor, confía en botones de acceso directo para manejar el climatizador.

El Kia XCeed monta un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, configurable según el modo de conducción, con buenos gráficos y colorido. El cuadro de instrumentos digital y la pantalla de 12,3 pulgadas o la cámara de asistencia al aparcamiento se incluyen de serie en este acabado GT Line que os mostramos en el video. También se incluyen los pedales de aluminio, los logos GT Line del volante y el techo panorámico.

El interior del Toyota C-HR sigue la línea vanguardista de la generación anterior, y cuenta con un nuevo cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, el mismo tamaño que la pantalla táctil del centro del salpicadero. Esta pantalla muestra los menús del sistema Toyota Smart Connect, que cuenta con conexión Apple CarPlay y Android Auto, como buen detalle de conectividad, pero que se presenta algo pobre en calidad de los gráficos. En el Toyota, como en el Kia, los mandos del climatizador son físicos, separados de la pantalla. Hay buenos huecos en la consola central y, en este caso, el mando del cambio va por una pequeña palanca, con un manejo que al principio se hace extraño y requiere algo de adaptación.

Aunque en este Toyota encontramos algo de negro piano en la consola central, el acabado de todo el interior es bueno. Solo hay algunos plásticos en la parte inferior de las puertas que se ven algo pobres y el hecho de combinar poco materiales de diversas tonalidades hace que el salpicadero se vea demasiado monocolor.

En el C-HR el techo panorámico de tipo térmico, sin cortinilla, es una opción incluida dentro del pack SkyView que cuesta 2.500 euros e incluye también el portón de apertura y cierre automáticos, los faros delanteros LED o los embellecedores en color negro de la carrocería, entre otros.

Si vamos a la plazas traseras, vemos que en el Kia XCeed el ángulo de apertura de la puerta es algo mejor que en el C-HR, y la capacidad interior también es algo superior, tanto en distancia entre filas como en anchura de hombros. Pero tiene peor altura al techo. Estas plazas traseras del Kia equipan rejillas de ventilación y una toma USB C, además de bolsas en los respaldos y un mejor acabado en los apoyabrazos de las puertas. Correcto.

En las plazas traseras del Toyota C-HR destaca, como os comento, la altura al techo, pero la distancia entre filas y la anchura del habitáculo son un poco justas. También hay menos luz, porque la ventanilla tiene menos superficie acristalada, a pesar de ser un punto que en esta segunda generación Toyota ha mejorado. Os recomendamos, en cualquier caso, pedir el techo panorámico, para mejorar este aspecto. Como en el Kia, no hay apoyabrazos, pero es que tampoco equipa rejillas de ventilación, ni bolsas en los respaldos, algo sorprendente en un coche de este nivel. Sí hay una toma USB-C y como buen detalle, un pequeño gancho para colgar la chaqueta.

El maletero del Kia XCeed es un poco más grande que el del Toyota, al ofrecer 426 litros de capacidad y 1.378 litros de capacidad máxima, con los respaldos de la segunda fila abatidos. Hay un pequeño hueco bajo el piso, algo más espacioso que el del Toyota, en el que se guarda, básicamente, el kit reparapinchazos. En el Toyota C-HR la capacidad de carga es de 388 litros, ampliable a 1.102 litros. Tiene un maletero de formas muy cuadradas, muy profundo, pero sin doble fondo. Cuenta, como su rival, con 4 ganchos para sujetar la carga y ganchos para sujetar las bolsas. Se echa en falta una toma de 12 voltios.

Estas dimensiones y capacidad de carga demuestra que, en definitiva, ninguno de los dos destaca como vehículo familiar, aunque sí ofrecen una buena vida a bordo a cuatro pasajeros, mejor que cinco. No consiguen un equilibrio perfecto, pero sí son suficientemente versátiles y bonitos, hay que reconocerlo, para satisfacer las necesidades de una gran mayoría. De ahí que, con sus virtudes y defectos, sigan siendo dos auténticos superventas.